Diferentes técnicas de masaje durante el embarazo
Durante el periodo de gestación se producen una serie de cambios hormonales que afectan al estado de ánimo de la mujer generándole estrés. Habitualmente, recurren a los masajes para intentar que se desaparezcan los dolores del embarazo. Para ello, existen diferentes técnicas manuales o manipulaciones que se utilizan tanto en un masaje de relajación como en uno terapéutico.
Índice
- Beneficios del masaje en el embarazo
- Técnicas de masaje en el embarazo
- ¿Puede estar contraindicado el masaje en el embarazo?
Beneficios del masaje en el embarazo
Para comenzar, el masaje es una práctica que consiste en presionar, frotar o golpear rítmicamente y con la intensidad adecuada en diferentes zonas del cuerpo, sobre todo las masas musculares, con fines terapéuticos, deportivos o estéticos. En el embarazo, ayuda a lidiar con numerosos síntomas, como el estrés, la ansiedad, el insomnio, el cansancio, las náuseas, los dolores de espalda o los calambres, sirviendo así de tratamiento.
Otros beneficios del masaje en el embarazo son:
- relajar, aliviar y estimular el riesgo sanguíneo y sistema inmunológico
- aportar oxígeno al sistema circulatorio, favoreciendo el desarrollo del bebé
- preparar a la mujer para el parto
- reducir el miedo
- regular el tránsito intestinal
- relajar los músculos
- disminuir el dolor de las articulaciones
- prevenir las estrías
- reducir la retención de líquidos y evitar los edemas
Técnicas de masaje en el embarazo
En este artículo nos centraremos en las técnicas de masaje para el embarazo, que se pueden utilizar tanto en el automasaje como en el masaje con un compañero. Aquí van 9:
- Rozamientos. Se caracteriza principalmente porque es la forma en que empezamos y terminamos un masaje. Se realiza con la yema de los dedos y hay que deslizarse con suavidad por la zona que se va a tratar y, como resultado, ayuda a que el cuerpo se relaje y que sea lo más efectivo posible. Al finalizar el masaje, hay que volver a emplear estos toquecitos suaves.
- Fricción. En esta técnica, hay que deslizar la palma de la mano sobre la piel y aplicar una ligera presión sobre ella. Contribuye a activar la circulación sanguínea, aliviar los espasmos musculares y aumentar la flexibilidad.
- Amasamiento. Para esta técnica, tienen que intervenir todos los dedos de la mano o los nudillos (tienen que estar separados). Los movimientos tienen que ser circulares, ascendentes y descendentes, que recorran la zona que se quiera tratar. En consecuencia, se activará la circulación, se tonificará el músculo y se relajará el sistema nervioso. Igualmente, el fortalecer la musculatura ayudará a la mujer embarazada a soportar su aumento de peso.
- Rodamientos. Normalmente, esta técnica se emplea en brazos y piernas. Se sitúa una mano frente a la otra sobre el músculo que hay que tratar y se mueven en forma de vaivén alternamente para movilizar y relajar dicha zona.
- Vaciado. Esta técnica también se utiliza sólo en brazos y piernas. Se abraza la extremidad con ambas manos y se desliza con cierta presión. Si el masaje va en dirección hacia el centro del cuerpo, tendrá un efecto estimulante. Si es en dirección hacia manos y pies, el masaje será relajante.
- Arrastre. Se puede realizar en cualquier parte del cuerpo. Las manos se tienen que adaptar a la forma de la parte que se va a tratar, desplazándose por la superficie de la piel hacia las extremidades. Su función es vaciar la sangre del músculo y que se renueve el riego sanguíneo y la oxigenación muscular.
- Percusión. Se dan pequeños golpes con las manos cóncavas sobre la zona que estamos tratando.
- Peinado. Desplazamiento con las yemas de los dedos separadas, que al principio se aplican con presión y poco a poco con más suavidad. Este movimiento se realiza desde los hombros hacia la espalda y se recorren las extremidades hasta llegar a los dedos de las manos y los pies.
- Toques de relajación. Se realizan toquecitos suaves con las yemas de los dedos, que recorren toda la espalda, desde los hombros hasta los glúteos, de arriba abajo y viceversa. Se puede emplear también en la cara.
Los masajes no tienen contraindicaciones en el embarazo salvo que el médico indique lo contrario, aunque es mejor que los realice un profesional o alguien con experiencia.
¿Puede estar contraindicado el masaje en el embarazo?
Aunque el masaje es muy beneficioso, existen una serie de contraindicaciones generales que impiden los masajes:
- embarazo múltiple
- diarrea
- inflamación en brazos y piernas sin diagnóstico
- malestar con síntomas de vómitos y náuseas
- hipertensión
- bajo peso de la madre o el niño
- dolor abdominal
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No siempre las mujeres experimentan todos los síntomas del embarazo ya que muchas sólo realmente se percatan de su estado ante la falta de la primera regla tras la concepción.
Fuente:
Villacieros, Paloma (2010), Masajes durante el embarazo, Barcelona, Libros Cúpula.
Fecha de actualización: 22-10-2020
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