Ingredientes de la leche de fórmula

Índice

• Tipos de leche de fórmula
• Ingredientes de leche de fórmula para bebés
• Pero ¿qué hay detrás de estos ingredientes de las leches de fórmula según los expertos?
• Entonces ¿es la leche de fórmula lo que engorda a los bebés?

 

Tipos de leche de fórmula

Por norma general, siempre se va a intentar en la medida de lo posible que la leche maternizada sea lo más parecida a la leche materna y por eso deberán añadirse en ella todos los nutrientes que los bebés necesitan para crecer sanos y fuertes. Su composición se encuentra conformada por los hidratos de carbono, las grasas y las proteínas imprescindibles y, por supuesto, está elaborada con agua, azúcar y en su gran mayoría a partir de leche de vaca evaporada o completa.

Existen distintos tipos de leche de fórmula:

- la leche de fórmula de inicio. Este tipo de leche es la que se utiliza para alimentar a los bebés recién nacidos y a los bebés de hasta seis meses de edad y es lo más parecida posible a la leche materna.

- la leche de fórmula de continuación. Esta, sin duda, la fundamental en la vida de los bebés a partir de los seis meses de edad (cuando comienza la alimentación complementaria) y hasta los tres años.

Además, existen otros dos tipos de leche de fórmula que pueden presentar aspectos de los dos anteriores, aunque, eso sí, con otros fines como son la leche de fórmula adaptada y la leche de fórmula especial. La leche de fórmula adaptada es una leche que contiene sustancias como nucleótidos, ácidos grasos poliinsaturados u oligosacáridos con efecto bidógeno que hacen que se parezca a la materna en cuanto a su fisiología; y la leche de fórmula especial que es la leche que se prescribe a aquellos niños con alguna patología o trastorno y que presenta unas características especiales.
 

Ingredientes de leche de fórmula para bebés

Los ingredientes varían en función de la marca y el país, pero la leche de fórmula para bebés habitual se elabora con leche de vaca desnatada y procesada, con emulsionantes y estabilizadores añadidos para ayudar a mezclar los aceites y el agua al preparar la toma. Además, la leche de fórmula puede contener lactosa y otros azúcares, aceites vegetales, ácidos grasos, vitaminas y minerales de origen vegetal y animal como el hierro, el fósforo o el calcio, un par de enzimas y aminoácidos y probióticos. Sin embargo, hay que tener en cuenta que existen algunos tipos de leche de fórmula como la leche de cabra, las leches hipoalergénicas y la leche de fórmula de soja que pueden tener una combinación diferente de ingredientes.
 

Pero ¿qué hay detrás de estos ingredientes de las leches de fórmula según los expertos?

Pues bien, lo cierto es que algunos científicos han demostrado que hay más de 1.000 proteínas en la leche materna y, aunque en las mejores empresas de leche de fórmula intentan aumentar solo una o dos de ella, solamente han sido capaces de sintetizar algunos de los muchos oligosacáridos que se encuentran en la leche materna. Tal y como afirman, en lo que respecta a la leche de vaca sí es necesario añadir un número excesivo de proteínas para alcanzar el nivel de aminoácidos que necesita el bebé. ¿El problema? Que ese exceso de proteínas se metaboliza y descompone en unos componentes que pueden convertirse en grasa. Sin duda, uno de los grandes problemas de la leche de fórmula y es que aunque a los bebés les va bien con ella y los progenitores suelen pensar que lo están haciendo bien porque sus hijos crecen sin parar, en realidad no es algo bueno para la salud a largo plazo ya que puede causar obesidad.
 

Entonces ¿es la leche de fórmula lo que engorda a los bebés?

Según una investigación estadounidense, “el tipo de leche artificial que toma el bebé sí determina su peso y lo deberemos de tener en cuenta a la hora de escoger una opción u otra”. El estudio realizado partía de la premisa de que los bebés alimentados con leche de fórmula ganan peso de forma más rápida que los niños alimentados con leche materna. Una investigación que, además, asociaba el periodo de lactancia con el desarrollo de enfermedades como la diabetes o la obesidad infantil. Aunque eso sí, cabe destacar que las empresas de leche de fórmula actualmente están intentando reducir los niveles de proteínas en su leche para evitar que los niños engorden en exceso.