• Buscar

El bebé no se mueve

El bebé no se mueve

Empezar a notar las pataditas de tu bebé es un momento maravilloso, el problema es que a partir de ese momento te obsesionarás con notarlas lo más posible y, si te parece que hace un tiempo que no se  mueve, te pondrás nerviosa. ¿Cuándo hay que preocuparse realmente?

Publicidad

Índice

 

¿Cuándo se empiezan a notar las patadas?

Los movimientos del bebé, lo que llamamos “pataditas” aunque no siempre las hace con las piernas, se empiezan a notar en torno a la semana 20 de embarazo, antes en mujeres que ya han tenido embarazos previos. Esto suele ocurrir porque las primerizas se confunden los movimientos del bebé con gases u otros movimientos estomacales. Además, las mujeres más delgadas también suelen percibir los movimientos antes que las mujeres más gorditas.

No obstante, el feto se mueve de manera intencionada desde la semana 11 de gestación, por lo que las mujeres secundíparas pueden notarlo incluso en la semana 15. 

Es un momento maravilloso y muy emocionante ya que, a partir de ese momento, podremos saber que está bien cada vez que le notemos moverse dentro de nosotras. Normalmente, estos movimientos son descritos por las madres como tener palomitas de maíz en el estómago, movimientos de un pez nadando o burbujas que explotan.


¿Y si no el bebé no se nota?

Sin embargo, también puede ser muy angustioso si ocurre justo lo contrario, que pasamos un rato muy largo sin notarle. Pero antes de que salgas corriendo a Urgencias o a buscar a un profesional de medicina cada vez que pasen unas cuantas horas sin que le notes moverse, debes saber lo siguiente:

- Al principio, las pataditas serán pocas y muy espaciadas, no es hasta la semana 22 cuando empieza a notársele más y más fuerte.

- No te compares con otras embarazadas, cada bebé es distinto ya desde el útero materno. Algunos se mueven como locos y otros, muy pocos. Lo importante es que estés atenta a variaciones en su ritmo normal de movimiento, no a si se mueve más o menos que el bebé de tu prima.

- Hacia las últimas semanas también le notarás menos ya que se va quedando sin espacio y sus movimientos disminuyen.

- No es necesario que te vuelvas loca y lleves un registro de sus movimientos cada hora. Además, habrá días que se mueva más y otros que menos, pero eso es normal. Lo que tienes que controlar es que hace al menos 10 movimientos en dos horas tras tomarte un zumo o algo con azúcar y estar un buen rato tumbada sobre el lado izquierdo. Si no es así, ve al médico por si acaso.

- Si estás de pie o muy activa es probable que no le notes moverse aunque lo haga. Por eso, los movimientos deben contarse tumbada y relajada.

- Es habitual notarle más por la noche, cuando estás dormida.

- La ubicación de la placenta también influye en si se nota más o menos al feto. Así, la placenta ubicada en la cara anterior del útero puede hacer que no sientas los movimientos del bebé con la misma facilidad que si la placenta fuera posterior. En estas situaciones, es probable que se tarden algunas semanas más en sentir los movimientos. 

- Ten en cuenta que se pasan la mayor parte de tiempo dormidos y que, dormidos, se mueven menos. Por lo tanto, puede que no notes al bebé moverse en tu tripa porque está en estado de reposo y descansando.

- Como hemos dicho, antes de preocuparte y ponerte nerviosa, come algo dulce y túmbate sobre el lado izquierdo para asegurar que le llegan los nutrientes y la glucosa. Si pasan dos horas y no se ha movido nada, mejor ve al médico pero no te asustes, no tiene por qué haber pasado nada grave.


¿Es necesario estimular el movimiento del bebé?

Los expertos recomiendan estimular el movimiento del bebé desde las primeras etapas de la gestación. Esto es porque se creen que en este periodo es cuando los niños empiezan a fortalecer su cerebro. Así, estimularlo le permitirá contar con los sentidos bien desarrollados desde su nacimiento.

La constante interacción entre madre y bebé mientras está en el viente va a permitir mantener un fuerte vínculo entre ellos. Además, esto le generará seguridad y confianza, permitiéndole ser un individuo sano. Así, será más fácil que se relacione con otras personas, generando relaciones de confianza con los integrantes del núcleo familiar (y especialmente de la madre).


¿Cómo puedo estimular el movimiento del bebé?

El útero es el lugar más cómodo que existe para un bebé. Se encuentran a una temperatura perfecta, flotando, a oscuras y les proporciona todo lo que necesita para vivir. Por eso, muchos bebés son perezosos y les cuesta moverse o hacerse sentir.

- Con sonido: puedes colocar música a un volumen medio en la barriga. Da igual el tipo de música le guste a la madre, estará bien. La música se propaga en ondas que pueden ser transmitidas a través del agua (y del líquido amniótico). Esto es muy fácil de percibir para el bebé. Si acompañas la música de baile, la estimulación es aún mayor.  Escuchando música se enriquece el desarrollo físico y emocional del bebé, pero ten en cuenta que si escuchas Mozart o Bach el ritmo cardíaco del bebé se relajará induciendo al bebé a un estado de serenidad. Si quieres que el bebé se mueva, opta por una música más movidita.

Además, es importante que le hables al bebé, así reconocerá tu voz incluso antes e haber nacido.

- Con luz: puedes posar una linterna sobre el abdomen moviéndola de un lado a otro. Seguramente logres captar su atención y consigas que se mueva. Los bebés desarrollan el sentido de la vista a partir del sexto mes. Si realizas estos ejercicios de estimulación con luz ayudas a desarrollar la musculatura ocular del bebé.

- Con masajes: cuando te encuentras en el tercer trimestre del embarazo, es muy fácil sentir los pies, la espalda o la mano. En esos momentos puedes aprovechar para masajear la zona en la que le estás sintiendo. Así estimularás su movimiento y establecerás una relación estrecha con él.

- Presiona levemente tu vientre con pequeñas pulsaciones con los dedos. El bebé notará que algo pasa a su alrededor y empezará a realizar movimientos.

- Come algo azucarado: el bebé suele moverse cuando hay cambios en el área interna del cuerpo de la madre. Normalmente, esto ocurre después de comer ya que los niveles de azúcar en sangre aumentan, haciéndolos estar más inquietos. Por eso, si quieres que tu bebé se mueva, puedes tomar agua azucarada o alguna comida que contenga azúcar para estimular sus movimientos.

- Cambia de posición con frecuencia, sobre todo puedes recostarte sobre tu lado izquierdo. Acompaña los movimientos de respiraciones largas.


Fuente:

Huggins-Cooper, Lynn (2005), Maravillosamente embarazada, Madrid, Ed, Nowtilus.

Fecha de actualización: 02-03-2021

Redacción: Irene García

Publicidad
Publicidad

TodoPapás es una web de divulgación e información. Como tal, todos los artículos son redactados y revisados concienzudamentepero es posible que puedan contener algún error o que no recojan todos los enfoques sobre una materia. Por ello, la web nosustituye una opinión o prescripción médica. Ante cualquier duda sobre tu salud o la de tu familia es recomendable acudir a unaconsulta médica para que pueda evaluar la situación en particular y, eventualmente, prescribir el tratamiento que sea preciso.Señalar a todos los efectos legales que la información recogida en la web podría ser incompleta, errónea o incorrecta, yen ningún caso supone ninguna relación contractual ni de ninguna índole.

×