Cuándo no se recomienda dar pecho

Indice

• ¿Hay enfermedades que impidan dar el pecho?
• Enfermedades del bebé
• Enfermedades o problemas relacionados con la madre

¿Hay enfermedades que impidan dar el pecho?

La leche materna es el alimento mejor y más completo para los bebés. Tanto, que la OMS y el resto de expertos recomiendan dar únicamente leche materna hasta los 6 meses, y mantener la lactancia todo el tiempo que sea posible.

Lamentablemente, algunas enfermedades, tanto maternas como del bebé, impiden que se pueda dar el pecho.

Enfermedades del bebé

- Galactosemia: es una enfermedad enzimática hereditaria bastante extraña que se da en 1 de cada 60.000 nacimientos. Las personas que padecen esta enfermedad no pueden descomponer el azúcar simple galactosa. La galactosa forma parte de la lactosa, el azúcar que se encuentra en la leche. Si a un bebé con galactosemia se le da leche, los derivados de la galactosa que no puede descomponer se acumulan en su sistema causando daño al hígado, el cerebro, los riñones y los ojos. En unos días, el neonato desarrollaría ictericia, letargo, vómitos, convulsiones…  La alimentación continua con productos con lactosa podría derivar en cirrosis, ceguera, retardo mental… En estos casos, se debe alimentar al pequeño con leche de fórmula de soja o libre de lactosa.

- Enfermedad de la orina con olor a jarabe de arce: causada por una anomalía genética, es una enfermedad metabólica que provoca en las personas que la padecen la imposibilidad de metabolizar los aminoácidos leucina, isoleucina y valina, lo que provoca que estos químicos se acumulen en la sangre. Existen varios grados de esta enfermedad, pero incluso la más leve puede llegar a provocar retraso mental. Los bebés con esta enfermedad tienen que ser alimentados con leches especiales que tengan bajos niveles de los aminoácidos leucina, isoleucina y valina.

- Fenilcetonuria: es una enfermedad hereditaria muy extraña que hace que los bebés que la padecen carezcan de la enzima fenilalanina hidroxilasa, necesaria para descomponer el aminoácido esencial fenilalanina, que se encuentra en todos aquellos alimentos que contengan proteínas. Sin esta enzima, la fenilalanina se acumula en el cuerpo junto con otras sustancias dañinas para el sistema nervioso central, causando graves daños en el mismo. El tratamiento consiste en una dieta baja en fenilalanina, por lo que los bebés deben tomar una leche especial.

Todas estas enfermedades se detectan de manera temprana con la prueba del talón que se realiza a las 48 horas de nacer el bebé.

Además, existen casos de recién nacidos para los que la leche materna es la mejor opción de alimentación, pero pueden necesitar otros alimentos por un periodo de tiempo limitado. Estos son los casos de:

- Bebés con muy bajo paso al nacer (con menos de 1500g)

- Bebés muy prematuros (los que nacen con menos de 32 semanas de gestación)

- Recién nacidos con riesgo de hipoglicemia debido a una alteración en la adaptación metabólica, o incremento de la demanda de la glucosa, en particular aquellos que son pretérmino, pequeños para la edad gestacional o que experimentaron estrés significativo en el parto con hipoxia o isquemia, aquellos que están enfermos y aquellos cuyas madres son diabéticas si la glicemia no responde a la lactancia materna óptima o alimentación con leche materna.

Enfermedades o problemas relacionados con la madre

- VIH: aunque no es sencillo que el virus pase al bebé a través de la leche, puede suceder, por lo que se recomienda en estos casos evitar la lactancia materna. Es una de las principales enfermedades por las cuales resulta imposible amamantar, de hecho está totalmente desaconsejado.

- Mientras se está tomando ciertos medicamentos como aquellos que contengan yodo o povidona yodada, quimioterapia citotóxica, medicamentos antirretrovirales, radioterapia, etc. Con la quimioterapia citotóxica se interrumpe la lactancia materna cuando la madre está recibiendo el tratamiento hasta que termine el proceso.

- Si la madre se ha sometido a una cirugía de reducción mamaria: esto es una causa que imposibilita la lactancia (y muchas veces no se avisa de esta consecuencia cuando se realiza). Sin embargo, existen procedimientos quirúrgicos que permiten continuar realizando la lactancia materna.

- Herpes simple contagioso en el pezón. Esta afección hace imposible amamantar cuando se trata de una condición que puede ser contagiosa o cuando la madre ha sufrido septicemia (que requiere cuidados médicos que impiden a la madre hacerse cargo del bebé).

- Tuberculosis activa no tratada. Si se está tratando no está contraindicada, pero es necesario hacer un seguimiento cuidadoso. 

Además, hay casos en los que la lactancia no está contrindicada, aunque las madres presenten condiciones médicas preocupantes:

- Mastitis: normalmente es una enfermedad con la que se recomienda dar el pecho para aliviar, pero hay casos de mastitis con los que se tiene que interrumpir la lactancia de manera temporal (y cuando es muy doloroso). En este caso, se recomienda a la madre que extraiga de manera mecánica la leche de su pecho hasta que la inflamación disminuya y pueda continuar la lactancia sin inconvenientes.

- Absceso mamario: el amamantamiento debe continuar en el lado no afectado. En el lado afectado se reiniciará la lactancia cuando se haya iniciado el tratamiento.

- Hepatitis B:los lactantes deben recibir la vacuna de hepatitis B en las primeras 48 horas o en cuanto sea posible.

- Hepatitis C.

- Tuberculosis: madre y bebé deben ser tratados juntos de acuerdo con las guías nacionales de tuberculosis.

Estoy tomando un medicamento, ¿tengo que dejar de amamantar?

Al contrario que en el embarazo, pocos medicamentos tienen una interferencia con la lactancia ya que suelen pasarse a la leche en cantidades tan bajas que no afectan al lactante. A pesar de esto sí existen medicamentos que son perjudiciales para la lactancia. Una madre puede necesitar medicamentos y es difícil saber la compatibilidad con la lactancia de todos ellos. Se puede comprobar en e-lactancia.org. Esta web, además, te da información sobre productos no medicinales como infusiones, cosméticos, etc.

Lo importante es saber que las drogas de abuso y los tratamientos contra el cáncer son incompatibles con la lactancia materna. Con el resto de medicamentos lo mejor es consultar con la web o con tu médico de cabecera.

Por último, recuerda que las drogas legales como el tabaco o el alcohol también son perjudiciales para lactante y madre, por lo que es mejor evitarlas.