Consejos para una buena salud mental en la adolescencia

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• ¿Cómo es la salud mental en la adolescencia?
• Consejos para una buena salud mental en la adolescencia

 

¿Cómo es la salud mental en la adolescencia?

Con la llegada de la pubertad se producen una serie de cambios físicos que son apreciables, como el desarrollo óseo y muscular, el crecimiento de las mamas en las niñas, la menarquía o primera menstruación, la aparición de vello…, pero también otros menos visibles que se producen en el sistema nervioso central. En el cerebro, tanto la sustancia blanca como la gris sufren modificaciones que se traducen en transformaciones psíquicas, emocionales y conductuales.

Al acabar esta etapa cristalizarán nuestras defensas, nuestra autoestima, nuestra manera de vincularnos, de vernos y sentirnos, de comprender el mundo y de situarnos en él. Una etapa en la que quedará establecida nuestra personalidad. Una etapa para consolidarnos como personas autónomas.

Por lo tanto, es una etapa trascendental en nuestra vida y la capacidad de nuestros hijos para adaptarse a ella depende en gran medida del funcionamiento psicológico previo. Aunque más del 60% de los jóvenes padece malestar o algún síntoma psiquiátrico en algún momento de su adolescencia, este no es tan intenso como para desmoronar su vida y lo normal es que consigan atravesar los momentos de sufrimiento e incertidumbre manteniendo sus interesas, sus estudios, sus amistades y la relación con su familia. La angustia que los acompaña en estos años es una emoción que moviliza, impulsa a nuestros hijos a encontrar su camino, a plantearse nuevas preguntas y a desarrollar herramientas que los ayuden a adaptarse.

Sin embargo, ser adolescente actualmente es más complicado debido a las redes sociales, los filtros que nos ponemos, la presión y autoexigencia, la falta de acompañamiento de los padres por el estrés y el trabajo…

Según datos de la Organización Mundial de la Salud, los trastornos mentales representan el 16% de la carga mundial de enfermedades y lesiones en personas de entre 10 y 19 años y este problema no suele surgir en la adolescencia, sino antes, solo que es en esta etapa cuando se manifiesta.

La depresión es la enfermedad mental más habitual y el suicidio es la tercera causa de muerte entre jóvenes de 15 a 19 años. Para evitar estos y otros problemas que pueden surgir en estos años es importante cuidar la salud mental de nuestros hijos desde la infancia.
 

Consejos para una buena salud mental en la adolescencia

1- Mantener la comunicación y las actividades familiares

La comunicación sincera y fluida con los hijos es fundamental para que, al llegar a esta etapa más complicada, sean capaces de abrirse a nosotros cuando tengan algún problema o lo estén pasando mal. Por eso, siempre que tus hijos quieran contarte algo debes prestarles atención y escucharles por muy liado que estés o por muy insignificante que te parezcan sus problemas. Para ellos es importante y eso es lo que cuenta. Así, confiarán en ti y seguirán contándote sus problemas cuando estos sean más graves.

Además, debes intentar hacer actividades divertidas con ellos, pasar mucho tiempo en familia o incluso pasar tiempo sin hacer nada para que surjan las conversaciones importantes.

2- Establece límites

Los niños necesitan límites, eso lo sabe todo el mundo, pero los adolescentes también. Estos les dan seguridad y les permiten saber hasta dónde pueden llegar. Aunque tu hijo se rebele contra los límites y las normas de casa, debes mantenerlos ya que son muy importantes para su desarrollo. Eso sí, a esta edad puedes ir modificándolos y adaptándolos a su edad, su madurez e incluso puedes consensuarlos con él para que sea más propenso a respetarlos. Y a la vez que marcas límites, debes ir dándole más libertad e independencia, sobre todo si va comportándose con madurez y responsabilidad.

3- No perdáis el respeto

El respeto debe ser el pilar de vuestra casa. Nunca debéis insultaros, humillaros ni deciros cosas hirientes de las que luego podáis arrepentiros.

4- Mantén horarios y rutinas

Mantener horarios y rutinas en la adolescencia, como horarios para las comidas, los estudios, el tiempo de ocio, el sueño… ayuda a los chicos y chicas a planificarse, desarrollar su responsabilidad y aprender dónde están los límites. 

5- Cuida a sus amigos

Las amistades son lo más importante en esta etapa, más que la familia, así que es normal que quiera pasar mucho tiempo con sus amigos. Es importante que muestres interés por sus amigos y los conozcas. Si alguno no te gusta no debes prohibirle salir con él, pero sí mostrarle los peligros a los que puede enfrentarse.

6- Fomenta un estilo de vida saludable

Cuida su alimentación y evita los ultraprocesdaos, la comida basura o los azúcares y refrescos. Procura que duerma las horas necesarias cada día y se acuesta pronto. Es importante que haga ejercicio físico con regularidad y háblale de los peligros del tabaco, el alcohol o las drogas para evitar que las prueba.

7- Cuidado con las redes sociales e internet

Internet, los móviles y las redes sociales son un gran peligro, pero no consiste en prohibírselos, ni siquiera en ejercer control parental, sino en explicarle cómo debe usarlos y sus peligros para evitar ciberacoso, grooming, etc. Debes limitar el uso de dispositivos electrónicos para que no se pase todo el día conectado y explicarle que no se deben compartir datos personales, fotos íntimas ni usar las redes para insultar o molestar.

8- Amor y apoyo

Por último, lo más importante es que siempre estés al lado de tu hijo y le muestres tu apoyo incondicional y tu amor. Debe saber que siempre, pase lo que pase y haga lo que haga, estarás a su lado ayudándole y dándole tu amor.

Y si notas síntomas preocupantes de trastornos como depresión, ansiedad, abuso de alguna sustancia, trastornos alimentarios… debes buscar inmediatamente ayuda de un profesional de psicología.