Parto con hernia discal

Índice

• ¿Qué es una hernia discal?
• ¿Qué causa la hernia discal?
• ¿Qué síntomas puede causar la hernia discal en el embarazo?
• ¿Tendré un parto vaginal o una cesárea?
• ¿Qué recomendaciones puedo seguir si tengo una hernia discal?

 

¿Qué es una hernia discal?

Desde el punto de vista anatómico y fisiológico, el disco intervertebral está compuesto por el anillo fibroso, el cual a su vez se encuentra compuesto por fibras de colágeno cuya función es soportar las tensiones, y el núcleo pulposo, compuesto principalmente por proteoglicanos, y cuya función es resistir y distribuir la fuerza.

La hernia discal, como definición, es un daño del disco intervertebral que, al protruirse a través del anillo fibroso, produce un adelantamiento anormal del núcleo pulposo, dando lugar a un cuadro neurológico que comprime las raíces lumbares, causando así un síndrome compresivo radicular lumbosacro que se caracteriza por dolor lumbar y dolor ciático, limitando los movimientos de la columna.
 

¿Qué causa la hernia discal?

Su principal causa es por algún trauma, aunque también puede aparecer por causas metabólicas y malformaciones congénitas que pueden originar una hernia discal lumbar. De acuerdo a cómo se forma esta patología, la hernia discal, como se mencionó anteriormente, es de origen fundamentalmente traumático como pequeños traumatismos repetitivos por esfuerzos excesivos de columna lumbar -por ejemplo, levantamiento de cosas pesadas-, movimientos de rotación repetitivos, etcétera. En general, la hernia discal aparece después de un esfuerzo por levantamiento de carga con el tronco inclinado hacia delante y aparece comúnmente en la parte posterior y lateral del disco, justo en el lugar donde el ligamento longitudinal posterior es más delgado; cambiando de lugar lentamente a la raíz del nervio ciático hasta que llega el momento en el que la pared posterior del agujero de conjunción la frena. Sin embargo, la raíz prensada va a manifestarse con la aparición de algún síntoma que será por lo regular dolores en el área afectada, aunque es importante comentar que, dependiendo del nivel en el que se produce la hernia discal y la presión radicular, la sintomatología que presente cada persona puede ser distinta comenzando por la sensación de dolor.
 

¿Qué síntomas puede causar la hernia discal en el embarazo?

En las etapas más avanzadas del embarazo, el desarrollo del bebé causa una relajación que se presenta en la musculatura abdominal y el desplazamiento hacia delante del centro de gravedad y de la columna vertebral, lo que modifica considerablemente la posición de la pelvis y raquídea causando lumbalgias, mejor conocidas como dolores de espalda.

Uno de los principales motivos de consulta en las embarazadas es el dolor de espalda por cualquiera de sus causas y en las mujeres embarazadas su tratamiento se vuelve complejo, delicado y diferente al que normalmente se ocupa con las personas sin embarazo. El tratamiento debe de encaminarse a métodos conservadores, intervenciones sin cirugía y evitando los medicamentos. Así mismo, deben de ser de naturaleza no invasiva cuidando la integridad tanto de la madre como del bebé.

Además de estos dolores de espalda se puede percibir:

- Molestias al realizar acciones como toser o hacer algún esfuerzo poco habitual

- Adormecimiento y hormigueo

- Incomodidad en el cuello o al hacer movimientos giratorios

- Debilidad muscular

- Espasmos
 

¿Tendré un parto vaginal o una cesárea?

La decisión de tener un parto vaginal o por cesárea la debe de tomar tu ginecólogo cuando llegue el día junto con tu anestesiólogo, evaluando las diferentes opciones y seleccionando la mejor tanto para la situación clínica de la madre como para el bebé.

En muchas ocasiones por la gravedad de la hernia puede programarse una cesárea pues el peso del bebé causa malestares graves a la futura mamá.
 

¿Qué recomendaciones puedo seguir si tengo una hernia discal?

Por todo lo anterior, si conoces que tienes una hernia discal y estás embarazada o estas próxima a hacerlo te recomendamos que cuides tu peso, evites hacer ejercicios de alto impacto, utilices zapatos que no tengan tacón y, si aún no estás embarazada, platícalo con tu médico para que te mencione todas las alternativas para que lleves tu embarazo de la mejor manera y puedas llegar a término.

Otras recomendaciones son:

- Evitar realizar esfuerzos o movimientos bruscos.

- Acudir al médico para indicarte el método adecuado de alivio del dolor en el embarazo. Recuerda que durante el embarazo no se recomienda tomar ciertos medicamentos.

- Hacer ejercicios físicos suaves que ayuden con el estiramiento.

- Realizar yoga, natación o Pilates.

- Buscar ayuda en algún centro de rehabilitación y fisioterapia.

- Cuidar la postura durante el embarazo.

- Distribuir el peso del cuerpo en ambas piernas.

- Dormir de lado.

- Intentar no ganar demasiado peso.