Estoy embarazada y uso mucho el móvil, ¿es malo?

Índice

• ¿Afectan las radiaciones del móvil al feto?
• Estudios que afirman que los móviles no son perjudiciales para el feto

¿Afectan las radiaciones del móvil al feto?

Son muchos los estudios que se han llevado a cabo desde hace años para averiguar si los móviles, las redes telefónicas y las redes wi-fi pueden ser malas o no para nuestra salud y causar, como dicen algunos, enfermedades como el cáncer, pero lo cierto es que no hay datos concluyentes. Ningún estudio ha podido demostrar relación alguna entre las ondas electromagnéticas de la telefonía móvil y enfermedades como cáncer, depresión, trastornos nerviosos, migraña, dolores reumáticos o fibromialgia, a pesar de que son muchos los que lo afirman.

También se han realizado estudios para saber si el uso de los móviles puede afectar al crecimiento y desarrollo del feto, como uno publicado recientemente en la revista Scientific Reports que afirma que el uso del teléfono móvil durante el embarazo puede causar trastornos de conducta en los niños. Según los investigadores, las radiaciones que emite el móvil podrían alterar el desarrollo cerebral de los bebés, causando hiperactividad. No obstante, hay que tener en cuenta que esta investigación ha sido realizado con ratones, no con humanos, por lo que no se puede afirmar que los resultados fueran los mismos en personas.

El estudio, llevado a cabo por investigadores de la Universidad de Yale (Estados Unidos), se realizó exponiendo a un grupo de ratonas embarazadas a la radiación de un móvil en silencio situado sobre la jaula, al que de repente hacían una llamada. Mientras, el grupo de control estaba en otra jaula con un móvil encima desconectado.

Después, valoraron la actividad eléctrica de los ratones y de los fetos tras nacer, sometiéndolos a diversas pruebas psicológicas y de comportamiento en diferentes momentos. Así, pudieron observar que los ratones expuestos a la radiación eran más hiperactivos, sufrían más ansiedad y tenían menos memoria. Esto se debía, según los investigadores, a un incorrecto desarrollo de las neuronas de la corteza prefrontal.

“Esta es la primera evidencia experimental que muestra que la exposición fetal a la radiación de los teléfonos celulares afecta el comportamiento de los adultos […] Hemos demostrado que los problemas conductuales en ratones que se parecen el TDAH son causados por la exposición a los teléfonos móviles”, explican los autores del estudio.

No obstante, antes de que las mujeres embarazadas se echen las manos a la cabeza y tiren sus móviles al contenedor, hay que tener en cuenta que la gestación de un ratón es de 19 días y sus crías nacen con un cerebro menos desarrollado. Además, son mucho más pequeños, por lo que la radiación de un móvil les afecta mucho más ya que algunos pueden ser igual de grandes que ellos. Por lo tanto, por el momento, este estudio no nos vale para afirmar que estos efectos podrían ocurrir en bebés humanos.

Otro estudio, realizado conjuntamente por universidades de EE UU y Dinamarca, afirma que el uso de los móviles durante el embarazo puede causar desórdenes de comportamiento en el colegio. En concreto, los investigadores afirman que el uso del móvil dos o tres veces al día puede causar en los niños hiperactividad y dificultades para relacionarse con sus padres, que pueden verse agravadas si, además, los niños usan los móviles antes de los 7 años.

El estudio se realizó a 13.000 niños cuyas madres usaron el móvil durante la gestación y el 54% de ellas tuvieron hijos con este tipo de problemas, que fueron más graves cuanto más expuestos habían estado a las radiaciones de los móviles.
 

Estudios que afirman que los móviles no son perjudiciales para el feto

No obstante, son muchos los que alegan que este estudio tiene muchos fallos ya que la hiperactividad es multicausal, por lo que es un simplismo afirmar que todos esos niños tienen ese problema porque sus madres usaron el móvil durante el embarazo, y no por causas genéticas, ambientales, etc.

Por el contrario, también hay estudios que afirman lo contrario, como uno desarrollado por el Instituto Noruego de Salud Pública publicado en la revista BMC Public Health que afirma que la exposición a los campos electromagnéticos de radiofrecuencia asociados durante el embarazo no está vinculada con el desarrollo neurológico de los niños. Para ellos, es “poco probable” que usar el móvil durante la gestación vaya a afectar al desarrollo del feto.

“La preocupación por el daño causado al feto por los campos electromagnéticos de radiofrecuencia, como los emitidos por los teléfonos móviles, se debe principalmente a los informes de estudios experimentales en animales con resultados inconsistentes. (…) nuestros hallazgos no apoyan la hipótesis de efectos adversos en el lenguaje del niño, la comunicación y las habilidades motoras por el uso del teléfono móvil durante el embarazo”, explica la autora principal del estudio, Eleni Papadopoulou.

Para llegar a esta conclusión los investigadores analizaron los datos de un gran estudio de cohorte de embarazo de la población noruega llamado ‘MoBa’, que incluía datos de 45.389 pares madre-hijo en los cuales había información recogida sobre el uso de la telefonía móvil materna y el seguimiento del neurodesarrollo de los niños a los 3 y los 5 años.

Y, lo que es más, los autores no solo dicen que el uso del móvil en el embarazo no es perjudicial, sino que incluso puede tener efectos positivos. Así lo explica Jan Alexander, otro de los autores: “Más específicamente, el uso del móvil durante la gestación estaba asociado con menos riesgo del niño de tener un bajo nivel de lenguaje y habilidades motoras a los 3 años de edad. Aunque ajustamos características sociodemográficas importantes, así como la personalidad materna y factores psicológicos, pensamos que este efecto protector es más probable que se explique por factores no medidos en este estudio en lugar del uso materno de teléfono móvil en sí mismo”.

Así, los niños nacidos de usuarias de teléfonos móviles presentaban un 27% menos de riesgo de tener oraciones de menor complejidad, un 14% menos de riesgo de usar gramática incompleta, un 31% menos de riesgo de sufrir retardo de lenguaje y un 18% menos de riesgo de tener habilidades motoras bajas a los 3 años.

Pero, como decíamos, los investigadores no creen que estos resultados se deban al uso del móvil, aunque sí deberían servir para tranquilizar a aquellas mujeres embarazadas que usan el móvil.