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¿Cuándo llevar a tu hijo al psicólogo?

¿Cuándo llevar a tu hijo al psicólogo?

Existen diversos trastornos o situaciones que el niño no puede superar solo y para las que los padres tampoco tenemos herramientas suficientes, por lo que conviene acudir a un especialista en la mente que nos ayude a tratar ese problema o trauma, como ante un trastorno de ansiedad, la muerte de un ser querido, problemas en el colegio, etc.

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Índice

 

Hace unos años la gente tenía una imagen del psicólogo muy distorsionada de la realidad. Se imaginaban a un tipo con gafas sentado en una silla tomando notas mientras un señor o señora con pinta de “loco” le contaba sus problemas. Sin embargo, hoy en día se ha cambiado esa percepción y la gente ya sabe que al psicólogo no se va porque se esté “loco”, sino porque ciertos problemas o acontecimientos de la vida diaria nos suponen un lastre y no nos dejan ser felices, por lo que psicólogo nos da las herramientas para superar ese problema.

Por eso, es bastante habitual llevar al niño al profesional de psicología ante determinadas situaciones. Puede que con una visita valga o que haga falta hacer un seguimiento al niño. Sea como sea, no dudes en consultar con un experto antes los siguientes problemas:

1- Trastornos de ansiedad, estrés elevado, tics o manías compulsivas

2- Si ves al niño triste, desganado, apático y no sabes la causa. O si sospechas que puede estar deprimido.

3- Ante los problemas serios de obediencia y el mal comportamiento, incluso con conductas violentas.

4- Si tu hijo tiene problemas en el aprendizaje, saca malas notas, le cuesta concentrarse o aprender… Puede sufrir determinados problemas que contribuyen a esto, como TDAH (Trastorno por déficit de Atención con Hiperactividad), dislexia, etc.

5- Si tu hijo tiene problemas para relacionarse con los demás, es muy tímido, retraído, poco comunicativo, juega siempre solo, etc.

6- Si sufre episodios nocturnos de pesadillas constantes u otras alteraciones del sueño que impiden su descanso. Las pesadillas normalmente están provocadas por algo que nos preocupa. El psicólogo puede averiguar el qué.

7- Quejas somáticas, es decir, frecuentes dolores de cabeza, tripa, náuseas, dolores en el pecho… que parezcan estar causados por problemas y no por una enfermedad física.

8- Si el niño presenta de repente conductas agresivas, ya sean verbales o físicas, apropiaciones indebidas, malos comportamientos, etc.

9- Si no quiere ir al colegio y no puedes averiguar qué le sucede o preocupa (bullying o acoso escolar, problemas con un profesor, etc.).

10- Si después de un trauma, como la muerte de un ser querido, no le ves capaz de superarlo.

11- Si pasados los 7 años sigue haciéndose pis encima o si dejó de hacerse pis por la noche y de repente comienza con enuresis nocturna.

12- Si sufre retrasos en el desarrollo del habla o lenguaje.

13- Si se autolesiona o tiene ideas suicidas.

14- Si tiene problemas de autoestima y apego.

14- Ante una enfermedad mental como esquizofrenia, trastorno bipolar, etc.
 

¿A qué edad se puede llevar a los niños al psicólogo?

Los psicólogos que trabajan en atención temprana trabajan con niños muy pequeños, desde los 0 años, por lo que la edad no es un impedimento para llevar a los niños a un profesional de psicología ante alguno de los problemas antes comentados, algunos de los cuales pueden surgir en los primeros meses de vida.

Según la edad del niño y sus habilidades se llevarán a cabo unas intervenciones u otras. Se pueden dar pautas a los padres, estrategias para afrontar esos problemas, terapia cognitivo-conductual, terapia de conducta, intervención familiar o psicoeducación.

Las terapias se deben adaptar a la edad, el tipo de personalidad y el problema. Con paciencia y esfuerzo, se podrán ir viendo resultados en poco tiempo.


Fuente:

AAP

Fecha de actualización: 28-06-2022

Redacción: Irene García

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