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Lesiones vasculares en el recién nacido

Lesiones vasculares en el recién nacido

Las lesiones vasculares son un grupo de enfermedades de difícil diagnóstico y tratamiento que se clasifican en dos grandes categorías: malformaciones vasculares y hemangiomas. Este tipo de patologías afecta a un 2,5% de recién nacidos y se manifiesta en las primeras semanas de vida.

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Índice

 

¿Por qué aparecen las malformaciones vasculares?

Las malformaciones vasculares se deben a errores innatos en el desarrollo embrionario de los vasos sanguíneos y se presentan desde el nacimiento. En cambio los hemangiomas son tumores vasculares benignos que pueden manifestarse en el nacimiento o en las primeras semanas de vida del niño.

La manifestación de este tipo de anomalías va desde manchas asintomáticas y puramente estéticas en la piel hasta lesiones que pueden comprometer algún órgano vital e incluso la vida del niño. “Casi siempre se diagnostican en el momento del parto o en las primeras semanas de nacimiento como lesión vascular. Es clave realizar el diagnóstico correcto para instaurar de forma temprana el tratamiento, sobre todo en los casos de riesgo vital” afirma la Dra. Cristina Villegas, jefa del servicio de Dermatología del Hospital Sanitas La Moraleja. Para ello, la nueva Unidad de Sanitas Hospitales cuenta con una avanzada aparatología diagnóstica que incluye, entre otras pruebas: dematoscopia manual y digital; biopsia cutánea diagnóstica; fotografía digital; ecógrafo y doppler.
 

Principales lesiones vasculares en recién nacidos

Las anomalías vasculares se clasifican en dos grandes grupos: los tumores vasculares y las malformaciones vasculares.

Tumores vasculares

- Hemangiomas infantiles: son los tumores benignos más frecuentes en la infancia. Son más frecuentes en la raza blanca, en los recién nacidos pretérmino, en los de bajo peso al nacer, en recién nacidos de madres con edad materna avanzada. Son cúmulos de vasos sanguíneos adicionales en la piel de un bebé que pueden verse como manchas rojas, gomosas y abultadas "en fresa", mientras que otros se parecen a hematomas profundos. Los hemangiomas infantiles suelen atravesar un período de crecimiento rápido seguido de una desaparición y aplanamiento más graduales. Hacia los 18 meses de edad, la mayoría de los hemangiomas comienzan involucionar volviéndose menos rojo y más plano. Solo se tratan los que provocan otras complicaciones.

Hemangioendotelioma kaposiforme: es un tumor poco frecuente y agresivo. Se desarrolla de forma predominante como lesión única en la piel del tronco y extremidades, o en el retroperitoneo. Al inicio, su apariencia es similar a la de un hemangioma del lactante, aunque luego se va tornando más profundo, violáceo y crece. El tratamiento debe ser agresivo para salvar la vida del bebé.

Sarcoma de Kaposi: es una enfermedad por la que se forman lesiones malignas (cancerosas) en la piel, las membranas mucosas, los ganglios linfáticos y otros órganos. Por lo general, las lesiones son de color púrpura y se componen de células cancerosas, vasos sanguíneos nuevos, glóbulos rojos y glóbulos blancos. El tratamiento consiste en radioterapia, quimioterapia, inmunoterapia, cirugía, criocriugía…

Angiosarcoma: es un tipo de cáncer poco frecuente que se forma en el revestimiento de los vasos sanguíneos y los vasos linfáticos. Suele presentarse, con mayor frecuencia, en la piel del cuello y la cabeza. El tratamiento suele ser cirugía, radioterapia y/o quimioterapia.

Malformaciones vasculares

- Hemangioma o picotazo de la cigüeña. Manchas rosadas, rojizas o color salmón que suelen aparecer en la frente, párpados, nariz, labios o nunca. Son planas y desaparecen solas.

- Angioma en fresa. Mancha elevada de color rosa o rojiza. Aparecen en cualquier parte del cuerpo, aunque son más frecuentes en cabeza, cara y brazos. La mayoría desparecen solas antes de los 2 años, solo se tratan las que producen complicaciones.

- Manchas en vino de Oporto. Marcas de nacimiento planas de color rosa o rojo, compuestas por capilares adicionales. El tratamiento con láser puede ser útil para aclarar un poco la marca de nacimiento y ayudar a prevenir el oscurecimiento y el engrosamiento.
 

¿Cómo se tratan estas lesiones vasculares?

El tratamiento de pediatría debe establecerse de forma individualizada valorando el tamaño y su localización, presencia de complicaciones, fase evolutiva en la que se encuentre y la existencia de un compromiso con otros órganos o funciones.  “El pediatra o dermatólogo, receptor del paciente, valora si la situación anatómica de la lesión requiere de un abordaje multidisciplinar con la intervención de otros especialistas, como oftalmólogos u otorrinos, ya que gran parte de estas malformaciones aparecen en la cara” añade la Dra. Villegas.

Existen nuevos fármacos, como el propanolol oral para el tratamiento de los hemangiomas infantiles. “La mayor eficacia de los fármacos y la creciente aplicación del propanolol están favoreciendo tratamientos más eficaces y menos invasivos” apunta la Dra. Villegas. La cirugía se suele reservar a casos concretos y asociada a otras técnicas, como el láser o los tratamientos de radiología intervencionista. El láser está especialmente indicado para lesiones superficiales y como complemento a la mayoría de los tratamientos.


Fuente:

Dra. Cristina Villegas, jefa del servicio de Dermatología del Hospital Sanitas La Moraleja

Fecha de actualización: 14-05-2021

Redacción: Irene García

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