¿Cuándo debo vacunar a mi hijo contra la gripe?

Indice

• La vacuna de la gripe ¿cuándo sí y cuándo no?
• ¿Por qué es bueno vacunar a los niños contra la gripe?
• ¿Y si estoy embarazada o dando el pecho?

 

La vacuna de la gripe ¿cuándo sí y cuándo no?

La gripe es una enfermedad vírica de fácil transmisión y que puede afectar a personas de cualquier edad. Sus síntomas a menudo se confunden con los de un resfriado común, pero lo cierto es que la gripe conlleva mucha más gravedad que este.

En España, con la llegada de octubre se inicia también la campaña de vacunación de gripe, la mejor garantía (como señalan instituciones como la Organización Mundial de la Salud) frente a esta enfermedad infecciosa. Como informa el Dr. Javier Sarmiento Martínez, todas las personas mayores de seis meses de edad deberían de ser vacunadas contra la gripe cada año.

Los ingresos en la UCI en Pediatría por gripe se reducen en un 70% con la vacunación contra la gripe. Podemos hablar de siete tipos de vacuna contra la gripe. La más común es la trivalente de dosis estándar, dirigida a pacientes de entre seis meses y 64 años.

¿Deben vacunarse todos los niños? Como nos indica el Dr. Javier Macías, no. “En España no se recomienda la vacunación universal en niños. Únicamente en caso de que padezcan alguna enfermedad crónica o si conviven con adultos en situaciones de riesgo”. Por ejemplo, niños con asma, diabetes o enfermedades cardiacas, o bien aquellos que convivan con personas que puedan padecer algunas de las enfermedades crónicas citadas (es lo que se conoce como “estrategia nido”: todos los miembros de una familia que convivan con un paciente de riesgo se vacunan).

Existen siete tipos de vacuna contra la gripe. Para los niños, y en general, la más común es la trivalente de dosis estándar que va dirigida a personas de entre seis meses y 64 años. También existe la vacuna cuatrivalente mediante spray nasal, para personas entre 2 y 49 años. A veces, las vacunas provocan reacciones como fiebre, enrojecimiento o dolor en la zona de inyección, pero estas no suelen tener mayor importancia y pasan al poco tiempo.  

¿Cuándo no vacunarse? No deben ser vacunados contra la gripe los bebés menores de seis meses, las personas con alergias graves a ingredientes de la vacuna como las gelatinas, los antibióticos o el huevo, pacientes convalecientes de alguna enfermedad, pacientes con enfermedades autoinmunes que no están controladas (la vacuna podría “despertar” estas enfermedades) o personas con síndrome de Guillain-Barré.

Además, como destaca el Dr. Javier Macías, no debe olvidarse la medida más importante para prevenir las infecciones respiratorias: lavarse las manos. “Si practicamos esta sencilla medida higiénica, reduciremos en un gran porcentaje el riesgo de contagio”, puntualiza el pediatra. Otras prácticas para prevenir el contagio es que los niños se cubran con la manga al toser y que no acudan al colegio si están enfermos.

No obstante, siempre hay que consultar con el profesional de medicina y pediatría.
 

¿Por qué es bueno vacunar a los niños contra la gripe?

- Reduce el riesgo de contraer esta enfermedad y de ser hospitalizados por su causa.

- Puede salvar la vida en caso de niños con patologías.

- Reduce el riesgo de enfermedad, lo cual puede evitar la falta de asistencia del niño a clase y de los padres al trabajo.

- Ayuda a prevenir la propagación de la gripe a los familiares y amigos, incluidos los bebés menores de 6 meses que son demasiado pequeños para recibir la vacuna o los ancianos más susceptibles de hospitalización y fallecimiento.

 

¿Y si estoy embarazada o dando el pecho?

Como señala la Organización Mundial de la Salud (OMS), las mujeres embarazadas son especialmente vulnerables a las infecciones por gripe, por lo es recomendable que te vacunes con la opción inyectable (el tratamiento antigripal mediante spray nasal no está indicado para mujeres embarazadas).

Las funciones de órganos básicos como el corazón, los pulmones o el sistema inmunitario experimentan ciertos cambios durante el embarazo y pueden hacer que los síntomas de la gripe sean especialmente graves.

La vacuna antigripal es un tratamiento compatible con la lactancia materna y que no conlleva riesgos para la madre y el lactante. Permite desarrollar los anticuerpos para estar protegida frente a este virus y pueden pasar al bebé, protegiéndole hasta 6 meses después del nacimiento.