• Buscar

Menús escolares

Menús escolares

La alimentación en la guarde: Son miles los niños en edad escolar que utilizan los servicios del comedor. Por ello, éste debe servir como marco educativo para que las nuevas generaciones aprendan y adquieran unos hábitos de vida y actitudes saludables. Y al mismo tiempo, el menú debe garantizarles una alimentación sana y equilibrada que favorezca su salud, su crecimiento y desarrollo

Publicidad

Indice

 

¿Cómo debe ser el menú escolar?

Uno de los objetivos prioritarios del menú escolar debe ser fomentar el consumo de una dieta equilibrada mediante la variedad de alimentos, preparaciones y texturas, dando prioridad a los alimentos más conflictivos en la alimentación de los pequeños -legumbres, pescado, frutas y verduras-, y basándose en las raciones y en la frecuencia recomendadas para cada edad.

Para ello, cada vez en más centros educativos, el equipo responsable del comedor o la empresa que gestiona la alimentación, cuenta con asesoramiento dietético a la hora de diseñar los menús. Pero el equilibrio nutricional no se consigue sólo con la comida del mediodía, aunque ésta suponga cerca del 35% de la energía diaria que necesitan los niños. Es necesario que el desayuno y la cena complementen la comida, y ahí entran los padres y su responsabilidad para educar a sus hijos en buenos hábitos alimentarios. Para lograrlo, es necesario conocer qué comen nuestros hijos en la escuela.

“Una alimentación de calidad y racional en los periodos de crecimiento favorece una etapa de madurez y una vejez más sana”, nos explica Javier Aranceta, Presidente de la Sociedad Española de Nutrición Comunitaria (SENC).


Preguntas que los padres deben hacerse sobre la alimentación de los niños en el colegio

1. ¿Conocéis el menú del colegio de vuestros hijos? A los niños y niñas que se quedan a comer en el comedor se les entrega una plantilla con el menú semanal. Si no es así, debéis exigir al centro o a la empresa que gestiona el servicio de alimentación esa información. Así, podéis comprobar y exigir que los menús sean variados y apetecibles.

2. ¿Tenéis la información nutricional de los menús? Los menús escolares se deben ajustar a las recomendaciones dietéticas en cuanto a raciones, frecuencia de consumo de alimentos, aporte energético y de nutrientes recomendados según la edad del niño.

3. ¿Son menús saludables y equilibrados? Para ello, comprobad si los menús ofrecen variedad de alimentos, de preparaciones y texturas, y en las cantidades adecuadas a la edad del niño.

4. ¿Os habéis fijado si los menús varían la forma de cocinar y presentar los platos? Comprobad también que no se exceda el menú con las preparaciones grasas (fritos, rebozados o empanados), que no se presenten las verduras siempre en purés o cremas. Lo mismo puede decirse del pescado (no siempre merluza rebozada) o de las carnes (pollo asado o frito o delicias de pollo…).

Aseguraos de que los alimentos precocinados y los derivados de carne grasos tengan presencia ocasional en el menú escolar, ¡y también en el menú familiar! No es un buen hábito que en una misma semana los niños coman albóndigas, hamburguesas, salchichas, pizza y varitas de pescado.

Los segundos platos irán acompañados de guarniciones variadas: salsas, verduras, ensaladas, puré de patata, etc. ¡y no siempre patatas fritas o salsa de tomate! Y los postres de preferencia serán la fruta fresca y los lácteos sencillos; y ocasionalmente  dulces, bizcocho, helados, etc.

5. ¿Incluye el menú alimentos de temporada? Los alimentos de temporada son muy nutritivos y más económicos. Comprobad que el menú incluya frutas frescas, hortalizas, verduras y pescados frescos y de temporada.

6. ¿Varía el menú según la época del año? En primavera y verano los niños y niñas aceptan mejor las preparaciones más frescas y ligeras (ensaladas de arroz, de pasta, de patata, de legumbres, cremas frías) mientras que en otoño e invierno son deseables preparaciones más consistentes que se sirven a mayor temperatura: potajes, cocidos, guisos.

