Corrección de las orejas de soplillo

Indice

• ¿Por qué se producen las orejas de soplillo?
• Consecuencias de las orejas de soplillo
• ¿Cómo corregir las orejas de soplillo?

 

¿Por qué se producen las orejas de soplillo?

Todos los padres analizan el aspecto físico de sus bebés al momento de nacer: observan sus ojos, su nariz, su boquita y sus orejas, y a muchos padres les preocupa que estas últimas estén despegadas de la cabeza pues es cierto que 1 de cada 30 bebés nace con las orejas más separadas de lo normal.

Normalmente el pabellón auricular se desarrolla entre la 6ª y la 16ª semana de gestación y al nacimiento está casi completo. Entre las diferentes anomalías que se pueden encontrar en la región de cabeza y cuello, las orejas en pantalla se encuentran entre las más frecuentes. Según los expertos, las orejas son de soplillo cuando el tamaño, forma o posición son desproporcionados en relación con otros rasgos de la cara. Y, más concretamente, una oreja despegada es aquella en la que la parte superior lateral tiene una separación de más de dos centímetros de la cabeza. En realidad no es una malformación, pues la oreja está bien formada en sus estructuras, sino una deformidad, puesto que en los últimos meses de embarazo la oreja no completó su posición normal.

La causa más común es el desarrollo insuficiente del pliegue del antihélix, lo cual se traduce en un ángulo escafoconchal (entre el antihélix y la concha) excesivamente grande, por encima de los 90º. Otra causa de prominencia es una concha grande y profunda, con pared posterior excesivamente elevada. Otras alteraciones incluyen diversas deformidades del hélix y la prominencia del lóbulo auricular. Esta afección normalmente es bilateral y puede diferir entre ambas orejas.

 

Consecuencias de las orejas de soplillo

La apariencia alada de las orejas no perjudica en absoluto la audición, pero en muchos casos afecta a la autoestima del pequeño quien, a partir de cierta edad, alrededor de los cinco o seis años, ya empieza a tener noción de su apariencia física. Los niños afectados presentan a menudo trastornos emocionales como consecuencia de las burlas de los compañeros de escuela.

En algunos casos, las orejas de soplillo tienden a hacerse más discretas a medida que el niño crece, ya sea porque la cabeza va creciendo y se disimula la deformidad o en el caso de las niñas porque el pelo ayuda a disimularlas.

Algunos niños piensan que es lo normal, sin embargo, otros pueden verse realmente afectados a causa de sus orejas prominentes.

El problema de no estar a gusto con su propia imagen afecta en su vida diaria. Afecta su forma de relacionarse con otros niños, su autoestima e incluso puede acarrear problemas escolares, de concentración y estrés.

Cuando el problema pasa a ser un trauma, hay que buscar una solución por el bienestar del pequeño. Se puede optar por someter al niño a una operación de cirugía estética.

 

¿Cómo corregir las orejas de soplillo?

Las verdaderas orejas en soplillo se pueden corregir cuando el niño cumple los cinco o siete años pues a esta edad es cuando la oreja adopta su forma definitiva, y cuando se puede practicar una otoplastia; antes no es posible ya que el pabellón auricular y su cartílago siguen en crecimiento. La mayoría de los cirujanos recomiendan a los padres que se le exponga al niño la posibilidad de una cirugía y que sea el propio niño quien decida si quiere ser operado y así se sienta partícipe de la solución a su problema.

Las técnicas empleadas para el tratamiento de orejas prominentes son múltiples y variadas. Mencionaremos algunas a continuación:

- Otoplastia: La otoplastia es el nombre con el que se conoce al procedimiento quirúrgico que se realiza para modificar el tamaño o la forma de las orejas, o para disminuir su proyección. Es la cirugía plástica reparadora más demandada entre los menores de edad. Siete de cada diez personas que se operan de las orejas son niños. El objetivo de la otoplastia es reducir el ángulo formado por la oreja y la cabeza y conseguir una forma y una situación correctas para cada oreja y simetría entre ellas, de manera que formen un conjunto armonioso con el resto de las facciones de la cara.

La operación dura dos horas y se lleva a cabo mediante sedación y anestesia local. Es una intervención sencilla, de bajo riesgo, es definitiva y su recuperación es muy rápida, pero implica someter a un niño a una operación quirúrgica. Se deberá evaluar en cada caso por parte del niño, los padres y el pediatra si compensa en función del resultado.

- Otras soluciones: Hay médicos que recomiendan métodos no quirúrgicos para corregir las orejas demasiado separadas de la cabeza, aunque su eficacia no está del todo comprobada. Algunos dicen que directamente no sirven para nada y que si sirve, la solución es temporal.

El método Auri es un método desarrollado por Sorribes en Dinamarca y publicado en 2002 con el objetivo de corregir las orejas prominentes sin necesidad de pasar por el quirófano. Consiste en un clip hecho a medida, que se utiliza durante la noche, en una sola oreja, y que ha conseguido un efecto corrector aceptable de las orejas despegadas. El funcionamiento de este es mejor mientras se use lo antes posible, pues cuando el niño es recién nacido el cartílago de la oreja es más maleable y más corto y, por lo tanto, más efectivo será el tratamiento. Se estima entre 3 y 6 meses de tratamiento.

Otra solución para corregir las orejas de soplillo es un producto nuevo creado por una madre extremeña, un corrector estético que se puede adquirir en farmacias. Se llama DisRas y consiste en una prótesis de silicona transparente que se coloca detrás de la oreja y se adhiere a la cabeza produciendo un efecto estético inmediato. Para favorecer la utilización de este, sobre todo en los menores de 12 meses, se recomienda su uso junto con un gorrito de malla de algodón elástico.

No se recomienda en niños menores de tres años y no especifica si su efecto es sólo visual o si consigue corregir o atenuar la deformidad.

Recuerda que si tienes dudas respecto a este tema o quieres saber si tu hijo tiene realmente orejas de soplillo debes de asistir con tu pediatra, él es el único que tendrá la última palabra y, en caso de ser el problema de tu bebé, pueda decirte cuál será su tratamiento.