Causas y tratamiento de la encopresis infantil

Indice

• ¿Qué es la encopresis?
• Síntomas de la encopresis
• ¿Qué hacer si mi hijo padece encopresis?
• Consecuencias de la encopresis

 

¿Qué es la encopresis?

La encopresis es un problema que causa que las heces salgan involuntariamente del ano, manchando la ropa. Esta enfermedad aparece en niños mayores de 4 años que ya saben controlar perfectamente sus esfínteres ya que en niños menores no se considera un problema, sino que es algo normal hasta que aprenden a no usar pañal.

Se considera que hay encopresis cuando estos episodios se repiten varias veces al mes durante al menos tres meses. Si solo ocurre una vez, no le des más importancia.

La encopresis es menos común que la enuresis, pero es más frecuente en niños varones. En torno a los tres años, el 16% de los niños muestra signos de incontinencia fecal una vez a la semana o más, pero alrededor de los cuatro años solo afecta al 3% de los pequeños, y con 7 años a menos de un 1% de los niños.

La causa más habitual de esta enfermedad es el estreñimiento crónico que provoca que las heces se vuelvan duras y secas, con lo que al niño le duele ir al baño y evita hacer caca. Esto aumenta más el problema llenando el colon de heces hasta que se estira y afecta a los nervios que avisan de cuándo es momento de ir al baño, por lo que se pierde el control de los esfínteres. Además, cuando el colon está demasiado lleno, puede haber pérdida de heces líquidas, que son las únicas que pueden pasar, lo que causa gran vergüenza al niño, sobre todo si ocurre en el colegio o delante de otros amigos.

Sin embargo, existen otras causas para la encopresis como el miedo a ir al baño (habitual también en niños pequeños), no querer interrumpir los juegos, una dieta baja en fibra y en líquidos, intolerancia a la lactosa o problemas emocionales. El estrés emocional o la ansiedad, causado por diversos problemas o situaciones (nacimiento de un hermano, divorcio de los padres, nuevo colegio, etc.), también puede causar este problema.

Asimismo, la ingesta de ciertos medicamentos, el Trastorno por déficit de atención con hiperactividad, el autismo o la depresión pueden causar encopresis.

Síntomas de la encopresis

- Escape de heces líquidas o no que, a veces, pueden confundirse con diarrea

- Estreñimiento con heces duras y secas

- El niño intenta ir al baño pero no le da tiempo a llegar

- Eliminación de heces muy grandes que obstruyen el inodoro

- No querer ir al baño o pasar muchos días sin ir

- Falta de apetito

- Dolor abdominal

- Cistitis reiterada, generalmente en niñas

- Intenta ocultar el problema limpiando él mismo la ropa manchada

Además, la encopresis puede causar diversos problemas al niño como vergüenza, frustración, baja autoestima, ira… especialmente si es objeto de burla de sus amigos. Por eso, debes acudir al médico asunto antes si sospechas que tu hijo puede tener este problema para que te indique cómo ayudarle.

¿Qué hacer si mi hijo padece encopresis?

Si la causa es el estreñimiento, lo fundamental es tratar este y adoptar una serie de medidas de prevención para que no vuelva a ocurrir. Para acabar con las heces duras el profesional de medicina puede recetarte laxantes, supositorios o enemas.

Una vez que el colon esté limpio, debes proporcionar a tu hijo una dieta rica en alimentos con fibra como las legumbres, los frutos secos, los cereales integrales, etc. También debe beber mucha agua y es posible que te recomienden dejar por un tiempo la leche con lactosa.

El ejercicio físico regular también ayuda al buen funcionamiento del tránsito intestinal y a evitar el estreñimiento.

Además, debes crear unas rutinas para ir al baño todos los días. Debe acostumbrase a sentarse todos los días a la misma hora, cuando tenga tiempo, para favorecer los movimientos intestinales y entrenar a sus intestinos para que funcionen con normalidad. Debe acudir en cuanto tenga ganas de la defecación, no aguantarse ni evitar ir al baño. Pueden pasar meses hasta que recupere la sensación y el funcionamiento normal de los intestinos, por lo que debéis tener paciencia y seguir con estos consejos.

También se utilizan las técnicas de biofeedback, a través de las cuales se entrena al niño para que reconozca las señales fisiológicas que anticipan la defecación y logre controlarlas, así como para que aprenda a relajar el esfínter externo durante la evacuación.

Es importante que no sigáis usando enemas una vez el colon esté limpio ya que eso no ayudará a que su organismo sepa ir al baño solo.

Si la causa es un problema emocional, debes averiguar qué le pasa y, si fuera necesario, buscar ayuda profesional de psicología y psicoterapia.

Apóyalo siempre y dale ánimos para que no se sienta mal, nunca debes regañarle por hacerse caca encima. 
 

Consecuencias de la encopresis

- Sensación de culpabilidad: el niño se avergüenza de su problema y se siente culpable, una sensación que termina minando su confianza y la seguridad en sí mismo.

- Aislamiento social: el niño evita el contacto social porque teme tener un escape frente a los demás. En los casos más graves incluso puede negarse a ir a la escuela.

- Baja autoestima: si los padres recriminan al niño por los escapes o sus compañeros se burlan de él, su autoestima sufre un gran daño, lo que puede causar un daño a largo plazo en su seguridad y relaciones sociales.