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Estimulación del bebé de 14 meses

Estimulación del bebé de 14 meses

La estimulación temprana es necesaria para el correcto desarrollo del bebé. Una estimulación adecuada durante los primeros años de vida se traducirá en mejor capacidad de concentración y mejor rendimiento escolar, entre otros beneficios. En este artículo descubrirás cómo debe ser la estimulación de un bebé de 14 meses.

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Índice

 

¿De qué es capaz un bebé de 14 meses?

A los 14 meses de edad empezarás a ver la personalidad de tu peque. En estos momentos entiende más de lo que puede expresar, por lo que tenerlo atendido en todo momento es esencial.

Hay muchas cosas que pueden hacerse para apoyar el desarrollo feliz y saludable del bebé y para ayudarlo a sentirse seguro mientras explora su mundo de forma más independiente.

Si este es tu segundo embarazo, o tienes referencias de otros bebés de la misma edad, habrás notado una diferencia en el momento en que los niños alcanzan los hitos del desarrollo. Esto es normal y esperado, ya que cada niño es especial y único.

Estos son algunos logros que ya habrá alcanzado tu bebé o estará a punto de hacerlo:

- Señales de independencia y dependencia. Es posible que notes que tu hijo de 14 meses se vuelve más audaz y confiado en su actitud y comportamiento. Puede que se aleje de ti para hacer algo que acabas de decirle que no haga, o jugar solo de una manera más independiente que antes. En otras ocasiones, puede parecer especialmente pegajoso, tal vez cuando se siente cansado o ansioso. La transición hacia una mayor independencia no es lineal. Por ejemplo, es posible que descubra que es muy independiente durante varios días antes de volverse repentinamente más dependiente de ti nuevamente. Este empujón entre querer ser su propia persona y la necesidad de estar a tu lado es normal y es una señal de que tu niño se está acostumbrando a la idea de crecer. Apoya a tu niño transmitiéndole tranquilidad cuando lo necesite. No intentes obligarlo a hacer algo cuando no se sienta seguro, ya que esto puede hacer que se sienta más inseguro.

- Comprensión del lenguaje. ¿Has notado que tu pequeño puede señalar su peluche favorito cuando le pides que te muestre dónde está? ¿O que está esperando junto a su trona cuando le dices que su merienda está casi lista? Esto sucede porque comprende mucho más lo que dices. Para ayudar a mejorar su comprensión y sus habilidades lingüísticas, sigue hablando con él sobre lo que sucede a su alrededor y responde a lo que dice y hace. Hablarle lenta y claramente, y usar palabras simples y oraciones cortas, también lo ayudará a comprender. Alrededor de este tiempo, es posible que te des cuenta de que utilizas menos "palabras de bebé", ya que ya no es necesario para llamar su atención.

- Autoalimentación. Tu pequeño está perfeccionando cada vez más el agarre para alimentarse solo con una cuchara o con los dedos, además de para beber de una taza. Aunque es posible que parte de la comida no llegue a su boca, eventualmente logrará el éxito. Los platos y tazas irrompibles son una buena idea, ya que pueden caerse de vez en cuando. Si tu bebé arroja algo como platos o cubiertos por la habitación, dile que no está permitido y devuelve las cosas a su lugar. Si tu hijo de 14 meses sigue tirando objetos para verte reaccionar, podría ser una buena idea sacarlo de la silla alta y darle la oportunidad de calmarse antes de volver a intentar que coma más adelante.

- Ansiedad de separación. No es inusual que un niño de 14 meses haga un escándalo cuando lo dejas. Una estrategia que puede ayudar a reducir la ansiedad por separación es hacerle saber lo que está sucediendo: decirle que te vas, que pronto regresarás y luego darle un beso rápido antes de irte. No te escapes, ya que esto puede hacer que tenga miedo de que desaparezcas en cualquier momento. Una vez que regreses, dale mucha atención. Con el tiempo, comprenderá que siempre volverás y que marcharte no significa que no lo quieras.

- Sus paseos. Si tu hijo de 14 meses está caminando, notarás que lo hace de manera diferente a la forma en que caminan los niños mayores o los adultos. En esta etapa, los niños pequeños dan un paso amplio, los dedos de los pies apuntando hacia afuera y los pasos pueden ser bastante inestables. Puede parecer que tu hijo se tambalea hacia adelante de un pie al otro, con los brazos doblados a la altura de los hombros para mantener el equilibrio. Todo parece ir muy lento en este momento, especialmente cuando pierde el equilibrio y se cae, pero no pasará mucho tiempo antes de que corras para alcanzarlo. Y si tu hijo de 14 meses aún no ha dado sus primeros pasos, no te preocupes, este es un hito de desarrollo que probablemente alcanzará en los próximos meses.
 

