Muerte súbita en bebés

Indice

• ¿Qué es el Síndrome de Muerte Súbita del Lactante?
• Factores de predisposición a la muerte súbita
• ¿Por qué se produce la muerte súbita en bebés?
• ¿Cómo prevenir la muerte súbita?

 

¿Qué es el Síndrome de Muerte Súbita del Lactante?

El Síndrome de Muerte Súbita del Lactante es la muerte repentina e inesperada de un niño menor de un año. Es un hecho que permanece sin explicación incluso después de una autopsia completa y revisión del historial clínico. Suele ocurrir entre el primer y el sexto mes de vida, en especial entre los dos y los cuatro meses.

Antes de que se descubriese que dormir boca arriba reducía este síndrome, la muerte súbita suponía la primera causa de muerte en los lactantes menores de un año.

 

Factores de predisposición a la muerte súbita

- Haber presentado un episodio de apnea sin una causa conocida.

- Bajo peso al nacer (<1.500 g).

- Prematuridad.

- Sobreabrigo del lactante en los días fríos del año.

- Madres jóvenes, menores de 20 años.

- Madres fumadoras.

- Lactancia artificial.

- Colocar al niño boca abajo al dormir.

- Hermanos posteriores o gemelos de una víctima del síndrome.

La mayoría de las muertes por SMSL ocurren en bebés de entre dos y cuatro meses, y los casos se incrementan durante el clima frío.
 

¿Por qué se produce la muerte súbita en bebés?

No se conoce el hecho concreto que provoca este síndrome en algunos bebés y en otros no bajo las mismas circunstancias.

Los múltiples estudios que se han realizado en medicina sobre el tema han permitido reducir considerablemente la incidencia al averiguar ciertas causas que propician la muerte súbita (postura al dormir, tabaquismo en la madre, etc.); pero se desconocen los motivos que llevan a la muerte a un bebé aparentemente sano.

Infecciones respiratorias banales, alteraciones en los centros del sistema nervioso que regulan la respiración y el funcionamiento del corazón, infecciones bacterianas… son muchas las causas que se barajan, pero ninguna resulta ser la definitiva.

Se cree que los bebés que fallecen por el SMSL pueden tener un problema en la parte del cerebro que ayuda a controlar la respiración y la interrupción del sueño. Si un bebé está respirando aire viciado y no recibe suficiente oxígeno, el cerebro suele enviar una señal para que el bebé despierte y llore para recibir más oxígeno. Si el cerebro no emite esta señal, los niveles de oxígeno continuarán descendiendo, lo que puede desembocar en su fallecimiento.

Otras investigaciones apuntan a un defecto en el sistema inmunológico: algunos bebés con SMSL genera un número de glóbulos blancos y proteínas mayor que lo normal. Algunas de estas proteínas pueden influir en el funcionamiento del cerebro y cambiar el ritmo cardíaco y la respiración durante el sueño o hacer que el bebé caiga en un sueño profundo.

O a un trastorno metabólico: es posible que los bebés que nacen con un cierto trastorno metabólico, por ejemplo, no tener cierta enzima (acil-CoA deshidrogenasa de cadena media), no sean capaces de procesar bien los ácidos grasos, lo que puede originar una interrupción rápida y fatal de la respiración y de la función cardiaca.
 

 

¿Cómo prevenir la muerte súbita?

Las siguientes medidas pueden reducir el riesgo de muerte súbita:

- No fumar durante el embarazo y que la pareja también lo deje. Asimismo, evita los ambientes cerrados con humo.

- Que el bebé duerma en una cuna en el cuarto de los padres durante los seis primeros meses.

- Dormir boca arriba. Al menos hasta los 6 meses, los bebés deben dormir boca arriba y sin almohadas o cojines que puedan asfixiarles mientras duermen; a excepción de los niños que padecen reflujo gastroesofágico, que deben dormir de lado. Algunos investigadores consideran que dormir boca abajo podría provocar un bloqueo de las vías respiratorias y dificultar la respiración. Al dormir boca abajo, es más probable que el bebé respire el aire que acaba de exhalar, lo que puede hacer que el nivel de oxígeno del cuerpo se reduzca y se eleve el nivel de dióxido de carbono, causando asfixia.

- Mientras duermen, su cabeza debe estar siempre descubierta. Colócale con las sábanas bajo los brazos para que no pueda meterse bajo la ropa y los pies pegados al final de la cuna. Otra opción es que le compres para dormir un saco para bebés, en lugar de sábanas y mantas.

- Evitar que el niño duerma con los padres haciendo colecho a no ser que sea con seguridad.

- La temperatura del cuarto debe estar alrededor de los 20 ºC para que el bebé no se sobrecaliente. Ésta es la temperatura adecuada con una camiseta, un pelele, una sábana y dos mantitas (o su equivalente)

- Los bebés no son capaces de regular su temperatura corporal, por lo que no debes colocar su cuna cerca de corrientes, radiadores o ventanas por las que entre el sol.

- Usar chupete. Algunos estudios afirman que el uso de chupete reduce la incidencia de la muerte súbita, aunque no está 100% demostrado

- Dar el pecho, aunque no se sabe por qué, la lactancia materna también protege contra el SMSL.

- Seleccionar la cuna con cuidado. El colchón debe ser firme. Evita colocar al bebé sobre acojinados gruesos de felpa que puedan interrumpir su respiración si presiona la cara contra ellos.

- Si tu hijo padece apneas, consulta al pediatra para buscar la causa y solicita un monitor de apneas. Este aparato alerta de una apnea mediante unas alarmas. En casi toda España, el alquiler de este monitor está subvencionado por los gobiernos de las comunidades autónomas.