¿Cómo enseñar habilidades sociales?

Indice

• ¿Qué son las habilidades sociales?
• Habilidades sociales básicas
• ¿Por qué hay que enseñar las habilidades sociales?

 

¿Qué son las habilidades sociales?

Las habilidades sociales son un conjunto de capacidades que permiten el desarrollo de un repertorio infinito de acciones y conductas que hacen que el niño se desenvuelva con total solvencia y eficacia en lo social, aunque lo cierto es que estas habilidades sociales en niños suelen ser algo complejo porque están formadas por un amplio abanico de ideas, y también sentimientos, creencias y valores que a su vez son fruto tanto del aprendizaje como de la experiencia. ¿Quieres que tu hijo desarrolle adecuadamente sus habilidades sociales? Presta atención a estos consejos para su educación. 

Habilidades sociales básicas

- escuchar

- iniciar una conversación

- formular una pregunta determinada

- dar las gracias

- presentarse

- presentar a otras personas

- realizar algún cumplido (del tipo que sea)

 

¿Por qué hay que enseñar las habilidades sociales?

Es impresdindible enseñarlas las habilidades sociales ya que se tratan del conjunto de conductas que va a permitir a estos niños relacionarse con los demás de manera satisfactoria y porque serán, por supuesto, imprescindibles en cualquier momento de sus vidas. Además, el aprendizaje de estas habilidades sociales es totalmente beneficioso porque ayuda a expresarse y también a comprender a los demás.

Para enseñar habilidades sociales a los niños lo más importante a tener en cuenta es que resulta necesario crear un lenguaje social desde edades bien tempranas, un lenguaje comprensivo, efectivo y básico que incluso niños menores de dos años van a poder comprender. Además, a los dos años es un momento decisivo en el crecimiento del niño porque es ahora cuando comienza a reclamar su temprana autonomía, a perfilar su carácter y a ser mucho más receptivo. Dicho lenguaje social que va a favorecer el desarrollo de las habilidades sociales en los niños se basa principalmente en:

- aprendizaje de una escucha activa. No se puede hablar mientras la otra persona está diciendo algo. Es necesario, por tanto, respetar los tiempos para que en cada momento hable uno. Al principio esto será, quizás, lo que más les cueste a los peques porque todavía no tienen suficiente capacidad de autocontrol. Este es bastante limitado. Para que puedan aprender esto adecuadamente habrá que enseñarles con el ejemplo. Si sus padres no les interrumpen, ellos probablemente tampoco lo harán.

- demostración de la gratitud y el agradecimiento. Los niños deben ser capaces de diferenciar una muestra de solicitud y/o pedida, pero también una de agradecimiento. Saber decir “por favor”, cuando necesiten pedir algo, y dar las “gracias” siempre como muestra de agradecimiento. Tanto por la vía explícita como por la vía implícita tienen que saber la diferencia entre una petición y exigencia.

- aprendizaje de las “sabidurías”. Las sabidurías incluyen el refuerzo positivo, el saber dar y decir gracias, el saber tolerar y también compartir, reconocer cuándo alguien hace algo bien, y saber cuándo uno se equivoca. Es importante enseñar al niño a consolar, elogiar a los demás, empatía o solidaridad. Son habilidades básicas para las relaciones sociales. 

Por último, intenta dedicar tiempo a su autoestima. ¿De qué manera? Siendo su mejor modelo, una buena referencia y también la figura que imitar día a día; dedicándoles tiempo de calidad, es decir, que vuestra presencia sea para él nutritiva y enriquecedora; ofreciéndole oportunidades para que día a día se sienta competente de manera que vaya poco a poco construyendo una buena autoestima; y valorando siempre sus esfuerzos, enseñándole siempre lo correcto de las cosas antes de recurrir a la crítica negativa o a la sanción.

Y nunca olvidaros de la asertividad, clave en las relaciones sociales en los niños. Enseñar a los niños el arte de la asertividad debe ser una enseñanza obligada de padres y profesores, que se relaciona a su vez con la autoestima. Hay que ofrecer a los niños herramientas para que aprendan a gestionar de forma temprana sus emociones porque solamente de esta forma podrán darse cuenta de que la rabia o la ira deben controlarse para expresar sus enfados de manera correcta e inteligente.

Es normal que vosotros, como padres y madres que sois, os preocupéis si vuestro hijo no desarrolla las habilidades sociales adecuadas. La falta o el escaso desarrollo de dichas habilidades puede suponer algo bastante doloroso para cualquiera. Recordemos que somos personas que conviven en sociedad nos guste o no, pues es parte de nuestra naturaleza y también algo imprescindible en la vida de cualquier persona emocionalmente sana.

Esto, a su vez, tiene repercusión en los demás ámbitos de la vida como son el laboral, el escolar, el sentimental, el personal, etc. Pero ¿saben los padres y las madres de estos niños cuáles son los puntos clave de dichas habilidades? Las habilidades sociales se adquieren a través del aprendizaje. No son innatas, y tanto los niños como las niñas han de aprenderlas con el tiempo pues no nacen con ellas, es desde ese momento cuando los niños comienzan a relacionarse poco a poco.

También las habilidades sociales son recíprocas por naturaleza al necesitar también de las relaciones por parte de los demás para su posterior desarrollo. Incluyen conductas verbales y no verbales, y están determinadas por el reforzamiento social tanto positivo como negativo, y son capacidades, además, completamente necesarias para el desarrollo integral de las personas y el control de sus emociones.

¿Y tú hijo? ¿Está desarrollando buenas habilidades sociales?