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Dra. Esther Serra

Dra. Esther Serra

Licenciada en Medicina y Cirugía por la Universidad Autónoma de Barcelona, es especialista en dermatología infantil y actualmente Coordinadora  del Grupo Español de Investigación en Dermatitis de contacto y Alergia Cutánea  (GEIDAC). La Dra. Serra nos habla de las principales enfermedades de la piel de los bebés y cómo evitarlas en la medida de lo posible

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“Lo principal para evitar infecciones de la piel es mantener una higiene adecuada y respetar el equilibrio del pH”

TodoPapás: ¿Cuál es su labor como coordinadora del Grupo Español de Investigación en Dermatitis de contacto y Alergia Cutánea  (GEIDAC)?

Esther Serra: GEIDAC es un grupo de investigación dentro de la dermatología cuyo campo de estudio son las dermatitis de contacto por sustancias, la atopia, las alergias cutáneas, etc. Nuestro trabajo consiste en observar qué sustancias son más proclives a causar alergias entre la población, y también cuáles pueden serlo en el futuro. Además nos relacionamos con otros equipos de trabajo de Europa, e intentamos llevar un control de estas sustancias dañinas para ayudar al resto de dermatólogos.

TPP: ¿Qué diferencias hay entre la piel de un bebé y la de un adulto?

ES: La anatomía de la piel no varía, ya está bien formada. Pero sí hay unas cuantas diferencias, sobre todo si el bebé es pretérmino. Por ejemplo, la capa córnea de la epidermis, la más superficial y la más externa, es más delgada, por lo que puede causar más problemas. La secreción sebácea también varía desde que nace hasta el primer año de vida, cuando empieza a producir una secreción estándar que se verá modificada de nuevo cuando llegue la pubertad. El espesor dérmico, la parte más interna, también cambia porque las fibras de colágeno no han alcanzado el tamaño definitivo y las fibras elásticas aún están duras. Por eso se dice que la piel del bebé es más fina, porque el espesor dérmico está aún por formar (los vasos circulatorios y los nervios aún no están del todo formados).

La piel es más delgada y con menor vello; tiene mayor permeabilidad por lo que es más sensible a los agentes externos; su sistema inmunitario está en formación; su actividad sudoral es limitada; hay una mayor relación superficie cutánea/peso corporal; y la metabolización sistémica es distinta.

Por lo tanto, la piel de los bebés es más delgada, más irritable y más vulnerable a las agresiones externas, especialmente en el caso de bebés prematuros o de bebés atópicos. 

TPP: ¿Cuáles son las enfermedades más comunes de la piel en los bebés?

ES: La consulta más frecuente en dermatología infantil se debe a casos de dermatitis atópica, es una de las enfermedades con una mayor incidencia entre los bebés. En verano también son frecuentes las sudaminas, causadas por un exceso de sudor. Y otra enfermedad común de los bebés es la dermatitis seborreica de la zona de la cabeza, llamada también costra láctea, que normalmente es atendida por el pediatra y sólo cuando da problemas es cuando se recurre a un dermatólogo para su curación.

TPP: Además de la dermatitis atópica, también muchos bebés padecen la dermatitis de la zona del pañal. ¿Cómo se evita esta enfermedad?

ES: La dermatitis de la zona del pañal es un término genérico que se utiliza para definir una amplia gama de reacciones inflamatorias que afectan a la zona de la piel cubierta por los pañales. A pesar de que en los últimos 15 años se ha observado una significativa disminución en la incidencia de este tipo de dermatitis, continúa siendo la patología más frecuente en la población infantil.

Una de sus principales causas es el contacto de las heces líquidas con la piel. Con el exceso de humedad aumenta el coeficiente de fricción por encima de la piel seca y ésta se vuelve más permeable, facilitando el paso de irritantes bioquímicos. Se altera el equilibrio de la flora bacteriana, haciéndola más susceptible al desarrollo de infecciones. De esta forma, el pH natural de la piel –con un valor entre 4.5 y 6- aumenta.

