• Buscar

¿Cómo puede afectar el embarazo a una deportista de élite?

¿Cómo puede afectar el embarazo a una deportista de élite?

Recientemente se han conocido casos de deportistas de alto nivel que han seguido compitiendo en las primeras semanas de embarazo, como Serena Williams. ¿Cómo puede afectar a su rendimiento estar embarazadas? ¿Les puede perjudicar o ayudar?

Publicidad

Indice

 

Rendimiento deportivo y embarazo

Cuando se hizo público que Serena Williams estaba embarazada de 20 semanas, echando cuentas podía comprobarse que había ganado el Open de Australia embarazada de 8 semanas. Esto plantea la duda de cómo puede afectar el embarazo a deportistas de élite, como la tenista estadounidense.

Los expertos responden que estar embarazada puede afectar a ciertos aspectos del rendimiento deportivo, pero depende de cómo reaccione el organismo al embarazo ya que no todas las mujeres lo llevan igual ni presentan los mismos síntomas y molestias.


Aumento de los glóbulos rojos

Una de las formas en que el embarazo afecta el cuerpo de una mujer es el aumento del volumen de glóbulos rojos. El volumen de sangre bombeada desde el corazón de una mujer aumenta un 10% al final de su primer trimestre. Con más glóbulos rojos, el cuerpo es capaz de suministrar más oxígeno a los músculos mientras trabajan.

De hecho, algunos atletas tratan de aumentar su nivel de glóbulos rojos mediante el entrenamiento a altas altitudes, un efecto que dura por lo menos unos días y da a los atletas un impulso de oxígeno cuando regresan a tierra baja.

El corazón también se hace más grande durante el embarazo, lo que también puede proporcionar más oxígeno a los músculos.

El aparato respiratorio es el que sufre un mayor cambio y el que produce la mejoría en las deportistas. La elevación el diafragma en la segunda parte del embarazo produce una disminución del volumen espiratorio y la capacidad residual, pero al aumentar el volumen inspiratorio la capacidad vital se mantiene.

Pero los investigadores están divididos sobre si esto mejorar el rendimiento atlético o no. James Pivarnik, de la Universidad Estatal de Michigan en East Lansing, dice que los cambios significativos no ocurren hasta finales del segundo trimestre y, en ese punto, el peso adicional que una mujer está llevando probablemente sobrepasa cualquier mejora del funcionamiento.


Cambios hormonales durante el embarazo

Los cambios en las hormonas también pueden afectar al rendimiento y la resistencia. Las oleadas de estrógeno y progesterona que las mujeres embarazadas experimentan pueden cambiar el metabolismo - alentar al cuerpo a descomponer las grasas para obtener energía en lugar de hidratos de carbono. Esto permitiría a las mujeres embarazadas aferrarse a sus reservas de energía de carbohidratos por más tiempo, lo que les permitiría avanzar más a medida que los competidores se cansan. Pero esto es sólo una teoría, explica Pivarnik.

Una teoría que en los años setenta y ochenta llevaron a muchas deportistas a rumores de “dopaje por aborto”, diciendo que habían sido alentadas u obligadas a quedarse embarazadas antes de competir para aprovecharse de esta subida hormonal, y posteriormente a abortar.

"El embarazo no sería reconocido como dopaje", dice Nick Wojek, jefe de ciencia y medicina de UK Anti-Doping. "No hay nada en las regulaciones sobre el embarazo, y sería muy difícil probar que alguien lo estaba haciendo."

Pero desde luego es una técnica muy peligrosa y arriesgada para la salud mental y física de la madre, por lo que nunca pudo comprobarse si realmente se había llevado a cabo o no.

Por lo tanto, es posible que estar embarazada de pocas semanas pueda ayudar al rendimiento deportivo (lo que quizá le pasó a Serena Williams) pero en ningún caso serviría para aquellas mujeres que se pasan las primeras semanas mareadas, cansadas o con náuseas y vómitos.
 

Recomendaciones para la práctica deportiva durante el embarazo

- Actividades deportivas que deben ser desaconsejadas por mayor riesgo de caídas y lesiones por las modificaciones del equilibrio corporal y el aumento del peso corporal: todos aquellos deportes o ejercicios que entrañen riesgos de impactos o presión descompresión en el abdomen-feto y que puedan crear un traumatismo en el feto (fútbol, baloncesto, voleibol, esquí, ciclismo, tenis, equitación, parapente, escalada, judo, patinaje, esgrima, submarinismo, alpinismo, deportes de combate ...); tampoco deportes o actividades de esfuerzo brusco y/o anaeróbico láctico (generalmente pulsaciones superiores a 150 l/min), inciden negativamente en el aporte de oxígeno al feto (competición deportiva, atletismo, culturismo …); así como ejercicios y deportes con cambios bruscos de dirección o en los que la pelvis se vea sometida a una actividad abusiva que puedan dañar al futuro bebé (carreras, vallas y saltos en atletismo, ciclismo, equitación ...) .

-  Se puede practicar cualquier actividad si se practicaba antes del embarazo salvo las totalmente desaconsejadas antes mencionadas.

- Se debe interrumpir la actividad cuando la mujer se sienta acalorada, incómoda o muy cansada. También si experimenta alguno de los siguientes síntomas: hemorragia vaginal, pérdida de líquido amniótico, contracciones, dolor abdominal no explicado, ausencia de movimientos fetales, edema de manos, cara o pies, cefaleas intensas, alteraciones visuales, flebitis, aumento excesivo de frecuencia cardiaca, palpitaciones, dolor torácico, ganancia de peso insuficiente.

- Hay que beber agua para compensar la pérdida de agua por la transpiración cutánea.

- Se deben evitar los ejercicios prolongados, especialmente en ambiente caluroso y húmedo, ya que dan lugar a una hipertermia materna.

- Para las deportistas, se aconseja disminuir la intensidad del entrenamiento en un 20-30% y comprobar la evolución.


Fuente:

Exercises during pregnancy anad the postnatal period. American Collage of Obstetricians and Gynecoloist. Washington DC. 

Fecha de actualización: 28-10-2020

Redacción: Irene García

Publicidad
Publicidad

TodoPapás es una web de divulgación e información. Como tal, todos los artículos son redactados y revisados concienzudamentepero es posible que puedan contener algún error o que no recojan todos los enfoques sobre una materia. Por ello, la web nosustituye una opinión o prescripción médica. Ante cualquier duda sobre tu salud o la de tu familia es recomendable acudir a unaconsulta médica para que pueda evaluar la situación en particular y, eventualmente, prescribir el tratamiento que sea preciso.Señalar a todos los efectos legales que la información recogida en la web podría ser incompleta, errónea o incorrecta, yen ningún caso supone ninguna relación contractual ni de ninguna índole.

×