¿Qué son los ejercicios de Kegel y para qué sirven?

Índice

• ¿Para qué sirven los ejercicios de Kegel?
• Pero ¿qué es el suelo pélvico y por qué es tan importante cuidarlo bien?
• ¿Cómo son los ejercicios de Kegel?
• ¿Y en el plano sexual?
• ¿Buenos para todos?

 

¿Para qué sirven los ejercicios de Kegel?

Con el paso del tiempo se fue descubriendo que los ejercicios de Kegel podían servir para mucho más que para trabajar la incontinencia urinaria porque al trabajar el suelo pélvico nos permiten un mayor control de esta musculatura que deriva en una mejor función de sostén de las vísceras y en una mejora de la función sexual.

La incontinencia urinaria supone sin duda un problema actual de gran relevancia actualmente, porque conlleva a la pérdida involuntaria de orina debido a una alteración en la presión interna de la vejiga. Además, algunos factores como el embarazo y la edad provocan una gran pérdida de elasticidad y tensión en el suelo pélvico haciendo que tanto la uretra como la vejiga se caigan y sus mecanismos de incontinencia sean solamente efectivos en reposo.

Las mujeres embarazadas suelen ser las más propensas a esta disfunción, aunque dependiendo de la mujer, lo será en mayor o menor grado. De hecho, la incontinencia urinaria tras el parto afecta aproximadamente al treinta por ciento de ellas. Para muchos ginecólogos, por tanto, la gimnasia del suelo pélvico es una medida de prevención para hacer frente a estos problemas y, actualmente, aunque existen diferentes tratamientos para solventarlo, sin duda, el entrenamiento de la vejiga es el elegido. La metodología basada en los ejercicios de Kegel es hoy una de las más practicadas.
 

Pero ¿qué es el suelo pélvico y por qué es tan importante cuidarlo bien?

El suelo pélvico es un conjunto de músculos internos y ligamentos antigravitatorios que se encuentran en la base de la pelvis. Estos se incluyen dentro del sistema core, y son los músculos profundos que forman las paredes que encierran nuestro tronco. Estos son el abdomen, el diafragma, los oblicuos, la musculatura lumbar y el suelo pélvico. El suelo pélvico tiene varias funciones: entre ellas, la de estabilizar la cadera. Todo este conjunto de músculos y ligamentos cierran la cavidad abdominal a modo de “puente colgante” que sirve para contener los órganos pélvicos en su sitio y que estos funcionen correctamente. Son la vejiga, el útero, la vagina y el recto, y también para dar estabilidad a la columna y a la pelvis.

¿Cómo son los ejercicios de Kegel?

Lo primero que tienes que hacer es encontrar los músculos correctos. Debes relajar y apretar los músculos que controlan el flujo de orina. Es importante encontrar los músculos correctos que debes apretar.

Si no estás segura de que estás apretando los músculos correctos, introduce un dedo dentro de la vagina. Aprieta los músculos como si estuvieras conteniendo la orina y después suéltalo. Debes sentir que los músculos se tensan y se desplazan hacia arriba y hacia abajo.

Los ejercicios de Kegel en realidad un tipo de ejercicios que no requieren ningún movimiento visible del cuerpo ya que lo que trabajamos es la musculatura interna por lo que se pueden hacer en cualquier sitio. Si eres principiante lo mejor es que los hagas tumbado para evitar la fuerza de la gravedad, aunque también pueden hacerse (y es recomendable) estando sentados.

Lo primero que se debe hacer es colocar la cadera en posición neutra y realizar el movimiento de la musculatura del suelo pélvico en cuatro fases: contracción y elevación de la musculatura, mantenimiento de dicha posición, vuelta a la posición inicial y relajación.

Otro de los ejercicios de Kegel para activar el suelo pélvico es el conocido como “el puente”. Esta postura consiste sencillamente en estar tumbadas boca arriba con las rodillas flexionadas y los pies en el suelo. En este ejercicio lo que se va a hacer es sujetar con las rodillas una pelota haciendo fuerza, y se va a coger aire mientras se van subiendo las caderas, apretando voluntariamente el suelo pélvico, y mientras una va bajando soltar el aire y relajar.

Los beneficios de estos ejercicios van a repercutir a nivel de estabilizador de la cadera, prevenir la incontinencia urinaria y otras alteraciones ginecológicas. Además, ejercicios como estos son los que permiten a las mujeres mantener esta musculatura en buen estado y también ayudan a fortalecer los músculos debajo del útero, la vejiga y el intestino grueso. Hay que tener en cuenta también que el escape de orina o el control intestinal se pueden acentuar también a medida que se va envejeciendo, se aumenta de peso, después de un embarazo o un parto, o tras una cirugía ginecológica. Y, por ello, los ejercicios de Kegel son tan adecuados. Además, estos se pueden hacer en cualquier momento siempre que una esté acostada o sentada.
 

¿Y en el plano sexual?

En el plano sexual, los ejercicios de Kegel pueden ser muy beneficiosos en ambos sexos porque en ellos puede ayudar a la lucha contra la eyaculación precoz, y en las mujeres la tonificación de la musculatura vaginal mejora también la fricción durante la penetración (que, aunque beneficia también a ambos) facilita el orgasmo y aumenta la sensibilidad de la zona.

 

¿Buenos para todos?

Lo cierto es que con el paso del tiempo y con la falta de ejercicio la musculatura del suelo pélvico va perdiendo tono que, aunque se agrave en el caso de las mujeres especialmente después del parto, dichos ejercicios están recomendados para cualquier persona y a cualquier edad porque ayudan a fortalecer y potenciar dicha musculatura.

En ambos sexos, además, tendremos un control mayor de la incontinencia, tanto urinaria como fecal. Asimismo, se recomiendan también en la etapa del posparto para las mujeres, y tras una cirugía de próstata en el caso de los hombres. 

Además, se deben de tomar una serie de precauciones:

- No los practiques mientras orinas, esto puede debilitar los músculos del suelo pélvico a la vez que causa daño a la vejiga y los riñones.

- No realices los ejercicios de Kegel con demasiada fuerza, esto puede hacer que se tensiones demasiado y causar dolor durante las relaciones sexuales.

- No dejes de hacer estos ejercicios, aunque puede disminuir la frecuencia cuando notes que ya están en forma.