• Buscar

Los primeros dientes del bebé

Los primeros dientes del bebé

La erupción del primer diente del bebé se produce, generalmente a partir de su sexto mes. Y aunque estos dientes provisionales serán reemplazados por otros definitivos le serán de gran utilidad durante muchos años, no sólo para masticar, sino para hablar y reservar el espacio en la mandíbula para los permanentes. Su cuidado desde el principio es fundamental

Publicidad

Indice

 

Higiene y cuidado de los dientes de leche

Ya antes de la aparición del primer diente será necesario comenzar con la higiene bucodental, limpiando con una gasa húmeda la encía del recién nacido después de cada toma, para evitar la acumulación de alimento y posibles infecciones. Con el primer diente podrán utilizarse cepillos especiales o bien continuar con la gasa. Además de prevenir posibles caries le inculcaremos desde el principio buenos hábitos.

Se puede utilizar flúor a partir de los seis meses de vida del bebé, pero desde ese momento hasta los dos años las pastas dentales a utilizar deben contener como máximo hasta 1.000 ppmF de flúor. El flúor es un mineral que ayuda a prevenir las caries dentales al fortalecer el esmalte de los dientes.
 

Molestias causadas por la salida de los dientes de leche

La erupción de los dientes de leche es un proceso natural pero que habitualmente viene precedido de algunas molestias, consecuencia de la presión que ejerce la pieza bajo la encía antes de romperla, lo que puede poner irritable al pequeño. Lo más característico de este momento es un aumento de la salivación, una leve inflamación y enrojecimiento de la encía y muchas ganas de masticar, debido a la comezón gingival.

En algunos casos, los primeros dientes se abren camino casi sin efectos secundarios, mientras que otros lo hacen acompañados de fuertes dolores. Estos son algunos de los síntomas que se suelen producir en solitario o combinados, y con mayor o menor intensidad:

- El bebé no para de meterse la mano u objetos que puede agarrar en la boca para masticarlos.

- Al hacerlo, babea mucho y se acaba haciendo heridas alrededor de la boca.

- Las mejillas están enrojecidas y calientes.

- Las encías están hinchadas y rojas.

- El bebé tiene menos hambre de lo normal.

Articulo relacionado: Estimulación del ojo del bebé

- Llora y grita más a menudo que en los últimos meses.

- No duerme demasiado bien.
 

Cronología de la aparición de los incisivos de leche

Antes del nacimiento, en el embarazo, los dientes de leche están colocados en el hueso maxilar y estos generalmente empiezan a salir por partes a partir del sexto mes. Los primeros dientes que suelen aparecer son los incisivos centrales del maxilar inferior. A continuación, salen los superiores y, después, los incisivos laterales. Los colmillos y los molares son los últimos en aparecer. Además, la dentición no estará completa al menos hasta el vigésimo mes.

Este es el orden normal de salida de la dentición decidua:

Centrales  inferiores: 6 - 8 meses

Centrales superiores: 8 – 10 meses

Laterales superiores: 8 – 10 meses

Laterales inferiores: 10 – 15 meses

El orden temporal y la secuencia de erupción pueden variar de un niño a otro, hasta el punto de que en un niño sano se establece el límite de emergencia de los dientes temporales a los 3 años. Por otro lado, hay bebés que ya presentan dientes en el momento del nacimiento (dientes congénitos) u otros que comienzan con la dentición a las pocas semanas de nacer.


Cómo aliviar al bebé las molestias

Morder algo frío le calmará las molestias y los nervios. Ofrécele mordedores (puedes meterlos previamente en la nevera) o juguetes blanditos. Asegúrate de que lo que esté a su alcance esté limpio, ya que tenderá a llevarse todo a la boca. Antes de darle de comer frota con tus nudillos las encías. Es frecuente que, debido a la salida de los dientes, se muestre inapetente, sufra alteraciones del sueño y, en ocasiones, presente unas décimas de fiebre y tenga diarrea o vómitos. Si te preocupa, consulta al pediatra. Y recuerda que la fiebre no es un síntoma de la erupción de los dientes de leche, sino de una infección o enfermedad.

Masajear las encías inflamadas puede ayudar a aliviar el dolor de la dentición, así como ofrecerle algo frío o darle acetaminofén en una noche particularmente difícil, pero no lo hagas sin consultar con el profesional de pediatría u odontología.

 

Bebés, también al dentista

Actualmente, la causa más común de la primera visita de un niño menor de 10 años al dentista es el dolor. Pero esperar hasta ese momento es un grave error pues el tratamiento, nos explica el Dr. Canábez, odontopediatra, “será mucho más agresivo y traumático para el pequeño. Y esto tiene consecuencias muy negativas ya que el dolor afecta en la conducta del niño”. Lo que tendrá graves secuelas en el futuro. La mayoría de los problemas bucodentales presentes en adultos se podrían haber prevenido con un diagnóstico precoz por lo que se recomienda realizar un control desde la primera infancia y un seguimiento cada 6 meses, siempre que no exista un problema.

Los expertos aconsejan que la primera visita al dentista se realice con la erupción del primer diente. Se trata, según el Dr. Canábez, “de una consulta principalmente preventiva para enseñar a los padres las recomendaciones de higiene bucal y pautas para evitar las caries y otras enfermedades orales. Desgraciadamente, en salud general se tiene conciencia de la importancia de realizar visitas al pediatra para controles periódicos; pero no así al dentista”.

 

 


Te puede interesar:

Las tomas de leche del recién nacido deben ser definidas por el propio bebé tal y como se hace con la lactancia materna, que es a demanda. De esta manera, el bebé se regula en función de las necesidades de cada momento.

Fuente:

Ajram, Dr. Jamil, Tarés, Dra. Rosa María (2005), El primer año de tu hijo, Barcelona, Ed. Planeta.

Fecha de actualización: 09-07-2021

Redacción: Lola García-Amado

Publicidad
Publicidad

TodoPapás es una web de divulgación e información. Como tal, todos los artículos son redactados y revisados concienzudamentepero es posible que puedan contener algún error o que no recojan todos los enfoques sobre una materia. Por ello, la web nosustituye una opinión o prescripción médica. Ante cualquier duda sobre tu salud o la de tu familia es recomendable acudir a unaconsulta médica para que pueda evaluar la situación en particular y, eventualmente, prescribir el tratamiento que sea preciso.Señalar a todos los efectos legales que la información recogida en la web podría ser incompleta, errónea o incorrecta, yen ningún caso supone ninguna relación contractual ni de ninguna índole.

×