Síntomas de sarampión en bebés

Indice

• ¿Qué es el sarampión?
• ¿Cuáles son los síntomas del sarampión?
• ¿Cuál es la vacuna del sarampión?
• Complicaciones del sarampión
• ¿Cómo se trata el sarampión?

 

¿Qué es el sarampión?

El sarampión fue una de las causas de mayor mortandad en la historia ya que antes de que su vacuna fuera introducida en 1963 se reportaban millones de muertes al año.

La vacunación es un tema muy importante que se debe conocer y llevar a la práctica para evitar que los pequeños experimenten una enfermedad tan mortal como esta, pues esta vacuna ha logrado disminuir el gran número de decesos por causa de sarampión desde que se encontró la vacuna.

A pesar de la existencia de la vacuna se han dado varios brotes de sarampión a lo largo del mundo, aunque una de las causas actuales se debe a los movimientos antivacunación, lo cual puede poner en un gran riesgo al niño que no reciba la vacuna.

El sarampión es una enfermedad infecciosa que se genera por medio de un virus llamado paramixovirus. Es una enfermedad fácil de diagnosticar ya que su síntoma más famoso es totalmente visual, una erupción de manchas rojas sobre la piel.

Su contagio se puede deber a que cuando una persona está enferma de sarampión y estornuda o tose, las pequeñas gotas que salgan con estas reacciones van a contener el virus.

El periodo de incubación del virus es de entre 8 a 10 días, tiempo que pueden tardar en aparecer los primeros síntomas, además de que si no se encuentra vacunado el porcentaje de enfermarse es realmente alto.

 

¿Cuáles son los síntomas del sarampión?

Los síntomas que un bebé con sarampión son:

- El primer síntoma suele ser fiebre

- La nariz comienza a escurrir

- El bebé presenta tos seca

- Los ojos se ponen llorosos

- El bebé parece estar cansado todo el tiempo

- Su apetito se ve disminuido

- Tiene dolor de garganta

- Comienzan a salir manchas rojas en su piel grandes y planas que generalmente se funden entre sí

El virus se incuba durante 10 a 14 días y, pasado este tiempo, aparecen una serie de síntomas inespecíficos que pueden confundirse con un resfriado. Una vez aparece el exantema, ya se puede diagnosticar como sarampión.

Este sarpullido suele empezar en la cara con pequeñas manchas rojas, algunas de las cuales están levemente elevadas. Los puntos y bultos en grupos estrechos dan a la piel un aspecto rojo moteado. Luego se extienda a los brazos y el tronco, y luego por los muslos, las pantorrillas y los pies. Al mismo tiempo, la fiebre aumenta abruptamente y a menudo alcanza los 40 o 41º C. Cuando se va curando, el sarampión va despareciendo en el mismo orden que surgió.

 

¿Cuál es la vacuna del sarampión?

Al año de cumplido es necesario que lleves a tu bebé a que le apliquen la vacuna MMR, la cual va a proteger al pequeño contra el sarampión, la rubéola y las paperas con un 95% de efectividad.

La vacuna triple vírica es una vacuna que contiene el virus vivo, pero de manera disminuida para que el bebé no se contagie de la enfermedad, sino para que pueda desarrollar una fortaleza contra esta en su sistema inmunológico.

La segunda vacuna debe administrarse pasados los 4 años de edad.

Es la mejor manera de prevenir esta enfermedad y sus complicaciones.
 

Complicaciones del sarampión

- Infección bacteriana de los oídos.

- Bronquitis, laringitis o crup. El sarampión puede provocar la inflamación de la laringe o de los tubos bronquiales.

- Neumonía. La neumonía es una complicación frecuente del sarampión y, en personas con el sistema inmunológico débil puede ser mortal.

- Encefalitis. Aproximadamente, 1 de cada 1.000 personas con sarampión puede contraer una complicación llamada “encefalitis”.

- Problemas en el embarazo. Si estás embarazada, debes tener mucho cuidado de no contagiarte sarampión porque esta enfermedad puede provocar un parto prematuro, bajo peso en el bebé al nacer o mortalidad materna.

 

¿Cómo se trata el sarampión?

Si tu bebé no estaba vacunado, se le puede administrar la vacuna contra el sarampión dentro de las 72 horas tras la exposición al virus del sarampión para que lo proteja contra la enfermedad. Si aun así la enfermedad se manifiesta, suele tener síntomas más leves y dura menos tiempo al haberle dado anticuerpos.

Esta enfermedad debe ser tratada atacando directamente los síntomas, por lo que debes hacer que tu bebé se sienta lo más cómodo posible. Puedes darle medicamentos como paracetamol para tratar la fiebre y el dolor.

No le des aspirinas ya que el uso de la aspirina en niños y adolescentes que se están recuperando de una varicela o de síntomas similares a los de la gripe pueden desarrollar el síndrome de Reye, una enfermedad poco común pero que pone en riesgo la vida, en estos niños.

El médico de pediatría es el indicado para dictaminar cuál es la mejor forma de tratar al bebé con sarampión, pero no está de más que sepas que lo tienes que mantener bien hidratado y en reposo.

En caso de que desarrollo neumonía o infección bacteriana de oídos deberá tomar antibióticos.