Cómo cuidar a un bebé resfriado

Indice

• El sistema inmunológico del bebé
• Remedios para aliviar los síntomas del resfriado

El sistema inmunológico del bebé

Los bebés se resfrían tanto porque su sistema inmunológico no está totalmente desarrollado, aunque es cierto que los bebés alimentados exclusivamente con leche materna tienen menos posibilidades de enfermar porque su madre les pasa anticuerpos a través de la leche. No obstante, también es posible que enfermen.

Además, hay que tener en cuenta que existen más de 200 virus diferentes que causan el resfriado común, por eso se puede contraer tantas veces un catarro.

Por otra parte, es más habitual contagiarse en los meses de otoño e invierno porque el frío hace que se sequen las mucosas nasales, facilitando la entrada al organismo de estos virus. Además, el frío hace más fuertes a los virus, haciendo que su contagio sea más sencillo (por eso se produce fiebre en los resfriados, para matar a los virus).

La mayoría de los niños tienen, de media, entre 6 y 10 resfriados al año. Esta enfermedad se diferencia de la gripe en sus síntomas, aunque a veces cuesta identificarlas, especialmente al principio. No obstante, el resfriado no produce aumento de la temperatura o lo hace de manera leve y primero aparecen otros síntomas como congestión nasal (mocos transparentes en los primeros días que se vuelven más espesos y amarillos) o tos. Mientras que la gripe provoca fiebre alta en primer lugar, malestar general, dolor muscular y, a veces, congestión nasal y tos, pero no siempre.

Al ser un virus, los antibióticos no son efectivos, tampoco los antitusivos ya que la tos suele ser productiva (ayuda a expulsar la mucosidad, por lo que no hay que combatirla), ni los antimucolíticos. Por eso, a no ser que el cuadro se agrave, para tratar un resfriado solo tienes que recurrir a medidas de alivio de los síntomas, no a fármacos. De hecho, si el niño se encuentra bien, no tiene fiebre y el resfriado va evolucionando solo, no hace falta ni llevarlo al profesional de medicina.

Remedios para aliviar los síntomas del resfriado

- Si es menor de 6 meses y se alimenta solo de lactancia materna, dale de mamar más a menudo para que reciba más líquidos. Si ya está con la alimentación complementaria, puedes añadir sopas, caldos, zumos naturales o agua. Lo importante es que beba mucho para disolver y eliminar los mocos.

- También debes darle una dieta rica en vitaminas C, A y E que ayudan a combatir la infección y fortalecer su sistema inmunitario.

- Para aliviar la congestión, dado que no sabrá sonarse solo los mocos, puedes hacerle lavados con solución salina en las fosas nasales tantas veces como consideres necesario. Echa su cabecita hacia atrás y aplica las gotas en cada orificio. Si está muy taponado y le causa incluso sordera temporal, puedes a continuación extraer los mocos con un aspirador nasal, pero esto debes hacerlo solo un par de veces al día y si es necesario, no lo hagas en cada toma o resecarás más su nariz.

- Usar un humidificador por la noche ayudará a que duerma mejor. Ponlo un rato antes de acostarlo, pero no lo dejes toda la noche. Otra opción es darle un baño de agua tibia.

- Acuéstalo en la cuna con la parte superior del cuerpo ligeramente elevada, así los mocos no le molestarán tanto y dormirá mejor, algo fundamental porque el reposo y el descanso ayudan a curar el resfriado. Puedes usar un cojín u o cuña debajo del colchón, nunca encima para evitar el riesgo de asfixia.

- La temperatura de la habitación no debe ser muy alta para que respire mejor (aunque tampoco debe pasar frío, claro). Lo ideal son entre 18 y 20º C por la noche.

- Si tiene la temperatura ligeramente elevada, pero no pasa de 38º C, no hace falta que le des paracetamol. Mientras se encuentre bien, basta con quitarle algo de ropa y darle un baño tibio. Si está más caliente o se encuentra irritable y molesto, puedes darle paracetamol en la dosis adecuada para su edad y peso.