Puede un niño con conjuntivitis ir a la piscina

Indice

• Tipos de conjuntivitis
• ¿Puede ir a la Escuela un niño con conjuntivitis?
• ¿Y a la piscina?
• Prevención de la conjuntivitis
• ¿Cuál es el tratamiento ideal para frenar la conjuntivitis vírica?

 

Tipos de conjuntivitis

Es importante saber que hay varios tipos de conjuntivitis:

- La conjuntivitis bacteriana. Este tipo de infección causa ojos rojos, picazón y con frecuencia dolor en los ojos. Puede afectar a uno o ambos ojos, y con frecuencia se presenta una secreción amarillenta y una hinchazón leve.

- La conjuntivitis viral causa picazón, ojos rojos y llorosos. Puede afectar a uno o ambos ojos. A veces es difícil determinar si un niño tiene conjuntivitis (ojo rojo) viral o bacteriana.

- La conjuntivitis alérgica causa picazón, ojos llorosos y tiende a presentarse debido a un cambio de estación. Afecta generalmente ambos ojos. ​

- La conjuntivitis irritativa se manifiesta con ojos rojos y llorosos después de que el ojo entre en contacto con un irritante (como la arena o el cloro). Se mejora rápidamente sin tratamiento, aunque el contacto con algunos irritantes puede requerir el lavado del ojo.

 

¿Puede ir a la Escuela un niño con conjuntivitis?

La decisión de mandar al niño a la escuela o que se quede en casa puede ser difícil, y depende de varios factores que se deben considerar. 

- Si el niño enfermo tiene otros síntomas generalizados tales como una fiebre, en ese caso puede ser prudente que se quede en casa.

- Muchas escuelas tienen la política de regresar a sus instalaciones 24 horas después de haber comenzado las gotas antibióticas para la conjuntivitis. Por lo tanto, si crees que la infección de tu niño es bacteriana, es prudente visitar al pediatra para determinar si necesita gotas.

 

¿Y a la piscina?

En cuanto a si un niño con conjuntivitis puede ir o no a la piscina, se recomienda que no vaya mientras la infección esté activa por varios motivos. Por un lado, si la conjuntivitis es vírica puede contagiarla a otras personas. Y, además, sea vírica o no, el cloro de la piscina puede irritar aún más los ojos, por lo que es mejor esperar unos cuantos días antes de que el niño regrese a la piscina y que cuando vuelva a bañarse lo haga con gafas de buceo para evitar problemas.

 

Prevención de la conjuntivitis

La prevención es la mejor cura para estos virus comunes. Toma en consideración cómo la escuela de tu niño trata de prevenir la transmisión de estas enfermedades. Como padre debes enseñarles a los niños a lavarse sus manos con frecuencia (especialmente si se frotan los ojos), a estornudar en su manga y a cubrirse la boca si tosen. Si tienes otras preguntas sobre los síntomas de la conjuntivitis de tu niño o te parece que en vez de mejorar se empeoran después de varios días, consulta con su pediatra. 

Algunas recomendaciones para evitar su propagación tanto dentro de casa como en otros lugares donde interactuemos a menudo:

- No dejes tus gafas a otra persona. Los virus son especialistas en acoplarse a este tipo de superficies y luego trasladarse a tus ojos.

- No compartas toallas, sábanas ni, en lo posible, ropa. Es decir, todas aquellas prendas que entren en contacto con tus ojos tienen que permanecer contigo durante el tiempo que dure la enfermedad. Una vez los síntomas se hayan ido, no olvides lavarlas bien.

- Lávate las manos frecuentemente con agua tibia y jabón, sobre todo si vives con alguien y compartes un mismo espacio.

- A la hora de retirar la secreción propia de esta enfermedad, hazlo con las manos bien lavadas y no reutilices ni el paño ni la toallita con la que lo hayas hecho. Tíralas tras la limpieza y lávate las manos.

 

¿Cuál es el tratamiento ideal para frenar la conjuntivitis vírica?

Las molestias en los ojos, que se asemejan a un llanto constante y más espeso de lo normal, suelen durar entre 7 y 15 días. Es decir, estamos hablando de una enfermedad cuyos síntomas desaparecen en unas 2 o 3 semanas y ante los cuales es necesario que sigamos el tratamiento que nos ordene nuestro oculista.

Muchas familias recurren a los remedios caseros para controlar esta infección:

- Remedio casero con manzanilla: Esta planta medicinal posee fuertes propiedades antiinflamatorias y antisépticas que ayudan a aliviar la inflamación, el enrojecimiento y la secreción de los ojos. 

Ingredientes

1 cda de hojas de manzanilla

250 ml de agua

Método de preparación

Colocar el agua en una olla y, cuando comience a hervir, se debe apagar el fuego y añadir la cucharada de manzanilla. A continuación, se debe dejar reposar hasta que esté tibio. Luego se debe colar y remojar una gasa limpia y pasarla suavemente sobre el ojo cerrado, hasta 3 veces por día. 

Esta compresa también puede ser hecha con las hojas secas de caléndula, otra planta que tiene excelentes propiedades antiinflamatorias y antibacterianas. 

- Remedio casero con agua fría: Este remedio con agua fría sirve para cualquier tipo de conjuntivitis, ya que el agua fría ayuda a disminuir la hinchazón y a lubricar los ojos, disminuyendo los síntomas de la conjuntivitis.

Ingredientes

Gasa o algodón

250 ml de agua fría

Método de preparación

Mojar un pedazo de algodón o una gasa limpia en agua fría y aplicarla en el ojo cerrado, dejándola actuar por algunos minutos hasta sentir mejoría de los síntomas. Cuando deje de estar frío, se debe cambiar y colocarse otra compresa fría.

- Remedio casero con zanahoria: Un buen remedio casero para la conjuntivitis es la compresa de zanahoria, ya que la zanahoria actúa como un antiinflamatorio natural, ayudando a controlar los síntomas de la enfermedad. 

Ingredientes

1 zanahoria

Algodón o gasa

Método de preparación

Se debe rallar la zanahoria o pasarla por una pica toda para que libere el jugo. Una vez que se tenga el jugo se debe mojar la gasa o el algodón y se debe colocar la compresa sobre el ojo cerrado durante 15 minutos. Para mejorar el efecto, se recomienda renovar la compresa cada 5 minutos. Esto puede ser hecho 2 veces por día, siempre después de limpiar los ojos con agua o con suero fisiológico. 

Te recordamos que estos remedios caseros son los más utilizados en las familias, pero lo mejor es que asistas con el médico para que le dé la atención necesaria con medicamentos.