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Enfermedades contagiosas: ¡atención en los coles!

Enfermedades contagiosas: ¡atención en los coles!

Las guarderías y los colegios son auténticos focos de contagio para los niños pequeños; de hecho, según el Ministerio de Sanidad y Consumo, el 90% de enfermedades que presentan los más pequeños se deben al contacto con otros niños. La cantidad de horas que pasan allí y los juegos continuos permiten a las enfermedades contagiosas transmitirse rápidamente entre ellos. Aunque hay muy poco que hacer para evitarlas, te recomendamos algunos métodos de prevención, así como el tratamiento a seguir de las más comunes.

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Indice

Son muchas, y muy variadas en su naturaleza y gravedad, las enfermedades contagiosas a las que los bebés y niños están expuestos en escuelas infantiles y colegios. A continuación detallamos las más usuales así como unas recomendaciones tanto para su prevención como tratamiento.

 

Gripe

La gripe es la causa más frecuente de infección respiratoria aguda. Es una epidemia periódica que se manifiesta generalmente con síntomas como fiebre, astenia o cansancio, pérdida de apetito, cefalea, somnolencia, malestar general, tos seca, ronquera, dolor de garganta - síntomas de laringitis - y, en ocasiones, con signos de trastornos gastrointestinales, como dolor abdominal, náuseas, vómitos, diarrea o deposiciones blandas. Es una enfermedad altamente contagiosa muy difícil de evitar.

Medidas preventivas:

- Lavarse las manos frecuentemente para reducir el riesgo de contraer la enfermedad.

- Vacunarse. La mejor época para vacunarse frente a la gripe es durante los meses de octubre y noviembre. Los virus de la gripe cambian a menudo. Por eso, la vacuna frente a la gripe se modifica todos los años (para que sea lo más efectiva posible) y por eso, entre otras cosas, el hecho de haberse vacunado el año pasado no confiere protección para el año en curso.

- Evitar lo más posible el contacto directo con personas enfermas de gripe.

Tratamiento:

No existe un tratamiento específico de la gripe ya que se trata de un virus que se instala en nuestro cuerpo y una vez allí realiza su recorrido sin tener en cuenta ningún tipo de medicamento. Las recomendaciones de cualquier médico son permanecer en cama y reposar, beber mucho líquido (zumos y caldos) y recurrir a los antitérmicos, analgésicos y antipiréticos para rebajar la fiebre, los dolores y los demás síntomas de la gripe. Es importante saber que los antibióticos no sirven para combatir el virus de la gripe.
 

Piojos

Los piojos afectan al 14% de los niños en edad escolar. Una afección que apenas sufren los adultos. Son insectos que viven exclusivamente en el ser humano, entre sus cabellos. Miden de 2 a 4 mm de longitud, poseen un color grisáceo, carecen de alas y son hematófagos, es decir se alimentan de sangre, que chupan de la piel de la cabeza. Aunque la picadura no entraña ningún peligro, el rascado constante de una zona determinada para aliviar la comezón sí puede provocar infecciones o enfermedades en el cuero cabelludo (pediculosis). La forma de transmisión más corriente de los piojos es el contagio directo, por el contacto persona-persona. El uso compartido de objetos personales como cepillos, peines, gorras y bufandas también es una vía de transmisión.

Para comprobar que un niño tiene piojos, el método más fácil es cepillar el pelo o pasar un peine de púas finas o lendrera sobre un papel blanco. Los huevos o liendres caerán sobre el papel y se verán pequeños puntos blancos.

Medidas preventivas:

- Emplear sprays repelentes que previenen el contagio

- Revisar la cabeza de los niños apartando mechón a mechón, sobre todo detrás de las orejas, en la nuca y en el flequillo. Será más sencillo hacerlo con el pelo mojado, ya que los piojos se moverán con mayor dificultad.

- Lavarles con frecuencia el cabello: dos o tres veces por semana.

- Peinarles diariamente el pelo. Limpiar los peines y los cepillos después de cada uso.

- Evitar compartir los útiles de limpieza personal.

Tratamiento:

- Quitar las liendres (huevos) con la mano o con la ayuda de una lendrera eléctrica que garantiza su eliminación por electrocución.

- Adquirir en una farmacia una loción antiparasitaria.

- Aplicar sobre el cabello seco la loción. No escatimarla en la zona de detrás de las orejas y en la nuca. Es aconsejable no cubrir la cabeza, si no hay más remedio es preferible hacerlo con una gorra de plástico.

- Aclarar la cabeza con agua y vinagre (la proporción es de un parte de vinagre por dos de agua).

- Desinfectar la ropa y las sábanas, los peines y cepillos, los juguetes y las alfombras y tapizados, lavándolo en agua a 55º C durante unos 15-20 minutos. Lo que no se pueda mojar, lavarlo en seco o aplicando un insecticida.
 

 

Varicela

El 90% de los niños sufre la varicela antes de los 14 años. Es una enfermedad infecciosa causada por un virus del grupo Herpes llamado Varicela Zoster. Se caracteriza por la presencia de fiebre y una erupción en la piel característica (exantema) con forma de vesículas, rodeadas por un halo rojizo. Estas lesiones producen una importante picazón, que muchas veces es la causa de las complicaciones de la varicela. Con el paso de los días, éstas vesículas se van transformando en costras que al estar secas dejan de ser contagiosas.

