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Técnicas para ayudar a tu hijo a dormir solo

Técnicas para ayudar a tu hijo a dormir solo

Durante los primeros meses, muchos bebés necesitan ayuda para dormirse, por lo que recurrimos a cogerlos en brazos, mecerlos, pasearlos en el carrito… Pero llega un momento en que es bueno ayudarlos a que aprendan a dormirse solos. Así, si se despiertan en medio de la noche y no les pasa nada, no necesitarán llamarnos, sino que ellos solos volverán a dormirse.

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Índice

 

¿Por qué enseñar al niño a dormirse?

Lo primero, hay que entender que a los bebés no se les puede enseñar a dormirse solos, en este proceso, necesariamente, intervienen los padres en los primeros meses de vida. Estas técnicas y consejos están pensadas para niños un poco mayores que ya no comen por la noche. Asimismo, siempre hay que tener en cuenta que se enseña a los niños a dormirse solos para cuando se despierten en la noche sin ninguna necesidad, simplemente porque se haya completado un ciclo de sueño o algún ruido los despierte. Pero nunca hay que dejarlos llorar o sin atender ya que muchos despertares nocturnos se deben a causas de “fuerza mayor”: enfermedad, inseguridad, miedo, etc.

No obstante, para todas aquellas veces que el bebé se despierta y no necesita a sus padres, resulta muy beneficioso para el descanso de los papás que los niños sepan volver a dormirse solos y no requieran de la ayuda de estos.
 

Consejos para enseñar al niño a dormirse

Para estos casos, puedes seguir estos consejos:

- Benditas rutinas. Seguro que lo has oído mil veces pero es que, realmente, las rutinas son lo que mejor funcionan. Crear un ritual de sueño, que se cumpla cada noche, ayuda a los niños a irse a la cama solos y a dormirse sin ayuda. El baño, la cena, lavarse los dientes, leer un cuento y a dormir. Los primeros días puede que se resista, pero pronto aprenderá qué es lo que toca luego y lo hará él solo.

- Dormir solo desde el principio de la noche. Si el niño aprende a dormirse solo a la hora de irse a la cama, será capaz de dormirse solo si se despierta en medio de la noche. Por eso es importante meterlo en la cama cada día a la misma hora y no sacarlo de ella a no ser que le pase algo. Si nos llama o le cuesta dormir, hay que acudir a su lado, calmarle, cantarle o lo que le reconforte, pero no sacarlo de la cama a no ser que realmente sea necesario.

- No enfadarse. Nunca debes enfadarte ni gritarle, por muy cansado que estés. Hay que tener paciencia y entender que los niños necesitan a sus padres.

- Quiero agua, pis… Muchas veces, los niños piden cosas que realmente no necesitan solo para que los padres acudan a su lado. Por supuesto, siempre que te llame debes ir, pero si acabas de darle agua y es imposible que tenga más sed, o si ya es mayor y puede levantarse solo para ir al baño, debes ir a su habitación y explicarle que es hora de dormir.

- No todos los despertares lo son. No hay que olvidar que los niños son seres vivos y, en general, ruidosos. Es normal que por la noche se muevan, hablen en sueños, hagan ruidos… Es normal que ante cualquier movimiento del pequeño nos despertemos, pero no siempre es necesario levantarse ya que realmente el niño sigue dormido. Verás cómo poco a poco aprendes a distinguir cuándo está despierto y nos necesita y cuándo no.

- Cada padre y familia tiene su método. Estas son algunas ideas y consejos para aquellos padres que quieran que sus hijos se duerman solos en su habitación pero, por supuesto, no hay técnicas mejores y peores, cualquiera que permita a los niños y a los padres descansar, son buenas. El colecho, dormir en la misma habitación, esperar un breve tiempo… Lo que importa es que os sirva para dormir y descansar por la noche, fundamental para ser felices por el día.


Fuente:

Stoppard, Dra. Miriam (2006), Padres primerizos, Barcelona, Pearson.

Fecha de actualización: 27-01-2022

Redacción: Irene García

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