7 consejos imprescindibles para tener un embarazo saludable

Índice

• 1- Toma ácido fólico y yodo
• 2- Nada de tabaco ni alcohol
• 3- Cuida tu alimentación
• 4- Haz ejercicio regularmente
• 5- Infórmate bien
• 6- Hazte el masaje perineal
• 7- Evita el estrés

 

1- Toma ácido fólico y yodo

El ácido fólico o vitamina B9 interviene en muchas funciones en nuestro organismo, por lo que debe formar parte de nuestra dieta diaria. Pero en el embarazo, además, es importante contar con las reservas necesarias de esta vitamina ya que se ha demostrado que reduce el riesgo de algunas malformaciones (como la espina bífida y otros defectos del tubo neural) y es importante en la formación del sistema nervioso del bebé.

Las embarazadas necesitan hasta 600 microgramos de ácido fólico, y la dieta no es suficiente para cubrir estas necesidades, por lo que se recomienda tomar un suplemento de ácido fólico desde un par de meses antes de conseguir el embarazo ya que el cierre del tubo neural se produce en las primeras semanas de gestación.

En cuanto al yodo, ayuda al desarrollo cerebral del feto y una dieta baja en yodo puede aumentar el riesgo de que el bebé nazca con hipotiroidismo y causar lesiones cerebrales en el niño. Por eso, debes tomar entre 250 y 300 µg diarios.
 

2- Nada de tabaco ni alcohol

Está demostrado que fumar retrasa el crecimiento del bebé e incrementa el riesgo de complicaciones durante el embarazo, como aborto espontáneo o parto prematuro. Además, la placenta de las mujeres fumadoras es más grande, lo que aumenta el riesgo de sufrir desprendimiento prematuro, hemorragias o rotura prematura de la bolsa.

Los bebés de madres fumadoras también tienen un peso menor al nacer y más riesgo de muerte perinatal.

En cuanto al alcohol, es muy peligroso, pues atraviesa la placenta produciendo en él los mismos efectos (o incluso superiores) que produce en nosotros. Por eso, aumenta el riesgo de causar deformidades al feto, daños neurológicos como retraso mental o discapacidad intelectual, problemas de corazón, de visión y de audición, problemas de aprendizaje, poco peso al nacer, deficiencias intelectuales u otros problemas de lenguaje o comportamiento.

 

3- Cuida tu alimentación

Si en cualquier momento de tu vida es importante cuidar la alimentación para mantener tu salud, durante el embarazo todavía lo es más. Es importante que, durante estos meses, sigas una dieta sana y equilibrada rica en alimentos que te aporten todos los nutrientes que necesitas, como frutas, verduras, legumbres, frutos secos, pescados, carnes blancas, cereales o huevos, y que evites el exceso de grasas saturadas, sal y azúcares.

No hace falta que comas por dos, con aumentar las calorías ligeramente es necesario, y debes evitar engordar más de lo recomendado (lo normal es entre 10 y 15 kilos).

También es importante que bebas mucha agua, unos 2,5 litros al día, y que evites aquellos alimentos que puedan transmitirte alguna infección peligrosa para el feto como la listeriosis o la toxoplasmosis. Por eso, no puedes consumir en estos meses embutidos y carnes crudas o poco cocinadas, patés y quesos sin pasteurizar, pescado crudo o ahumados. Y debes lavar bien las verduras y frutas que vayas a consumir crudas.

 

4- Haz ejercicio regularmente

El ejercicio físico te ayudará a controlar el peso y evitar algunas molestias típicas de estos meses como el dolor de espalda o de cabeza. Debes realizar ejercicio moderado 3 o 4 veces por semana, eligiendo aquellos deportes que no sean peligrosos como los deportes de riesgo, de contacto o los que generen vibraciones o sobrecargas. Las actividades más recomendables son caminar, yoga, natación o bicicleta.

 

5- Infórmate bien

Para evitar los temores, dudas y miedos normales del embarazo, es importante que te informes bien acerca de los síntomas comunes, los motivos de urgencia, cómo cuidarte durante estos meses, cómo prepararse para el parto, etc. Para ello, nada mejor que hablar con tu médico y tu matrona de tus dudas y buscar información fiable en libros y webs especializadas.

También es recomendable que acudas a las clases de preparación al parto ya que en ellas no solo te hablarán del parto, sino que también te darán información sobre los cuidados en el embarazo y el posparto, los primeros cuidados del recién nacido, qué hacer estos meses, etc.

 

6- Hazte el masaje perineal

El masaje perineal consiste en una serie de masajes que se hacen en la zona del periné desde la semana 32 de embarazo. ¿Y para qué sirve el masaje perineal? Está demostrado que es efectivo para reducir el trauma perineal y las episiotomías. Es decir, realizarse este masaje durante el tercer trimestre de gestación consigue estirar y ablandar los tejidos, incrementar la elasticidad del periné y familiarizar a la mujer con la sensación de estiramiento, permitiendo relajar más esta zona durante el parto, lo que ayudará a evitar los desgarros y la episiotomía.

Para realizarlo, debes usar un lubricante como el aceite de rosa de mosqueta y realizarlo durante unos 10 minutos 3 veces a la semana como mínimo o 5 minutos todos los días.

El masaje puedes hacértelo tú misma o puede ayudarte tu pareja. Para llevarlo a cabo debes estar relajada y buscar una postura cómoda sentada. Lávate bien las manos y asegúrate de que las uñas están cortas y limpias. Vacía la vejiga y comienza lubricando los dedos pulgar, índice y corazón. Introduce los dedos en la vagina 3 o 4 cm y comienza a hacer presión hacia abajo y hacia los lados con un movimiento de balanceo firme, pero delicado, estirando la zona hasta que se sienta una leve sensación de escozor o quemazón. A continuación, desliza el dedo desde la vagina hacia fuera y viceversa, manteniendo una ligera presión durante dos minutos.

Luego, coloca los dedos en la entrada de la vagina y realiza una presión hacia abajo durante dos minutos o hasta que te moleste. Esto te ayudará a imaginar la presión que ejercerá la cabeza del bebé. Después coge esta zona entre el dedo pulgar y los opuestos, a modo de pinza, y realiza un movimiento de vaivén, de un lado a otro, para estirar el tejido de la entrada de la vagina y la piel del periné. Realiza este movimiento durante 2-3 minutos.

Los primeros días sentirás molestias, pero no te preocupes que se irán pasando.

 

7- Evita el estrés

Tan importante como cuidar tu estado físico es cuidar tu estado emocional, ya que tu estado de ánimo influye en el bienestar y el desarrollo del feto. Por eso, debes procurar estar tranquila, evitar el estrés y la ansiedad, descansar y dormir bien.

Habla con tu pareja de tus miedos y ansiedades y, si es necesario, busca ayuda. También es conveniente que practiques en estos meses técnicas de relajación, respiración profunda y meditación. Conéctate con tu bebé y disfruta de estos meses únicos.