La varicela es una de las enfermedades más fácilmente transmisibles y con una alta tasa de contagio. Se propaga de persona a persona a través de la tos o el estornudo. La probabilidad de contagio de varicela entre escolares y miembros de la familia es superior al 90%. La varicela contagia hasta cinco días después de la aparición del exantema o hasta que todas las lesiones estén en forma de costra.

Medidas de prevención:

 

Por medio de la vacuna contra la varicela, que se inyecta a partir de los 12 meses de edad. Demuestra ser muy efectiva para prevenir la enfermedad, dando protección durante muchos años.

Tratamiento:

- No existe tratamiento curativo en la varicela, el tratamiento es de sostén ya que la evolución natural de la varicela es la de curación espontánea después de unos días.

- El uso de antitérmicos es indicado para disminuir la fiebre que suele acompañar el cuadro. En ningún caso se debe administrar aspirina, ya que su toma con varicela se ha sido asociado con el síndrome de Reye.

- El niño puede y debe ser aseado por medio de de baños tibios para mantener la piel limpia, el secado posterior debe ser muy suave, sin frotar, para evitar la ruptura de la vesículas.

- El uso de talco mentolado o lociones anti-picor ayudan a disminuir el intenso picor que producen las lesiones.
 

Rubéola, sarampión y paperas

Según el Ministerio de Sanidad y Consumo, en nuestro país se dan una media de 3 casos por cada 100.000 habitantes de estas enfermedades. Se transmiten entre personas a través de estornudos, tos o el contacto con superficies contaminadas (pañuelos, vasos, o manos). El periodo de incubación de estas enfermedades oscila entre los diez días y las tres semanas. A su vez, una persona infectada por alguno de estos virus puede transmitir la enfermedad a otras personas dos días antes de que los síntomas se muestren, no desapareciendo el riesgo de contagio hasta una semana después de la aparición de los signos de la enfermedad.

La rubéola se caracteriza por la aparición de pequeñas erupciones en la piel de un color rosáceo que se inician en la cabeza y progresan hacia los pies, haciéndose más intensas en el tronco, que no provocan picores ni molestias y suelen desaparecer en pocos días. Junto a las manchas rojizas, los síntomas de la rubéola son bastante similares a los de un síndrome gripal, con malestar general, fiebre poco intensa, enrojecimiento de los ojos, dolor de garganta (faringitis) e inflamación dolorosa de ganglios alrededor de la nuca y en la región posterior de las orejas.

El sarampión es causado por un virus. Los síntomas incluyen fiebre, goteo en la nariz, tos, ojos rojos y sensibles, seguido por un sarpullido rojo-café. El sarpullido comienza frecuentemente en la cara y se propaga al cuerpo, con una duración de 3 o más días.

Las paperas comienzan con la aparición de dolor y endurecimiento en la zona correspondiente a la glándula parótida (entre el lóbulo de la oreja y la mandíbula), generalmente debido a la inflamación de la zona. Característicamente el lóbulo de la oreja suele elevarse. La zona afectada tiende a ser dolorosa a la palpación e incluso con la administración de ácidos (limón, vinagre, etc.). Tras el contagio, el aumento del tamaño de la glándula alcanza su máximo volumen a los 2 - 3 días. Generalmente, primero se inflama un lado y en el transcurso de 2 días el otro lado; aunque puede hacerlo únicamente en una sola parte. Suele además asociarse a fiebre inferior a 40º.

Medidas de prevención:

El mejor tratamiento es la triple vírica, una vacuna cuya primera dosis se administra a los 15 meses y el refuerzo a los 4 años. En general esta vacuna no suele producir fiebre ni otras complicaciones. La vacuna induce defensas contra el virus en el 96% aproximadamente de las personas que no habían tenido un contacto previo con el virus.

Tratamiento:

En la mayoría de los casos su tratamiento sólo consiste en mejorar los síntomas que se vayan presentando, básicamente mediante antitérmicos y antinflamatorios. El reposo en cama se deberá hacer según la necesidad. En las paperas, la dieta es un factor muy importante a tener en cuenta, ya que deberá ajustarse a la capacidad para comer sin tener dificultad. Si la ingesta es posible, no hay contraindicación para limitar la alimentación.
 

Virus intestinales

Dentro de éstos se incluyen tanto las diarreas como las gastroenteritis. Cuando se producen por un virus, el contagio es muy rápido y común. Los síntomas principales son vómitos, malestar general y diarreas. Suelen durar unos 3 ó 4 días.

Medidas preventivas:

Lo único que se puede hacer es cuidar la alimentación del niño y mantenerlo sano, para que los virus tengan menos fuerza a la hora de actuar dentro del organismo.

Tratamiento:

Normalmente se recomienda pasar un día o dos tomando sólo suero oral, y poco a poco ir introduciendo una dieta blanda y muchos líquidos (sobre todo agua con limón).
 

 


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Fuentes:

Blog EnFamilia de la AEP: https://enfamilia.aeped.es/temas-salud/gripe; https://enfamilia.aeped.es/temas-salud/piojos; https://enfamilia.aeped.es/temas-salud/varicela; https://enfamilia.aeped.es/temas-salud/sarampion; https://enfamilia.aeped.es/prevencion/vacuna-rubeola

Fecha de actualización: 15-05-2020

Redacción: Irene García

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