¿Cuándo se recomienda hacer una ecografía 4d?

Indice

• ¿En qué consisten las ecografías 4D?
• ¿Son malas estas ecografías?
• Consejos antes de hacerse una ecografía 4D

 

¿En qué consisten las ecografías 4D?

La ecografía 4D se diferencia de la eco en tres dimensiones en que muestra también el movimiento fetal, lo que permite a la vez diferenciar claramente los rasgos del bebé y ver cómo se mueve dentro del útero mientras se está haciendo al ecografía.

Este tipo de ecografías forman parte de lo que se conoce como “ecografías emocionales”, ya que no son necesarias para comprobar el correcto desarrollo y crecimiento del feto, se hacen solo para que los padres puedan ver mejor a su bebé y conocerlo un poquito más antes de que nazca. Por eso, no forman parte de las pruebas rutinarias del embarazo ni están cubiertas por la seguridad social o los seguros privados y deben contratarse aparte. Los precios varían de unos centros y ciudades a otros, pero, si estáis interesados, existen ofertas muy buenas para poder hacerse una eco en 4D en el embarazo.
 

¿Qué momento es mejor para hacerse la ecografía 4D?

Los expertos afirman que entre la semana 26 y la 32 de gestación, ya que la proporción de líquido amniótico es adecuada y el tamaño fetal intermedio. Además, su desarrollo neurológico le permite hacer ya muchas actividades por lo que podrás ver cómo se ríe, se chupa el dedo, abre y cierra la boca, se mueve, etc.

No obstante, pueden hacerse desde la semana 12 de embarazo, aunque no se recomienda tan pronto, ya que el bebé no está totalmente formado y sus rasgos aún tienen que desarrollarse del todo. Por eso, es mejor a partir de la semana 20, cuando su formación se ha completado, y antes de la semana 36, cuando es tan grande que apenas se le podría ver moverse ni cabe ya entero en la pantalla. Y, aunque es cierto que a partir de la semana 32 se verá mucho mejor su carita y sus rasgos definitivos, si el bebé está muy encajado o de espaldas puede ser posible no verle nada de nada, por eso lo mejor es hacer estas ecografías entre la semana 24 o 26 y la 32.

Y si quieres una mejor definición y distinguir aún mejor al bebé, puedes elegir en vez de una ecografía 4D una 5D, que permite ver imágenes tridimensionales en tiempo real con mucha más naturalidad y claridad.
 

¿Son malas estas ecografías?

Los ultrasonidos bidimensionales son necesarias para comprobar el correcto desarrollo del feto, pero este tipo de ecografías no lo son y algunos padres se preguntan si puede causar algún daño al bebé. En relación a eso, debes estar tranquila ya que uno de los posibles riesgos que podrían causar las ecografías sería sobrecalentar la matriz, puesto que la energía del ultrasonido es absorbida por el cuerpo subiendo así la temperatura. Y un aumento de calor por encima de 4º C, puede causar anomalías, pero se ha comprobado que las ecografías en 2D, 3D o 4D producen muy poco calor, menos de 1º C, por lo que no implican efectos nocivos. No obstante, se recomienda no realizarlas durante más de 30 minutos.
 

Consejos antes de hacerse una ecografía 4D

Muchas personas, cuando van a hacerse este tipo de pruebas de medicina, salen decepcionadas porque no han podido visualizar bien la carita de su bebé o le han visto todo el rato dormido y sin apenas moverse. Además de hacerte la eco en las semanas recomendadas, es conveniente que sigas estos consejos para obtener una buena imagen:

1- No te apliques crema hidratante o antiestrías en las 48 horas previas en la tripa ya que la película que forma la crema puede hacer que la imagen no se detecte bien.

2- Bebe mucha agua para que el líquido amniótico esté lo más claro posible y sea vea bien (aunque debes beber dos litros de agua durante toda la gestación).

3- Come algo dulce justo antes de entrar a la prueba o llévate un par de bombones para tomarte si el bebé apenas se mueve cuando empiece la ecografía. La glucosa que le llegará a través del cordón ayudará a que se active y se mueva para que podáis verle mejor.

4- Evita bebidas excitantes, ya que un exceso de excitación puede hacer que no se capte bien la fotografía o el vídeo si se mueve demasiado.

5- Lleva ropa cómoda que te permita dejar la tripa al aire fácilmente todo el tiempo que dure la tripa.

6- Lo normal es que a la ecografía vayan los padres, pero si quieres que asista alguien más, pregunta si es posible (no siempre se permite que los menores acudan a estas pruebas si te hace ilusión, por ejemplo, que vaya el hermano mayor).

7- Busca un sitio en el que te den al acabar el vídeo de la sesión para que guardes el recuerdo para siempre y puedas enseñárselo a él de mayor.