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Efectos en el bebé de la toxoplasmosis

Efectos en el bebé de la toxoplasmosis

Desde el momento que te enteras que estás embarazada tienes mucho cuidado de no comer embutidos ni carne cruda para evitar contraer la toxoplasmosis en estos meses pero, ¿qué le pasaría al bebé si te contagiaras?

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La toxoplasmosis en el embarazo

La toxoplasmosis está causada por un parásito, llamado toxoplasma gondii, que se encuentra en los excrementos de perros y gatos en la carne cruda contaminada. El contagio de la embarazada puede ocurrir si consume alimentos con el parásito o toca heces contaminadas y no se lava las manos después de ello.

Aunque es bastante raro contraer esta enfermedad, por eso la mayoría de mujeres no la ha pasado cuando se quedan embarazadas, los efectos perjudiciales sobre el feto de esta infección son tan graves que se recomienda durante estos meses no comer carne cruda y evitar limpiar las heces del gato si tienes mascota.

Tanto el calor como el frío matan el toxoplasma, por lo que la carne o el embutido se pueden consumir si se cocinan bien previamente o se mantienen congelados al menos 48 horas a menos de -20 ºC.

Por otra parte, no hace falta, ni mucho menos, que te deshagas de tu gato, ya que es extraño que los gatos que son mascotas y apenas salen de casa contraigan la enfermedad, con que tengas cuidado al limpiar sus cacas y uses guantes y te laves bien después, es suficiente, o mejor aún, que sea otro quien se ocupe de cambiar su arena si es posible.


¿Es muy peligrosa?

Es importante que sigas al pie de la letra estos consejos ya que, si bien es cierto que la toxoplasmosis no es tan fácil de contraer, si te contagias los efectos pueden ser devastadores para el feto, aunque a ti apenas te cause daños.

Durante el primer trimestre las posibilidades de contagio del feto si contraes la toxoplasmosis son menores, solo de un 15%, frente al 30% en el segundo trimestre o el 65% en el tercero, pero las complicaciones son mucho mayores.

Entre los efectos que puede causar al bebé y al desarrollo del embarazo encontramos:

- Aborto espontáneo

- Parto prematuro

- Toxoplasmosis congénita, es decir, el bebé nace con la infección

- Muerte del feto

En el caso de que el bebé nazca infectado, no siempre se detecta al nacer, hay veces que los síntomas aparecen meses después. Las señales principales que alertan de que el bebé tiene toxoplasmosis congénita son:

- Esplenomegalia (agrandamiento patológico del bazo) y hepatomegalia (agrandamiento del hígado)

- Vómitos

- Daño ocular causada por la inflamación de la retina u otras partes del ojo

- Problemas de alimentación

- Hipoacusia (pérdida de audición)

- Ictericia (piel amarilla)

- Bajo peso al nacer

- Erupción cutánea en el nacimiento

- Problemas de visión

- Convulsiones

- Discapacidad intelectual

- Hidrocefalia

- Microcefalia o macrocefalia
 

¿Cuál es el tratamiento de la toxoplasmosis?

El tratamiento en el embarazo con antibióticos puede impedir la infección del feto si se detecta a tiempo, por eso en cada trimestre te harán una prueba de anticuerpos de toxoplasmosis para controlar si te has contagiado o no.

Si el feto se ha contagiado, también puede tratarse con antibióticos, tanto dentro del útero como cuando nace. A veces, a los bebes también se les suministran esteroides si su visión está amenazada o si el nivel de proteínas en el líquido cefalorraquídeo es alto.

El pronóstico del bebé depende del momento en el que se produjera la infección y del éxito o no del tratamiento, pero la mayoría de las veces los bebés tendrán complicaciones serias toda su vida, como hidrocefalia, ceguera, discapacidad intelectual grave, infecciones en el hígado o el bazo, neumonía, ataques de apoplejía, etc.

Por eso, aunque sea poco común infectarse de toxoplasmosis, mejor evitar problemas y tener cuidado durante estos meses.
 

¿Cómo prevenir el contagio por toxoplasmosis?

Si tienes gato, debes tener cuidado al cambiar la arena de su caja, hacerlo con guantes y lavarte bien las manos después. Si es posible, que la cambie otra persona.

En la cocina, ten cuidado al manipular carne cruda, evitando que pueda contaminar otros alimentos que se consumen crudos, como verduras o frutas, limpiando las tablas de cortar y lavando concienzudamente los utensilios y las manos con agua caliente y jabón antes de preparar o consumir la comida.

No debes consumir carne cruda en estos meses, siempre debe estar bien cocinada. Evita la charcutería y los huevos crudos. Asimismo hay que pelar o lavar bien las verduras y frutas si van a comerse crudas.

Si te gusta la jardinería, adopta también precauciones a la hora de manipular la tierra o las plantas, especialmente si hay posibilidad de que algún gato haya podido pasar por el jardín.


Fuente:

Huggins-Cooper, Lynn (2005), Maravillosamente embarazada, Madrid, Ed, Nowtilus.

West, Zita (2007), El cuidado del bebé antes del nacimiento. Ed. Pearson Alhambra.

Fecha de actualización: 19-10-2020

Redacción: Irene García

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