¿Pueden los niños comer picante?

Índice

• Entonces los picantes: ¿cuándo y cómo?
• ¿Qué pasa en otros países?
• Ventajas de las especias
• Algunas ventajas y desventajas del picante en la comida de los niños

Pues bien, tal y como afirma la Asociación Española de Pediatría (AEP), a partir del año los niños pueden comer lo mismo que los padres, aunque con algunas excepciones:

- no comidas picantes o muy especiadas, y bebidas gasificadas, excitantes o energéticas.

- los fritos deben cocinarse a alta temperatura y durante muy poco tiempo de fritura.

- evitar el exceso de alimentos azucarados, en especial la bollería industrial y los zumos. Si se tiene sed mejor ofrecer agua entre las comidas.

- no ofrecer frutos secos a menores de tres años por riesgo de atragantamiento.

- y todos los días ofrecer como mínimo cuatro comidas al día.
 

Entonces los picantes: ¿cuándo y cómo?

Las especias más fuertes o picantes como son el ajo, la pimienta o el curry deberían empezar a utilizarse cuando ya hayamos introducido todos los alimentos en la dieta del niño, pero eso sí, hacerlo siempre de manera gradual utilizando poca cantidad para evitar indigestiones o rechazo por el sabor. Además, los expertos aseguran que es mejor no hacerlo antes de los 3 o 4 años.

La razón principal, sobre todo en el caso de bebés más pequeños, se debe porque apenas están acostumbrados a los alimentos básicos y por tanto pueden ser propensos a desarrollar reacciones adversas a ciertos alimentos. Además, hay que tener en cuenta también, en cuanto a alimentación de los niños se refiere, que los niños durante la lactancia son más proclives a desarrollar intolerancia a los picantes en esta etapa ya que cuando se está amamantando los restos de sabor y sustancia de lo que se come pasan a la leche materna, y si la madre se excede con los picantes como, por ejemplo, el curry, los bebés pueden desarrollar esta intolerancia desde pequeños.

No obstante, también hay que tener en cuenta que cada niño es un mundo y son en realidad los padres quienes tienen que decidir y considerar cómo le van sentando a sus hijos los alimentos. Por eso, si al añadir especias con sabores demasiado fuertes o picantes, el niño se encuentra algo mal porque se le haya podido irritar el sistema digestivo o bien haberle causado algo de reflujo lo mejor entonces será posponer la introducción de estos alimentos a su dieta o evitarlos en caso de alergias.

Ten cuidado sobre todo con alimentos muy picantes con alto contenido en capsaicina, ya que produce mucho ardor en la boca y le resultará moleso, como el chile, la guindilla, etc. 
 

¿Qué pasa en otros países?

Lo cierto es que la introducción de estas especias es más sencilla en países donde se utilizan mucho más a menudo y la comida suele ser muy especiada o picante que, por ejemplo, en el caso de España. Como ya veíamos los sabores de la dieta materna pasan a la leche, pero esos bebés ya están acostumbrados a esos sabores en cierta manera porque es “la rutina alimentaria” de su madre.
 

Ventajas de las especias

Efectivamente todas las especias dan un toque especial y bastante sabroso a los platos, algo que sin duda favorece la introducción de algunos determinados alimentos para los niños, pero, sin duda, hay algo mucho mejor: el uso de especias nos permite emplear menos sal al cocinar.

Otro de los alimentos que consideramos picantes es el ajo muy tradicional en nuestros guisos y aliños. Este tiene propiedades antisépticas, lo que a la vez ayuda a evitar intoxicaciones alimentarias. Otros condimentos que usamos son la cebolla, la canela, la guindilla, la pimienta blanca, la negra o el pimentón. Si los toleran bien estos sabores, y no les provoca reflujos o dolor de estómago, entonces no hay de qué preocuparse.

A algunos niños y a adultos les encanta la comida sabrosa y con sabores intensos. De hecho, hay muchos frutos secos y algunos aperitivos que están sazonados con estos sabores algo picantes y que probablemente sean los favoritos de tus hijos, pero mejor siempre en pequeñas raciones. El picante en sí tiene bastantes beneficios para el organismo, pero hay que tener cuidado.
 

Algunas ventajas y desventajas del picante en la comida de los niños

Por norma general, los alimentos picantes sirven para combatir los resfriados, limpian los pulmones de mucosidades, ayudan a mejorar el aparato digestivo y, además, ayudan a eliminar los gases del intestino por lo que nada parece estar en contra de que los niños tomen algo de picante en algunas ocasiones. Sin embargo, si tus hijos tienen problemas urinarios o alguna infección de este tipo será mejor evitar este condimento.

No obstante, lo que sí hay que tener en cuenta es que nunca se debe dejar comer a los niños algo de comida picante con las manos ya que es habitual que luego se restrieguen la cara o los ojos, y esto sí les produzca un gran malestar. Por tanto, con algunas precauciones podrán tomarlo, pero mejor que sean un poco mayores.