Para recuperar el pH natural es necesario mantener una higiene correcta de la zona y evitar la humedad, usando productos que ayuden a restablecer el equilibrio.

TPP: ¿Cómo se debe cuidar la piel de un bebé para evitar daños?

ES: Lo principal es mantener una higiene correcta. También hay que controlar la temperatura a la que esté expuesto el bebé, para que no pase excesivo calor. Las ropas deben ser transpirables, naturales, de algodón, o incluso de fibras especiales para los bebés atópicos. La temperatura del baño no debe estar muy caliente, entre 35.5º o 37º, como la temperatura corporal. Hay que mantener el pH equilibrado. Y sobre todo conservar la zona del pañal limpia y protegida.

TPP: ¿Es cierto que cada vez hay más casos de dermatitis atópica? ¿Por qué?

ES: Sí, es cierto. En los últimos años estamos encontrando un incremento de casos de dermatitis atópica. Lo que no sabemos es el motivo, aunque parece que sería el estigma o la marca del desarrollo de una población. Los estudios demuestran que los países desarrollados tienen más casos de dermatitis que aquellos en vías de desarrollo. El origen de esta enfermedad no está claro, podría ser genético, constitucional, ambiental… Lo que sí está claro es que a medida que hay un mayor desarrollo de la población, aumenta el número de pacientes.

TPP: ¿Qué alergias cutáneas son más frecuentes en los niños?

ES: Afortunadamente hay pocas. Las más comunes son las producidas por los conservantes de productos de bebés, las fragancias, al ir creciendo el calzado o determinadas fibras de la ropa. La verdad es que alergias cutáneas vemos pocas. También puede producirse una reacción a algún medicamento o desinfectante. Otra alergia, que cada vez se da menos, es la causada por los termómetros de mercurio, que pueden provocar el Síndrome de Baboon al romperse el mercurio cuando está el termómetro en el cuerpo. 

TPP: ¿La contaminación afecta a la salud de la piel?

ES: Evidentemente afecta a la salud de la piel, lo que es difícil es afirmar hasta qué punto es responsable, por ejemplo, del aumento de casos de dermatitis atópica. Hay muchas opiniones al respecto y lo cierto es que uno de los países que más casos de dermatitis tiene, Finlandia, es un país muy ecológico y con poca contaminación ambiental. Que afecta a la piel es evidente, pero tampoco es responsable de todos los problemas de ésta. 

Decálogo para un culito sano, de Dodot

1- La limpieza del bebé ha de ser suave pero eficaz: se ha de eliminar la suciedad sin producir abrasión o resecar la piel y además proporcionarle protección.

2- Los pliegues y en especial los genitales precisan de una limpieza muy meticulosa. La vulva debe limpiarse de delante hacia atrás para evitar arrastrar gérmenes.

3- Es muy importante utilizar productos que respeten y recuperen rápidamente el pH natural de la piel del bebé para evitar irritaciones y rojeces.

4- Para la higiene diaria se debe utilizar un jabón suave, con un pH de 5,5. La temperatura del agua debe ser ligeramente inferior a la corporal (35º-37º).

5- Utilizar un buen pañal que absorba rápidamente el pipí y las caquitas, ayuda a prevenir la irritación según demuestran estudios dermatológicos.

6- Es importante cambiar el pañal con una frecuencia adecuada y, sobre todo, siempre que el bebé haya hecho deposiciones.

7- Es aconsejable utilizar una buena toallita húmeda en los cambios de pañal que, además de limpiar, recupere rápidamente el pH natural de la piel.

8- En el caso que sea necesario, se puede aplicar una pequeña cantidad de crema protectora en forma de fina película.

9- No es conveniente usar polvos de talco ya que el bebé puede inhalarlos y producirle efectos adversos.

10- Todos los productos necesarios para una higiene eficaz de la piel del culito del bebé deben estar científicamente testados para asegurar así su máxima garantía y fiabilidad.


Fecha de actualización: 10-01-2008

Redacción: Irene García

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