Tratamiento de la braquicefalia
La braquicefalia es un tipo de craneosinostosis en la que la sutura coronal se fusiona prematuramente, dando lugar a un acortamiento longitudinal del diámetro del cráneo. También existe un tipo de braquicefalia posicional o adquirida (más habitual) que aparece a consecuencia de una postura prolongada del bebé boca arriba.
Indice
¿Qué es la braquicefalia?
Existen dos tipos de braquicefalia en medicina: la congénita y la adquirida. La primera es una malformación con la que el bebé nace, o que puede ir apareciendo en los primeros meses de vida, causada por el cierre temprano de una de las suturas del cráneo.
Todos los bebés nacen con estas suturas sin fusionar (fontanelas) para permitir la salida del bebé por el canal de parto, y se van cerrando a lo largo de los primeros 2 años de vida del niño. Sin embargo, si una de ellas se cierra antes de tiempo, da lugar a una deformidad que puede ser solo estética o afectar al desarrollo del bebé al no permitir que el cerebro crezca sin problemas. Cuando se cierra tempranamente la sutura coronal (la que separa el hueso frontal del hueso parietal del cráneo) se conoce a esta craneosinostosis como braquicefalia. Esto da lugar a una cabeza corta, ancha y aplanada a nivel occipital (es decir, el occipucio plano).
Los bebés pueden nacer con este problema por malas posiciones en el útero, partos prolongados, macrosomía o uso de instrumental (fórceps, ventosa) en el parto.
Mientras que la braquicefalia adquirida aparece, generalmente en los primeros meses de vida, por estar el bebé colocado mucho tiempo tumbado boca arriba, lo que modifica la estructura de la cabeza. Todos los bebés tienen la parte de atrás de la cabeza un poco plana en los primeros meses de vida, por lo que, para que se considere braquicefalia el ancho (oreja a oreja) de su cráneo debe superar el 81% del largo (frente a nuca). En algunos casos el índice craneal es muy alto, entre 90 y 100, que da lugar a una cabeza practicamente cuadrada.
Es más habitual en bebés muy grandes que duermen mucho. Si no se trata o corrige a tiempo, puede causar hipotonía y retraso motor.
Existen otras deformidades parecidas como la mesocefalia, en la que la forma del cráneo es intermedia entre la braquicefalia y la dolicocefalia, con un índice cefálico que varía entre 77 y 82.
¿Cómo se trata la braquicefalia?
La forma más objetiva que existe para medir las deformidades craneales es mediante el craneómetro, un dispositivo médico de pediatría para diagnóstico y seguimiento de las deformidades craneales.
En cuanto al tratamiento, en el primer caso será necesario recurrir a la cirugía siempre para abrir la sutura y permitir que la cabeza crezca normalmente, dejando el espacio necesario para que el cerebro también crezca y evitar así retrasos.
En el caso de la braquicefalia posicional, si se detecta antes de los 6 meses, puede ser suficiente con el reposicionamiento, colocar al bebé en otras posturas o con un cojín especial. La osteopatía craneal infantil también puede solucionar este problema. Si tiene más de esta edad puede ser necesario un casco remodelador, que deberá llevar más o menos tiempo según la gravedad de la deformidad.
De cualquier modo, será el pediatra junto con el neurocirujano quien decida el tratamiento a seguir.
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