Efectos secundarios de la anestesia raquídea

Índice

• ¿Qué es la anestesia raquídea y en qué se diferencia de la epidural?
• Riesgos de las anestesias
• Pronóstico
• ¿Qué precauciones debo tener después de esta analgesia?
• Conclusión

 

¿Qué es la anestesia raquídea y en qué se diferencia de la epidural?

La anestesia raquídea o anestesia intradural, junto a la anestesia epidural, se utilizan principalmente para lograr insensibilizar la parte media y baja del cuerpo haciendo que desaparezca la sensación de dolor en el momento de las contracciones y dilatación durante el parto. Igualmente, son utilizadas para intervenciones de las vías urinarias, riñones, piernas y pies porque existe menor riesgo para la salud que la anestesia general. Para conocer las diferencias entre ambas, es necesario conocerlas un poco más a fondo.

En primer lugar, la anestesia raquídea consiste en la suministración de un anestésico local en la zona intradural –localizada entre las meninges piamadre y aracnoides– para impedir la sensación de dolor bloqueando al estímulo nervioso. En otras palabras, se logra un bloqueo secuencial empezando por las fibras nerviosas más delgadas –autonómicas y termoalgésicas – hasta llegar a las más gruesas  –tacto, presión y motricidad –.

En cuanto a la técnica empleada, después de la desinfección de la aguja raquídea de pequeño calibre, se inyecta en la espalda para alcanzar el espacio subaracnoideo, dentro de la columna vertebral. Justo en el momento, se administra un anestésico en líquido cefalorraquídeo que produce una relajación muscular y adormecimiento en un período temporal. Para ello, este anestésico bloquea los nervios que pasan a través de la columna lumbar y evitar que los estímulos dolorosos no sean capaces de llegar hasta el cerebro. Aparte de en el parto, sobre todo en casos de cesárea, normalmente se suele emplear para procedimientos ortopédicos de miembros inferiores.

Por otro lado, la anestesia epidural es muy parecida, pero existen algunas diferencias. La primera de todas, es que el analgésico se inyecta en la zona epidural, alrededor de donde se encuentra la médula espinal. Además, se suministra a través de un catéter, una pequeña sonda que permite seguir administrando el anestésico todas las veces que haga falta; mientras que la anestesia raquídea se administra, generalmente, una sola vez, por lo que se usa en procedimientos cortos como la cesárea y menos en partos vaginales ya que la dilatación suele durar horas.

Asimismo, la anestesia raquídea hace efecto al momento, mientras que la epidural necesita unos 20 minutos para actuar ya que tiene que atravesar la gruesa capa de la duramadre.

Riesgos de las anestesias

Son parecidos en ambas:

- Cefalea

- Lumbalgia

- Reacción alérgica a la anestesia empleada

- Daño neurológico

- Dificultad a la hora de orinar

- Baja presión arterial

- Infección en la columna vertebral si se llega al líquido cefalorraquídeo

- Convulsiones

- Leve hemorragia o hematoma alrededor de la columna vertebral

- Infarto de miocardio

- Erupciones en la piel

- Reacción alérgica a la anestesia

Por norma general, la anestesia raquídea no produce efectos secundarios importantes en las pacientes, pero algunas mujeres han presentado alguna de las complicaciones mencionadas.

Pronóstico

Los efectos secundarios mencionados no se suelen presentar nunca y son menores que los que produce la anestesia general. Además, las personas que se han sometido a la epidural y a la anestesia raquídea no han sentido dolor y, posteriormente, se han recuperado por completo.

Por lo tanto, lo normal si quieres anestesia en el parto es que uses la epidural ya que se puede usar mucho más tiempo que la anestesia raquídea al contar con el catéter que permite la reaplicación del anestésico todas las veces que haga falta. 
 

¿Qué precauciones debo tener después de esta analgesia?

Después de cualquier tipo de anestesia debes:

- Permanecer en la cama hasta que tengas sensibilidad en las piernas.

- No te pongas nerviosa por las náuseas, los mareos o el cansancio que puede causar, esto generalmente desaparece pronto.

- Descansa, ya que con esta anestesia puedes sentirte más cansada de lo normal.

Después de que se te haya sido administrada este tipo de anestesia, el personal de enfermería puede pedirte que intentes orinar para asegurarse de que los músculos de tu vejiga funcionan. Este tipo de anestesia relaja los músculos, lo que dificulta la micción y puedes llegar a desarrollar una infección de orina.
 

Conclusión

La anestesia raquídea es una técnica de menor dificultad en comparación con la anestesia epidural. Además, la dosis necesaria es mucho menor en la raquídea que en la epidural.

Por otro lado, también la anestesia raquídea tarda menos tiempo que en la epidural  en hacer efecto, además de ser más controlable y más predecible.

En el otro lado, la anestesia tiene más probabilidades de provocar hipotensión, es más limitada y tiene una mayor incidencia de cefalea.