¿Se pueden usar exfoliantes en el embarazo?

Índice

• ¿Se pueden usar exfoliantes en el embarazo?
• ¿Cómo aplicar el exfoliante?
• Ejemplo de mascarilla natural
• Consejos para una buena exfoliación

 

¿Se pueden usar exfoliantes en el embarazo?

La piel se renueva de manera natural cada 28 días, cambiando las células muertas por nuevas células. Normalmente, nuestra piel se exfolia sola, pero en ocasiones, por determinados motivos, esta renovación se produce de manera más lenta, lo que hace que la piel no se oxigene adecuadamente y aparezca más acné o imperfecciones.

Si estás embarazada, lo más normal es que te preguntes o te plantees consultar con tu médico las contraindicaciones antes de aplicar cualquier producto en tu cuerpo. En el caso de los exfoliantes, sí que se pueden utilizar sin problemas durante el embarazo. Además, poseen unos microgránulos que eliminan las células muertas y favorecen, a su vez, la renovación celular. Como resultado, la piel quedará suave y tersa.

No obstante, hay que prestar especial atención a los exfoliantes químicos porque están elaborados a base de ácidos (fenol, ácido salicílico o ácido tricloroacético), y una concentración elevada podría implicar riesgos en el desarrollo del futuro bebé ya que atraviesan la placenta. Además, algunos de estos productos exfoliantes son especialmente agresivos sobre las pieles normales, por lo que su aplicación durante el embarazo, cuando la piel está especialmente sensible, podría provocar daños, rojeces, inflamaciones, alergias… No olvides leer la etiqueta de los productos antes de usarlos y de consultar a tu profesional de la medicina si tienes dudas.

¿Cómo aplicar el exfoliante?

El tratamiento con exfoliante se emplea una vez por semana, con precaución, con la piel húmeda y evitando los senos y el abdomen. Hay que usarlos de forma delicada con pequeños masajes. Por supuesto, tienes que aplicarte tras el tratamiento una crema hidratante, elige una que tenga además protección contra el sol.

Existen diversas técnicas para realizar la exfoliación:

1- Scrub: es la exfoliación mecánica y se lleva a cabo haciendo masajes circulares ascendentes con utensilios que presenten rozamiento con la piel, como los guantes de crin, y con productos que contengan partículas de polietileno, piedra pómez... Es conveniente hacerlo en la ducha para que los poros estén abiertos.

2- Gomage: consiste en extender una sustancia viscosa en la piel, dejar que se seque y después retirarla como si nos estuviéramos “despellejando”.

3- Peeling: es la exfoliación química que se lleva a cabo con cosméticos que tienen en su formulación principios activos como la urea o los AHA (alfa hidroxi ácidos). Esta está desaconsejada en el embarazo.

Ejemplo de mascarilla natural

El más conocido es el exfoliante corporal de fresas, rica en vitamina C y antioxidantes. Para ello, debes tener medio kilo de fresas, tres pepinos y harina de arroz. Y ahora, toca seguir los siguientes pasos:

1. Machacar las fresas y los pepinos y mezclarlos en un vaso de harina de arroz.

2. Aplicar la mezcla por todo el cuerpo durante 15 minutos aproximadamente y, cuando se acabe el tiempo, intenta masajear toda la piel.

3. Por último, retira el exfoliante con agua tibia en la ducha.

Consejos para una buena exfoliación

- Existe un método denominado scrub. Consiste en aplicar el exfoliante sobre la piel húmeda mediante un masaje sobre la superficie cutánea y retirar con agua. Después, debes hidratar bien con una crema hidratante.

- Escoge los exfoliantes que tengan polvos finos, de semillas o micropartículas sintéticas en geles o tensioactivos espumosos, como perlas de jojoba o cera alba.

- Si tienes la piel con rojeces que presenten lesiones o alteraciones de la piel, como eccemas y pústulas de acné, evita el uso de exfoliantes.

- No es recomendable aplicar los exfoliantes con cepillos o guantes de crin porque pueden irritar la piel.

- Por último, no olvides consultar con tu médico los cosméticos que te puedes aplicar durante el embarazo.