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¿A qué edad se puede quitar un lunar?

¿A qué edad se puede quitar un lunar?

En la piel de cada uno de nosotros, en muchas ocasiones, y desde que nacemos o desde bien pequeños van apareciendo lunares, verrugas o fibromas que se han de ir observando y actuar en el caso de que, por ejemplo, cambien de aspecto. ¿Quieres saber si tu hijo a su edad ya puede eliminar ese lunar que tanto odia?

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Índice

 

Los lunares en niños

Los lunares o nevus pueden ir cambiando de aspecto, color o forma. Tanto manchas como pecas y lunares son en realidad microlesiones frecuentes de la piel que en mayor o menor medida tienen todas las personas. ¿Cómo se presentan?

Forma: la forma del nevus o lunar puede ser regular o irregular pudiéndose presentar hendiduras y cicatrices-

Tamaño: los lunares de mayor tamaño y los adquiridos mayores de 6 mm de diámetro son los que más riesgo tienen de ser malignos.

Relieve: estos lunares o nevus pueden ser lesiones de superficie lisa y plana sin relieve o lesiones de superficie palpable.

Coloración: el color predominante es el marrón de intensidad variable, aunque esto va a depender, por supuesto, del tipo de lunar que sea.

Localización: la localización de dichos lunares puede ser muy variable. Se ha de tener más precaución, por supuesto, con aquellas zonas que más expuestas al sol están.

Los lunares que están, por ejemplo, presentes en los niños recién nacidos podrían ser, sin duda, motivo de consulta frecuente en las diferentes consultas dermatológicas, pero ¿son lunares realmente? Estos lunares que aparecen en el cuerpo /o rostro de los recién nacidos se llaman nevus melanocíticos congénitos. Son lunares que suelen estar presentes al nacer y que pueden tener cualquier tamaño. De hecho, en algunos casos estos lunares pueden llegar a ocupar parte de la superficie corporal del bebé. Pero ¿por qué aparecen? La aparición de los lunares se debe principalmente a un defecto del desarrollo embrionario que suele ocurrir, además, pasadas las diez semanas de vida intrauterina, es decir, antes del sexto mes.

¿Cómo es su apariencia? Los lunares están presentes al nacer o quizás algunos comienzan a aparecer poco después. Su apariencia es de color marrón pálido o bronceado que más tarde se vuelven más oscuros y elevados al menos durante la lactancia. Muchos de nosotros considerados que son malignos, pero ¿es del todo cierto? Muchos estudios apuntan a que, con independencia de su tamaño, estos tienen una mayor incidencia de transformación en melanoma maligno. La mayoría de ellos, no obstante, son benignos pues crecer proporcionalmente con el pequeño y no sufren cambios malignos nunca. Sin embargo, y según el tamaño del lunar, por supuesto, el riesgo de transformarse en un melanoma será mayor o menor. Los lunares los podemos clasificar en:

nevus congénitos pequeños. Menores de un centímetro y medio de diámetro. Dichos lunares están presentes en el 2% de los bebés recién nacidos y su riesgo de malignizarse es muy pero que muy pequeño.

nevus congénitos medianos. De 1,5 a 20 centímetros de diámetro. Presentes en 1 de cada 2000 recién nacidos y su riesgo de hacerse malignos se incrementa, pero en la pubertad.

nevus congénitos grandes. Mayores de 20 centímetros de diámetro. Su prevalencia es de 1 de cada 20.000 recién nacidos. El riesgo de malignizarse es muy elevado, incluso en la edad infantil.

 

¿Deberían quitarse los lunares?

Está claro que bajo un punto de vista estético a medida que el niño o la niña crece va a ir desarrollando su lunar y/o lunares pelos terminales gruesos que van a ir adquiriendo también un aspecto abultado y verrugoso. Es por este motivo por lo que cuando los lunares se presentan en zonas muy visibles a edades, quizás, desde un punto de vista médico, muy precoces, pueda ser deseable su extirpación, aunque también se ha de tener en cuenta que cuanto más grande sea el lunar más posibilidades tiene este de transformarse en un melanoma.

 

Si no se quitan, hay que vigilarlos…

Por supuesto. En algunos casos, de hecho, se decide no extirpar el lunar tanto en recién nacidos como en niños pequeños cuando todavía son los padres quienes tienen la potestad para decidir si se le quita o no dicho lunar por lo que será completamente necesario vigilar estos hasta la pubertad cuando la extirpación bajo anestesia local es más factible. Por ello, el seguimiento y vigilancia de estos lunares por dermatólogos especializados es completamente necesaria.

 

Y si se da el caso, ¿cómo hay que quitarlos?

Los lunares podrán ser eliminados por motivos médicos o bien por motivos estéticos: con cirugía menor o con láser. Pero ¿en qué se diferencian? Lo primero que se debe saber es que eliminar los lunares con láser está indicado especialmente para todos aquellos que tienen un tamaño o relieve pequeño, o aquellos cuya extirpación plantea mayores problemas por el lugar donde se encuentran. Ello, no obstante, no incide en absoluto sobre la piel sana ya que solamente van a producir quemaduras sobre los puntos de un color específico.

¿Y el procedimiento quirúrgico? Este se utiliza para otras lesiones de un tamaño o profundidad mayores. Se trata de un método bastante más clásico o tradicional porque se trata en realidad de extraer de la superficie cutánea los lunares no deseados mediante técnicas de rasuración o de biopsia por punción.


Fuentes:

Expertos Dermatología Grupo Jaén

Manchas de nacimiento https://kidshealth.org/es/parents/birthmarks-esp.html

 

Fecha de actualización: 20-04-2021

Redacción: Ana Ruiz

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