Riesgos del sobrepeso antes del embarazo

Indice

• Planificar el embarazo para perder peso previamente
• Consecuencias de obesidad y sobrepeso en el embarazo
• Promover la dieta y la actividad física para embarazadas

Para la prevención de estas enfermedades, la Sociedad Española para el Estudio de la Obesidad (SEEDO), la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición (SEEN) y la Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia (SEGO) proponen:

- Informar sobre los riesgos que tiene la obesidad en el embarazo

- Planificar el embarazo para perder peso previamente

- Promover la dieta y actividad física ligada a la ganancia de peso en el embarazo.
 

Planificar el embarazo para perder peso previamente

Según la Dra. Monereo, miembro de la Junta Directiva de la SEEDO, hay que planificar el embarazo acorde al peso, procurando quedarse embarazada con un IMC (índice de masa corporal) entre 18,5 y 25 atendiendo a la edad y talla de la mujer.

Si el IMC está entre 25 y 30, e incluso supera el 30, es aconsejable bajar de peso a través de una dieta equilibrada y ejercicio físico previos al embarazo.

El IMC se calcula dividiendo el peso en kilógramos por el cuadrado de la altura en metros (kg/m2).

Si tu IMC es superior al recomendado, habla con un nutricionista o profesional de medicina antes de buscar el embarazo.

Y si ya te has quedado embarazada, debes engordar menos que mujeres con un IMC normal. En general, en mujeres con sobrepeso se recomienda engordar entre 6 y 7 kilos.

Consecuencias de obesidad y sobrepeso en el embarazo

Una mujer obesa o con sobrepeso que gane más de 12 kg durante el embarazo tiene el riesgo de sufrir los siguientes problemas de salud durante la gestación:

- Aborto espontáneo.

- Cesárea en el parto unido a que el bebé puede llegar a ser muy grande.

- Muerte fetal o perinatal, cuando el bebé fallece tras las 20 semanas de embarazo.

- Diabetes gestacional, es decir, diabetes durante el embarazo

- Riesgos de hipertensión arterial y preeclampsia que pueden ocasionar graves problemas a la madre y al bebé.

- Mayor probabilidad de padecer defectos del tubo neural. El bebé puede tener defectos de nacimiento del cerebro y médula espinal.

- La obesidad aumenta en aproximadamente un 15% la probabilidad de que una mujer dé a luz un bebé con un defecto cardíaco.

- Aumenta el peligro de que sea un niño y adulto obeso, así como de desarrollar diabetes mellitus tipo 2.

- Nacimiento prematuro.

- La diabetes gestacional también puede causarle problemas al recién nacido, como niveles peligrosamente bajos de azúcar en la sangre y niveles altos de bilirrubina.

Promover la dieta y la actividad física para embarazadas

Una dieta equilibrada acompañada de ejercicio físico es la mejor opción para las embarazadas. Para ello, hay que consumir una alimentación saludable que incluya frutas y verduras y que prescinda de las grasas saturadas y azúcares.

La Dra. Monereo afirma que “no es necesario comer por dos. Se debe prestar especial importancia al calcio, hierro y ácido fólico, que se pueden suplementar. Durante el 2º trimestre se debe incrementar la dieta en 300 kcal; en el 3º trimestre, 450 kcal, y durante la lactancia, 500 calorías”

El Dr. Albert Lecube, miembro de la SEEN y de la Junta Directiva de la SEEDO, añade que “durante la vida fetal de periodo intrauterino se produce la programación de muchos aspectos del metabolismo del hijo y en ello la dieta materna influye de manera crucial. Las consecuencias de los 9 meses de gestación van a repercutir en años de vida ulterior del feto”.

Por último, para llevar a cabo el ejercicio físico lo más adecuado sería caminar, nadar y la calistenia enfocada hacia las mujeres gestantes durante media hora. En las últimas semanas del parto, el ejercicio debe centrarse en la movilización pélvica para reducir riesgo de cesáreas y el  número de contracciones a la hora de dar a luz.