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Estoy amamantando y tengo mucha hambre

Estoy amamantando y tengo mucha hambre

Durante la lactancia materna, especialmente en las primeras semanas, cuando el organismo se está adaptando a este nuevo proceso, es normal sentir mucha hambre y sed, sobre todo durante las tomas. Si es tu caso debes procurar saciar el hambre con alimentos sanos y nutritivos, no te decantes por la bollería o los snacks salados o engordarás en lugar de perder el peso ganado en el embarazo.

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Índice

 

¿Por qué tengo tanta hambre?

Seguro que has oído decir que la lactancia materna ayuda a adelgazar ya que se consumen gran cantidad de calorías dando el pecho. Pero ahora que llevas un par de semanas dando el pecho a tu bebé y que no paras de comer porque sientes hambre a todas horas, te planteas si esto será verdad en tu caso o si te pasa algo raro que hace que tengas tanta hambre.

Lo primero es que no debes preocuparte ya que es normal tener más hambre durante la lactancia, especialmente en las primeras semanas ya que el organismo se está recuperando del parto, tiene que adaptarse a la lactancia y, además, las tomas son más frecuentes. Todo esto hace que el organismo demande más alimento para cubrir las necesidades calóricas que tienes y poder producir leche sin problemas. Así, los expertos indican que una mujer lactante tiene que consumir un 20% más de calorías al día que una que no esté dando el pecho ya que amamantar produce un gran gasto de energía, por lo que es normal que tengas más sensación de hambre para cubrir esas necesidades extras de calorías.

Además, al dar el pecho se produce una hormona llamada oxitocina que funciona como un neurotransmisor proporcionando sensación de bienestar a la mamá, pero también despertando su apetito y haciendo que sienta más hambre. Asimismo, la oxitocina favorece la digestión y ayuda a aprovechar al máximo la ingesta de nutrientes.

Por todo ello, es normal que sientas más hambre mientras estés dando el pecho. De igual modo, aumenta la sensación de sed, sobre todo en los primeros días, por lo que deberás tener siempre a mano una botellita de agua para beber unos 2.5 litros de agua diarios mientras estés dando el pecho.
 

Alimentación para no engordar

Por lo tanto, no debes alarmarte por comer más ya que es normal, pero eso sí, si no quieres que esas calorías extra que ingieres se conviertan en kilos extra, debes seguir una dieta sana y variada durante la lactancia que no solo te ayudará a perder peso, sino también a estar más sana y asegurar todos los nutrientes que requiere tu organismo y el del bebé.

De esta forma, se recomienda que hagas 5 o 6 comidas al día pero más ligeras, especialmente las tomas entre las comidas principales. Si tienes hambre y no es la hora de comer ni de cenar, puedes tomar un lácteo desnatado, una pieza de fruta o una tostada de pan integral. También puedes beber infusiones, agua o zumos naturales para mantenerte bien hidratada.

En cuanto a las comidas principales, opta por verdura a la plancha o cocida con un chorrito de aceite de oliva, legumbres frías o calientes según sea la época del año y pasta integral de primer plato. De segundo puedes comer huevos, carnes blancas al horno, a la plancha o cocidas o pescado. Y de postre lácteo desnatado o fruta. Alterna los platos entre la comida y la cena para que tu dieta sea más variada y evita las frituras, las grasas y los azúcares, que no aportan apenas nutrientes y hacen que engordes.

Recuerda que durante la lactancia puedes comer de todo, solo tienes que evitar un consumo excesivo de cafeína y el alcohol ya que, aunque en menores cantidades que durante el embarazo, también llega al feto a través de la leche, por lo que es mejor que no bebas nada de alcohol o que, si quieres tomarte una copa en una ocasión especial, lo hagas justo después de la toma.

De esta forma, te sentirás con más energía y activa y, a la vez, aportarás a tu dieta todos los nutrientes que necesitas para una dieta sana y completa.


¿Qué alimentos son sanos y quitan el hambre?

- Aguacate: a pesar de que el aguacate tenga fama de ser muy calórico (160 kcal por cada 100 gramos), es un gran aliado para bajar de peso. El aguacate tiene una gran capacidad saciante gracias a su bajo índice glucémico. Esto quiere decir que aumenta poco el azúcar en sangre y, por tanto, no provoca una descarga de insulina ni la sensación de hambre. Además, un estudio asegura que la ingesta de un aguacate al día disminuye en un 40% las ganas de picotear en las 3 horas siguientes. También es un excelente aliado para controlar el colesterol y es muy fácil incluirlo en la dieta (tostada, ensalada, guacamole, etc.).

- Avena: es un cereal de absorción lenta y bajo contenido en calorías. Además tiene una gran cantidad de fibra.

- Patata cocida: el poder saciante de la patata cocida es superior al del arroz, al del plátano y al del pan. Además, “no contiene grasa”.

- Frutos secos: los expertos indican que los frutos secos quitan el hambre debido a su alto contenido en fibra y también porque se deben masticar bien. Además de esto, sus grasas saludables ayudan a bajar el colesterol.

- Salmón: posee un alto contenido en ácidos grasos Omega 3, lo que hace que te sientas satisfecha durante más tiempo. Además, aumenta los niveles de leptina, hormona del apetito.

- Manzana: es la fruta reina de las dietas y de los expertos consultados. Quita el hambre debido a su alto contenido en agua y fibra y su bajo contenido en calorías hace que sea una opción ideal. Es mejor comerla con piel (lavándola bien) ya que así combate el estreñimiento.

- Zanahoria: tiene todo lo que puede interesar en estos casos: fibra, pocas calorías, mucha agua, muchos nutrientes y bajo índice glucémico. Una buena idea es guardarla en un recipiente cortada en tiras para que sea fácil recurrir a ella en momentos de necesidad.

- Lentejas: son ricas en almidón resistente, un carbohidrato que pasa a través del estómago sin ser digerido y se fermenta en el intestino grueso. Esto puede hacer que el cuerpo “use la grasa almacenada como combustible”.


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Una de las primeras inquietudes que tiene la futura madre es "¿cómo sé cuánto tiempo tengo de embarazo?". Para saberlo de manera orientativa puede contar las semanas que han pasado desde la última regla siendo el resultado las semanas de gestación. Cuando se visite al obstetra éste podrá dar una cifra exacta a través de la primera ecografía que se le realiza al feto.

Fuente:

Smulders, Beatrijs (2010), Posparto seguro y los primeros meses tras el parto, Ed. Medici.

Fecha de actualización: 21-12-2020

Redacción: Irene García

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