Mamás agenda

Índice

• ¿Eres una mamá o papá agenda?
• Consecuencias de los padres/madres agenda

 

¿Eres una mamá o papá agenda?

Un día, Noelia López-Cheda, ante un olvido de su hija, se dio cuenta de que muchos padres hacemos todo en nombre de nuestros hijos, sin dejarles así desarrollar sus capacidades y habilidades. Les ayudamos a hacer los deberes, estudiamos con ellos, anotamos cuándo tienen exámenes para recordárselo, intervenimos en cualquier conflicto con un amigo… Situación que no hace más que acrecentarse al crecer los niños, llegando a haber padres que acompañan a sus hijos a las clases del carné de conducir, a hablar con los profesores en la universidad, a resolver cualquier duda con el banco…

Queremos que nuestros hijos sean felices y facilitar su vida, pero no nos damos cuenta de que haciendo todo por ellos y llevando su “agenda”, impedimos que desarrollen la responsabilidad, las habilidades para afrontar problemas y superar los fracasos… Así, no los estamos preparando para la vida, sino todo lo contrario, minimizamos las capacidades y valores que los pueden hacer mejores.
 

Consecuencias de los padres/madres agenda

Para la autora del libro “No seas agenda de tus hijos y prepáralos para la vida” esto se debe principalmente a dos motivos: la falta de tiempo y el miedo al fracaso. Como consecuencia, estos niños:

- No son capaces de asumir ningún tipo de responsabilidad

- Tienen miedo de hacer cualquier cosa porque piensan que sus padres lo harán mejor

- Son incapaces de iniciar nada por sí mismos, necesitan que alguien les dé las instrucciones precisas

- No saben razonar

- No toleran la frustración

Para evitar convertirnos en mamás agenda, López-Chenda plantea diferentes desafíos para desarrollar en nuestros hijos habilidades fundamentales para la vida: autonomía, proactividad, comunicación, iniciativa, manejo de la tecnología, etc.

Recuerda al educar a tu hijo que, para lograr el éxito y la felicidad, debe ser una persona independiente capaz de resolver solo sus problemas y afrontar las dificultades ya que no siempre podrás estar ahí para hacerlo por él.

No te debes sentir mala madre por no hacerlo todo por él, al contrario, eres mejor madre si estás ahí en los momentos de dificultad, pero le enseñas a valerse por sí mismo en las tareas del día a día.