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Peso y fertilidad

Peso y fertilidad

Conseguir un embarazo aún en condiciones normales no es sencillo. La probabilidad de un embarazo en la especie humana es de aproximadamente un 20% en cada ciclo menstrual. Pero además en el proceso reproductivo entran en juego otros factores que hacen que la fertilidad, y por lo tanto las posibilidades de concebir, disminuya, entre otros, algunas patologías, la edad, una mala alimentación, u otros hábitos poco saludables.

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Índice

Una mala alimentación, así como un peso inadecuado tanto por exceso como por defecto, afecta considerablemente en la fertilidad. Los cambios drásticos en el peso corporal pueden causar infertilidad. De hecho según la clínica de reproducción asistida Ginefiv, el 12% de los casos de infertilidad están directamente relacionados con problemas de peso.


¿Cómo influye el peso en la fertilidad?

Para entenderlo debemos saber que la grasa corporal cumple una función muy importante en este proceso, pues ejerce un efecto en la producción de la hormona liberadora de gonadotropina (GnRH), esencial para la ovulación. Concretamente, la GnRH activa la secreción de la hormona luteinizante (LH) y de la hormona folículo estimulante (FSH), ambas fundamentales para el desarrollo de óvulos y espermatozoides.

Tener un peso incorrecto puede provocar numerosos trastornos hormonales que alteran los ciclos menstruales o la ovulación.

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La obesidad, por ejemplo, está relacionada con trastornos incompatibles con el embarazo, o que lo hacen muy difícil, llegando incluso a interferir negativamente en el éxito de los tratamientos de reproducción asistida. Entre los trastornos de salud más comunes ligados a un sobrepeso están el hipertiroidismo, el síndrome de ovario poliquísitico, el exceso de estrógenos, etc.

Un estudio  de ginecología reciente, realizado en el Centro Médico Académico de Ámsterdam, comprobó que las mujeres obesas, con un índice de masa corporal (IMC) mayor de 30, la probabilidad de concepción por vía natural era menor que en las mujeres de peso normal (IMC comprendido entre el 18 y 25). Concretamente, en una mujer con IMC de 35 la posibilidad de quedar embarazada de forma natural era un 26% menor que en una mujer sin sobrepeso. Y en mujeres con IMC de 40, se reducían en un 43%.

El estudio afirmaba que una de las responsables de estos problemas para concebir en mujeres con sobrepeso era una hormona llamada leptina. La leptina es una sustancia sintetizada y secretada por el adipocito (conjunto de células que forman el tejido adiposo del cuerpo), que manda una señal al hipotálamo que induce a la pérdida o aumento de peso. Los investigadores pensaban que las mujeres obesas pueden tener algún tipo de alteración en sus niveles de leptina, lo que dificulta la implantación en el útero.

El bajo peso también es una causa de infertilidad, ya que como veíamos anteriormente la producción de la hormona GnRH también puede verse alterada, lo que incidirá irremediablemente en la ovulación, pudiendo incluso interrumpirse. Además los niveles bajos de GnRH pueden afectar al revestimiento uterino, lo que impide la implantación correcta del embrión. Es decir, a pesar de lograrse una gestación, el embrión podría no llegar a desarrollarse por un defecto del endometrio, provocado por un peso inadecuado.

También se ha comprobado que el ejercicio excesivo puede causar un desequilibrio hormonal y disminuir la fertilidad.

Y una vez embarazada, el sobrepeso aumenta el riesgo de aborto o de tener problemas como diabetes gestacional, preeclampsia, coágulos sanguíneos, hipertensión arterial. También habrá más posibilidades de que se produzca un parto inducido o cesárea.
 

¿Cómo afecta el peso a la fertilidad masculina?

El peso corporal también tiene consecuencias sobre la fertilidad masculina. En el caso de sobrepeso o de obesidad en el hombre pueden aparecer los siguientes problemas:

- Oligospermia o disminución en el volumen de semen

- Reducción de la cantidad de testosterona afectando a la actividad sexual o función eréctil

- Azospermia o disminución el número de espermatozoides

- Aumento de la temperatura testicular, que repercute en una menor movilidad de los espermatozoides

Un peso por debajo de lo recomendable en el hombre puede influir en el número de espermatozoides y su actividad, aunque hay menos estudios al respecto.
 

 ¿Qué hacer en estos casos?

Es fundamental seguir una dieta adecuada y reducir el peso antes de quedarse embarazada. La base de la dieta deben ser las verduras, las frutas, las legumbres y los pescados y carnes blancas. Se debe cocinar a la plancha, al horno, al vapor… Pero nada de fritos ni grasas. Tampoco la bollería ni los dulces.

Es necesario acudir a un nutricionista que marque una dieta adecuada para cada persona para conseguir un IMC de entre 18,5 y 25 antes de quedarse embarazada.

Para perder peso también es fundamental realizar ejercicio físico con regularidad, al menos una hora tres veces a la semana.

Si tu caso es el contrario y tu peso está por debajo de lo normal, deberás acudir a un profesional de medicina y nutrición que te indique cómo coger peso de manera saludable para mejorar tu fertilidad.

Si a pesar de todo no consigues quedarte embarazada, puedes recurrir a técnicas de reproducción asistida como la fecundación in vitro. 


Fuentes:

The Risks Associated With Obesity in Pregnancy https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC5954173/

Fecha de actualización: 14-12-2021

Redacción: Irene García

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