Alimentación y sueño a los 14 meses

Aunque a veces sea complicado llevar la rutina de tu bebé a rajatabla, a largo plazo lo agradecerás. Asegurarse de que el bebé sigue un horario fijo te ayudará a organizarte mejor con tus demás tareas.

La mayoría de los niños de uno a dos años duerme de 11 a 14 horas al día en total, entre el sueño nocturno y una o dos siestas durante el día.

Los sueños vívidos, los dolores de dentición y la ansiedad por separación son solo algunas de las razones por las que un niño de 14 meses puede comenzar a despertarse por la noche, incluso si anteriormente dormía bien. Si estás desesperado por volver a la rutina de sueño habitual, es importante conocer la raíz del problema, para que puedas ayudar al bebé a superar esta interrupción del sueño. Sigue la rutina habitual a la hora de acostarle y pon límites que ayudarán a tu hijo a volver a la normalidad.

En cuanto a la alimentación, a los 14 meses tu bebé está probando alimentos nuevos, pero también es probable que algunos días rechace alimentos que antes comía sin dificultad. Si notas que un día no quiere comer cierto alimento, vuélveselo a ofrecer al cabo de los días, en esta etapa están definiendo sus gustos todavía. Dale una variedad diaria de todos los grupos de alimentos: verduras, frutas, cereales, proteínas y lácteos.

Es importante que durante el periodo de introducción de nuevos alimentos observes cualquier posible reacción alérgica. Si es así, consulta con tu pediatra.

La mayoría de los niños de 14 meses pueden tomar alimentos y alimentarse solos. Pero aún corren el riesgo de asfixia, así que continúa machacando sus alimentos o ponle trozos muy pequeños y fáciles de masticar.
 

Estimulación del bebé de 14 meses

Cada día que pasa, tu niño se vuelve más independiente. Por fin puedes empezar a ser más productivo durante el día, haciendo algo de tu propio trabajo. Pero cuando juegues con tu bebé, no olvides disfrutar el momento. Estar presente cuando juegues e interactúes con él no solo fortalecerá su vínculo, sino que también creará algunos recuerdos increíbles.

Estas son algunas ideas de actividades estimulantes que ayudarán al desarrollo del bebé:

- Explorando el aire libre: ¡Este es imprescindible! Mucho que ver y mucho que hacer. Las oportunidades de crecimiento y experiencias sensoriales son infinitas. Saca a tu peque del portabebés o del cochecito y colócalo en el suelo para explorar. Ya sea en el césped, un parque infantil o una playa. El sistema sensorial se alimentará con mucha "estimulación sensorial" del medio ambiente.

- Juegos de empujar: es posible que hayas notado el interés de tu hijo por empujar y tirar de cosas. No importa si es un cochecito o una caja. Para un niño pequeño que está aprendiendo a caminar, esta actividad puede ayudarlo a mantenerse firme. Si tu hijo ya camina de forma más segura, puedes dejar que explore empujando en diferentes superficies. Puede variar desde hierba, arena, alfombras... Empujar los ayudará a: escanear su entorno, evitar obstáculos y maniobrar a su alrededor.

- Pompas de jabón: ¿a quién no le gustan las burbujas? En la bañera o en el jardín, un simple pompero puede traer mucha diversión. Puedes empezar a hacer burbujas y hacer que tu pequeño las explote. Pueden usar las manos o los pies. Mientras hace estallar burbujas, puedes cantar canciones o tocar música.

- Juegos con bloques (mejor si son grandes): jugar con bloques ayuda al desarrollo de coordinación mano-ojo, habilidades motoras finas y habilidades del lenguaje visual, auditivo, táctil… Tírate en el suelo con tu bebé y empieza por construcciones simples, una torre, un muro… puedes destruirlo para ver cómo cae o seguir con la construcción hacia otra dirección.

- Espejito, espejito…: ponlo enfrente de un espejo y espera su reacción. Esto le ayudará a desarrollar su conciencia corporal y a saber dónde está nuestro cuerpo en el espacio.

Estas son algunas de las actividades que seguramente suscitarán otras ideas. Solo recuerda que cada nueva experiencia sensorial ayuda al crecimiento y desarrollo de tu hijo. Recuerda que cada niño pequeño se desarrolla a su propio ritmo. Si tu hijo no está listo o no está interesado en cierta actividad, inténtalo de nuevo en unas semanas.


Fuentes:

Stoppard, Dra. Miriam (2006), Padres primerizos, Barcelona, Pearson.

Fecha de actualización: 26-03-2021

Redacción: Laura Abad

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