7. ¿Os ofrecen la posibilidad de menús alternativos? Se debe contemplar la posibilidad de adaptar los menús a cualquier trastorno de salud o enfermedad que puedan sufrir los niños: aguda, como una diarrea o un estreñimiento, o crónica como la diabetes, la intolerancia al gluten o las alergias alimentarias. Y dada la diversidad cultural actual de los colegios, también se deben ofrecer platos alternativos para niños de otras culturas: vegetarianos, musulmanes, etc.

8. ¿Complementáis la comida del mediodía con el resto de comidas del día? La información que se detalla en el menú escolar os sirve para que os resulte más fácil ofrecer cada día a vuestros hijos e hijas una dieta variada y equilibrada. Para Aranceta, las cenas en general son un desastre, “en el colegio piensan que ya cenará en casa sanamente, y en casa que ya comió en el cole adecuadamente. Con lo que el uno por el otro… Es necesario conocer el menú del colegio y completar en la cena los nutrientes necesarios. Hay que sacar tiempo para comprar adecuadamente y preparar una cena sana y variada para mejorar la nutrición de nuestros hijos”.
 

Informe “Dime cómo comes”

Este informe, elaborado por Javier Aranceta, refleja los hábitos, preferencias y carencias de la población escolar. Algunas de sus conclusiones recogen cifras interesantes sobre la comida en los colegios:

- El 70% de los usuarios manifiesta su agrado por el servicio ofertado en el comedor escolar, tanto desde el punto de vista cuantitativo como cualitativo.

- En torno al 10% de los usuarios expresan la necesidad de mejora de los menús en relación con la forma de presentación y/o temperatura de los platos.

 - El 50% de los alumnos usuarios de los comedores escolares estudiados refiere la necesidad de mejorar el sabor de algunos de los platos ofertados.
 

 

Consejos desde la SENC

Para Javier Aranceta, los colegios tienen una serie de obligaciones que deben cubrir para mejorar la alimentación y la educación alimentaria de los niños. Estas tareas se clasifican en 7 puntos diferentes:

1. Aula: Cubrir los conocimientos, habilidades y actitudes positivas respecto de la alimentación.

2. Comedor: Asegurar aporte nutricional, calidad, cantidad, perfil alimentario. Introducir nuevas texturas, sabores, cultura gastronómica, las diferencias geográficas… Incorporar el comedor al proyecto educacional. Con la llegada del nuevo curso, nuevas recetas, que los niños no coman todos los jueves del año lo mismo. También es necesaria la colaboración entre los padres y los profesores, así como la formación continuada del personal de cocina y comedor. Es básico mirar al niño a los ojos cuando se le sirve la comida, no hacerlo poniendo cara de asco: Creer en que lo que se da es lo mejor.

3. Recreo: Activo, dinámico, no sedentario. Contratar monitores y personal para que se realicen actividades.

4. Talleres extraescolares: Conocer y saber hacer. Educación alimentaria, enseñar a comprar, a cocinar, etc.

5. Vending (máquinas expendedoras): Normalmente sólo tienen elementos con poco interés nutricional (patatas fritas, bollos), por eso se han prohibido en los coles, pero no en institutos. Hay que incorporar yogures, zumos, frutas, compotas.

6. Deporte escolar: Incentivar a las familias a que jueguen y darles apoyo institucional. Abrir los colegios los fines de semana con actividades educativas y deportivas.

7. Colaboración de las familias: Los padres deben implicarse en el proceso y las AMPAS tienen que ayudar a los colegios a desarrollar esta educación alimentaria.
 

 

 


Fuentes: Javier Aranceta, Presidente de la Sociedad Española de Nutrición Comunitaria (SENC). Informe “Dime cómo comes”. Fundación Eroski.

Fecha de actualización: 18-02-2022

Redacción: Irene García

Publicidad
Publicidad

TodoPapás es una web de divulgación e información. Como tal, todos los artículos son redactados y revisados concienzudamentepero es posible que puedan contener algún error o que no recojan todos los enfoques sobre una materia. Por ello, la web nosustituye una opinión o prescripción médica. Ante cualquier duda sobre tu salud o la de tu familia es recomendable acudir a unaconsulta médica para que pueda evaluar la situación en particular y, eventualmente, prescribir el tratamiento que sea preciso.Señalar a todos los efectos legales que la información recogida en la web podría ser incompleta, errónea o incorrecta, yen ningún caso supone ninguna relación contractual ni de ninguna índole.

×