¿Cómo aplicar la disciplina positiva a las reuniones familiares?

Indice

• ¿Qué es la disciplina positiva?
• Las “terribles” reuniones familiares

 

¿Qué es la disciplina positiva?

Es una metodología creada en los años 1920 por el psiquiatra infantil Alfred Adler. No obstante, su expansión y seguimiento no surgen hasta los años 80 de la mano de la consejera familiar Jane Nelsen, quien adopta este método como base.

Se basa en educar a los niños de forma positiva y afectiva, respetando tanto al niño como al adulto. Sus principios son la comunicación, el amor y la empatía para entender el comportamiento de los hijos y reconducirlo cuando sea necesario con respeto y de manera positiva, evitando las luchas de poder.

Los criterios a tener en cuenta para aplicar la Disciplina Positiva son:

1- Ser amable y firme al mismo tiempo (respetuoso y motivador)

2- Ayudar a los niños a sentirse importantes

3- Es eficaz a largo plazo, no se pueden esperar resultados inmediatos

4- Enseña valiosas habilidades para la vida: respeto, a resolver problemas solo, colaboración, etc.

5-Ayuda a que los niños desarrollen sus capacidades

 

Las “terribles” reuniones familiares

Estos principios pueden aplicarse a las reuniones familiares para evitar los conflictos y las discusiones y lograr un ambiente más fluido y positivo. En este caso, habría que seguir los siguientes pasos:

1- Anotar en un cuaderno la fecha de la reunión, las tareas de cada uno, los temas tratados y los acuerdos a los que se ha llegado.

2- Tienen que participar todos los miembros de la familia y todos deben tener voz y voto, incluso los más pequeños.

3- Hay que reunirse en círculo en un espacio amplio en el que quepan todos y apagar la televisión o cualquier otra distracción. Los niños menores de 4 años pueden decidir si quieren participar o no.

4- Lo primero, antes de comenzar, es hacerse una serie de cumplidos los unos a los otros. Cada uno debe decir algo positivo de otro miembro para crear un ambiente relajado y favorable.

5- Después, el presidente de la reunión (que puede ser cualquier miembro, incluso los niños, y que debe cambiar de una vez a otra), da la palabra a aquella persona que quiera comentar algo. Puede ser algún problema que tenga con otro miembro, alguna propuesta nueva, etc.

6- Cuando acabe, los demás miembros deben aportar sus ideas sobre el tema expuesto. Se anotan todas las soluciones propuestas y se estudia para ver cuál de ellas cumple la regla de las tres R y una U: Relacionada, Respetuosa, Razonable y Útil.

Cuando se adopte una, se anota también en el cuaderno. Una vez aprobada, todos deben cumplir esa nueva norma.

Al acabar, se debe hacer algo festivo: salir a dar un paseo, comer algo, etc.

Siguiendo estos pasos, se consigue que todos participen de los problemas y las soluciones, haciendo que la implicación sea mucho mayor, incluso de los niños. Además, es una manera respetuosa de encontrar soluciones y aprender de los errores, sin crear temas tabú o conflictos sin solucionar.