Síntomas de ictus en niños

Indice

• El ictus en la infancia
• Causas de los ictus
• Síntomas del ictus
• Consecuencias de esta afección
• Tratamiento del ictus

 

El ictus en la infancia

El ictus es un daño, de inicio agudo, que provoca una lesión con consecuencias neurológicas diferentes dependiendo de la zona afectada. Es diferente del accidente cerebrovascular.

Seguro que la mayoría de la población se cuestiona y extraña de que los niños tengan ictus. La verdad es que ocurre, pero en muy pocos casos, alrededor de 6 por cada 100.000 niños al año. También, según el momento que se origina se clasifica en:

Ictus perinatal. Surge desde el cuarto mes de embarazo hasta los 28 días de vida del bebé.

Ictus en la infancia y adolescencia o Ictus arterial postnatal. Cuando aparece desde los 29 días de vida hasta los 18 años de edad.

El bebé que ha sufrido ictus perinatal no va a ser perceptible hasta el cuarto mes de vida. Se verá reflejado en que no se ha desarrollado con normalidad.

Causas de los ictus

Son muchos los motivos que pueden provocar este episodio en niños:

- Infecciones (encefalitis, meningitis)

- Alteraciones cardíacas. Es el factor de riesgo más frecuente, lo encontramos en el 30% de los casos

- Operaciones previas

- Trastornos de la sangre

- Defectos de nacimiento

Síntomas del ictus

- Cefalea insoportable acompañado a veces de náuseas y vómitos

- Fiebre

- Debilidad muscular

- Dificultad a la hora de hablar

- Dificultades en la visión (ve borroso o tiene ceguera parcial o completa)

- Al tener paralizada una parte del cuerpo pierde el equilibrio

- Reducción de su número de pulsaciones

- Parálisis facial

- Agnosia (incapacidad para reconocer estímulos previamente aprendidos)

- Acinesia

- Espasmos faciales y/o distonias

- Apneas asociadas a episodios catatónicos

- Falta de movilidad

- Vómitos y/o náuseas

- Trastorno brusco de la sensibilidad en la cara, brazo o pierna en un lado del cuerpo

- Pérdida del equilibrio

Consecuencias de esta afección

El ictus comporta graves consecuencias en las personas que lo padecen. Entre las principales encontramos:

- Problemas con el habla y la comunicación. Le cuesta hablar.

- Parálisis o poca movilidad de un lado del cuerpo, aquel que ha sido afectado por el infarto cerebral.

- Secuelas motoras como la epilepsia, que se da en muchos casos.

- Alteración del estado mental: confusión, ansiedad, etc.

- Reposo de larga duración: son necesarios muchos meses, a veces años, para recuperar gran parte de lo perdido por el ictus.

 

Tratamiento del ictus

Una vez en el hospital, un profesional de pediatría o neurología atenderá al niño. Se debe hacer una exploración neurológica lo antes posible para confirmar el ictus. Hay pruebas de imagen (TAC, resonancia) que permiten ver la zona afectada del cerebro. También se pueden hacer pruebas de sangre para comprobar si hay infecciones, problemas químicos o problemas de coagulación que puedan causar el ictus.

El tratamiento depende las consecuencias que haya provocado el ictus. Puede hacer falta medicación, terapia física y del habla, gafas o material ortopédico, etc.

Finalmente, debes saber que a pesar de las consecuencias de esta patología cerebrovascular, los niños tienen mayor capacidad para curarse que los adultos. Esto es debido a que el cerebro del niño aún no está del todo desarrollado y tiene una mayor facilidad para recuperarse y volver a la normalidad con la ayuda de las terapias correspondientes.

Así, muchos niños que sufren ictus en las primeras etapas de su vida, con la ayuda adecuada, consiguen alcanzar un desarrollo normal en unos años y llevar una vida normal de adultos. Por supuesto, esto dependerá también de la gravedad del episodio y de las secuelas que haya dejado.