• Buscar

Pies hinchados en el embarazo

Pies hinchados en el embarazo

A medida que avanzan los meses podrás notar que tus tobillos empiezan a desaparecer. A partir de la semana 20 tus pies pueden hincharse con más frecuencia y en el tercer trimestre la molestia se agravará considerablemente, si es en épocas de calor mucho más.

Publicidad

Índice

 

¿Por qué se hinchan los pies en el embarazo?

La hinchazón o edema, como se conoce en medicina, se debe a la retención de líquidos, que es el resultado de la sangre adicional que se produce durante el embarazo para procurar el crecimiento del bebé. Durante la gestación, el volumen sanguíneo aumenta en un 50% para suministrar la sangre suficiente a la placenta, por lo que es relativamente común durante el embarazo y generalmente se limitará a las extremidades inferiores.

Es más habitual en el último trimestre de gestación y en los meses más calurosos. Además, el aumento del tamaño del útero va a conllevar a que las venas de la pelvis y la vena cava sufran, cada vez más, una mayor presión haciendo que la circulación desde las extremidades inferiores hasta el corazón se vuelva más lenta.

Alrededor de un 75% de las mujeres gestantes sufre hinchazón de pies y tobillos, sobre todo tras el séptimo mes de embarazo.

Otros factores que hacen más frecuente este problema son el embarazo múltiple, el sobrepeso o el exceso de líquido amniótico.

Al ser la causa problemas de circulación es normal que los pies hinchados se sientan peor al final del día o cuando se lleva mucho tiempo de pie o sentada.
 

¿Puede ser signo de algo peligroso?

Solo es preocupante si sufres hinchazones en zonas distintas del cuerpo como en la cara o las manos o si una pierna se te hincha más que otra. Si notas una extremidad mucho más hinchada que otra consúltalo a tu médico, ya que podría ser síntoma de la presencia de un coágulo, de un edema o de preeclampsia.

Se trata de una complicación del embarazo que se caracteriza por tener una presión arterial muy elevada, desarrollando hipertensión arterial. Suele venir acompañada de otras señales que muestran daños en otros órganos como los riñones o el hígado. Esta condición afecta a entre un 5 y un 8% de las gestantes y suele aparecer después de la semana 20 de gestación. Si no se controla, puede ser muy grave para la madre y el bebé. No existe tratamiento, desaparece tras el parto.
 

Algunos remedios para aliviar la hinchazón de pies

Si pasas mucho tiempo de pie o sentada, en el trabajo por ejemplo, intenta moverte del sitio frecuentemente, y procura dar paseos. La acción del movimiento al caminar ayuda a que el exceso de fluido retorne a otras partes del cuerpo. Lo mejor es alternar actividades ligeras con periodos de descanso con los pies elevados.

Si es posible, conviene que hagas varias pausas al día y te coloques con los pies en alto, tumbada sobre tu espalda y las piernas en ángulo recto apoyadas en la pared.

Haz ejercicios rotando los tobillos y doblando las rodillas cada cierto tiempo.

Llevar calcetines especiales antipresión puede ayudarte, sobre todo si pasas mucho tiempo de pie en el trabajo.

Bebe mucho líquido, preferiblemente agua, pero también otros líquidos como té, infusiones permitidas, zumos naturales, leche…

Reduce el consumo de sal y sigue una dieta sana y equilibrada rica en alimentos diuréticos como la piña.

El ejercicio frecuente puede mejorar mucho la hinchazón de pies. La natación es uno de los deportes más recomendados para este problema.

Evita estar sentada o en la cama durante largos periodos ya que podría incrementarse el riesgo de trombosis venosa profunda (TVP)

Tampoco es seguro que tomes diuréticos sin prescripción médica.

Utiliza ropa y calzado cómodo y holgado que no haga presión en ninguna parte del cuerpo. En cuanto al zapato, lo mejor es que este no oprima el pie, que tenga horma ancha y que esté fabricado con materiales naturales que permitan una adecuada transpiración y una mejor adaptación del pie.

Controla el peso para evitar la hinchazón en pies y tobillos.

Los baños de agua fría o caliente y los masajes son muy beneficiosos y ayudan a mejorar la circulación de la sangre durante todo el día.

 

 


Fuente:

West, Zita (2007), El cuidado del bebé antes del nacimiento. Ed. Pearson Alhambra.

Clínica Mayo, https://www.mayoclinic.org/es-es/diseases-conditions/preeclampsia/symptoms-causes/syc-20355745

Fecha de actualización: 29-07-2020

Redacción: Irene García

Publicidad
Publicidad

TodoPapás es una web de divulgación e información. Como tal, todos los artículos son redactados y revisados concienzudamentepero es posible que puedan contener algún error o que no recojan todos los enfoques sobre una materia. Por ello, la web nosustituye una opinión o prescripción médica. Ante cualquier duda sobre tu salud o la de tu familia es recomendable acudir a unaconsulta médica para que pueda evaluar la situación en particular y, eventualmente, prescribir el tratamiento que sea preciso.Señalar a todos los efectos legales que la información recogida en la web podría ser incompleta, errónea o incorrecta, yen ningún caso supone ninguna relación contractual ni de ninguna índole.

×