Actividades extraescolares: qué debes tener en cuenta

Índice

• ¿Por qué apuntar a nuestro hijo a clases extraescolares?
• Consejos para elegir actividades extraescolares

 

¿Por qué apuntar a nuestro hijo a clases extraescolares?

Con la llegada del nuevo curso, puede que muchos de vosotros os estéis planteando -si no lo habéis hecho ya- a qué actividades extraescolares apuntar a vuestro hij@. La oferta es enorme y puede que estés un poco perdido.

Como propuso Howard Gardner en los años 80, las personas nos formamos de inteligencias múltiples. Es decir, cada uno contamos con un campo de habilidades en el que mostramos mejor propensión y facilidad de aprendizaje: lingüística o verbal, matemática, musical, corporal, espacial o visual, interpersonal…

El colegio no siempre cubre todas estas inteligencias. Por eso, las actividades extraescolares pueden ser el momento y escenario indicado para ello. Deportes de todo tipo (más allá del fútbol para los niños y el ballet para las niñas hay muchísimos deportes: atletismo, natación, baloncesto, gimnasia deportiva…), música, idiomas (cuanto antes, mejor), arte, teatro, escritura…

Lo importante a la hora de buscar una actividad extraescolar es complementar las actividades que el niño realiza en el colegio con otras diferentes que le permitan explorar todas sus habilidades y realizar actividades divertidas y diferentes.

Además, nunca hay que elegir por el niño, debe ser él mismo quien indique si una actividad le apetece o no, no le obligues o nunca conseguirás que la disfrute.
 

Consejos para elegir actividades extraescolares

Pero, antes de nada, ten esto en cuenta:

- Nivel de compromiso. Puede que tu hijo, por edad o personalidad, no esté ahora mismo por la labor de aprender a tocar el piano, o a practicar 10 horas semanales de un deporte o actividad…Considera el tiempo libre del que dispone y el nivel de sacrificio y compromiso que requiere la actividad a la que le quieres apuntar.

- Tiempo del que disponéis. Considera alguna actividad a la que le podáis llevar y recoger cómodamente, que no se solape con vuestros horarios o sea a horas intempestivas y que permita a tu hij@ (y a ti) tener algo de tiempo libre. Puede que al principio consideres que es plausible, pero si vas sumando dificultades puede acabar siendo una lucha constante que, a la larga, os acabe agotando a todas las partes.

- Gustos de tu hijo. ¿Qué le gusta a tu hijo, por qué ves que se siente inclinado? Puedes ser que veas o te digan en el colegio que tiene buen oído musical, o que disfrute corriendo y saltando, o que en cuanto tenga un momento se ponga a dibujar, o le guste inventar historias. Habla con él/ella y busca una actividad que vaya a expandir sus gustos y habilidades en algo que de por sí le interesa.

- ¿Qué habilidad quieres potenciar? Puede que quieras que aprenda a nadar con ese curso de natación, o que aprenda recursos para superar su timidez o hablar en público con unas clases de teatro, o te diga su médico que conviene que haga determinado deporte… A veces las actividades extraescolares son una buena oportunidad de trabajar en aquello que tu hijo necesita, aunque a priori no esté demasiado por la labor.

- Prioriza. Ves a tu hij@ con tantas aptitudes que quieres que haga de todo. Deporte, arte, ciencia, idiomas… Pero detente. No llenes todo su tiempo libre de actividades. Prioriza y elimina algo de la lista. No solo le permitirá a tu hij@ poder tener tiempo para jugar o hacer lo que quiera, sino que supondrá que se pueda centrar más en aquello que esté aprendiendo. Recuerda el refrán: “El que mucho abarca, poco aprieta”.