¿Por qué los recién nacidos deben usar gorro?

Índice

• El nacimiento del bebé
• ¿Por qué se le pone un gorrito al recién nacido?

 

El nacimiento del bebé

El momento del parto es el más esperado en toda esta etapa después de los 9 meses que estuviste cargando a tu pequeño, pues ahora es el momento de que salga a conocer a toda su familia y lo recibas con los brazos abiertos.

Todo comienza con las contracciones de parto, las cuales debes saber identificar de las falsas, pues las verdaderas van a ser rítmicas, progresivas e intensas, además de estar acompañadas por los siguientes síntomas:

- Expulsión del tapón mucoso

- Rotura amniótica

- Dilatación cuello uterino

Se podría decir que el último punto es el más importante puesto que al llegar a una dilatación de 10 centímetros es cuando se inicia la etapa de expulsión del bebé, entonces el médico va a pedir que pujes hasta que pueda salir el pequeño.

Una vez que el bebé sale se corta el cordón umbilical y después o durante esto el bebé ya va a estar reposado sobre ti si ambos estáis en buenas condiciones.
 

¿Por qué se le pone un gorrito al recién nacido?

Este contacto piel a piel es muy importante por distintas cosas, una de ellas es el apego que se va a crear entre tu pequeño y tú, pues después de 9 meses por fin os conocéis y podéis estar juntos de otra forma.

También es necesario que estéis en contacto para que pueda seguir sintiendo los latidos de tu corazón y se identifique contigo, además de que el ambiente donde se encontraba es distinto de temperatura y necesita de tu calor para mantenerse estable.

La última es la razón por la que cuando te entregan al bebé la enfermera le pone previamente un gorrito, puesto que la cabeza es la parte de su cuerpo por donde pierden más temperatura y este los ayuda a conservarla.

La cabeza del recién nacido se puede apreciar de un tamaño bastante grande en comparación con el resto de su cuerpo, lo que es todo lo contrario a la etapa adulta, por ello es que al ser casi una cuarta parte de su proporción corporal pierde temperatura tan fácilmente si no se le conserva.

Por eso es importante poner al bebé piel con piel contigo para, entre otras cosas, ayudarle a mantener el calor. No obstante, también es bueno colocar el gorrito en su cabeza y taparle con una mantita, aunque hay estudios que afirman que el gorrito no sirve para mantener su calor y que es innecesario, que lo realmente válido para regular su temperatura es hacer el piel con piel.

Así, una revisión de estudios de 2008 de Cochrane demostró que poner un gorrito a un bebé para evitar que pierda el calor no sirve de nada y que, en cambio, hay otras medidas mucho más importantes en ese sentido, como el contacto piel con piel.

En el estudio trataron de comparar cuál era la mejor estrategia para evitar la hipotermia en los primeros 10 minutos de vida (los más importantes). Compararon tener una sala de partos a una temperatura de 25º C, secar al bebé inmediatamente después del parto, envolverlo con mantas precalentadas, calentar previamente cualquier superficie de contacto y el uso de calentadores radiantes o incubadoras con otros métodos como el contacto piel con piel.

El más efectivo demostró ser el piel con piel. Solo con bebés prematuros, nacidos con menos de 28 semanas, las cubiertas resultaron útiles, pero no hacían nada si había nacido después. A la hora de evaluar el tema de los gorritos concluyeron que "los gorros tejidos no fueron efectivos para evitar la pérdida de calor".

El estudio demostró que en bebés de entre 1.200 y 2.200 gramos el riesgo de hipotermina era menor si se hacía el piel con piel que si se ponía a los bebés en una incubadora. De igual modo, el uso de un colchón transmisor de calor también era mejor cuando los bebés pesaban menos de 1.500 gramos. Por lo tanto, las mejores técnicas para los neonatos eran estas dos, el contacto piel con piel y el uso de los mencionados colchones.

Pero como además de ayudar a conservar el calor, el gorrito también es un elemento estético que sirve para disimular los pelos necios que tiene un recién nacido o la forma de su cabeza que puede estar achatada por el parto, no pierdes nada si quieres usarlo. Y si prefieres oler su cabecita y no ponerle gorro, también puedes.

Eso sí, cuando sea una etapa de frío como invierno debes abrigar siempre bien al bebé con gorrito, bufanda y guantes para evitar que pierda calor por la cabeza y las manos y se ponga enfermo.

Esta situación también va a ser necesaria dentro del hogar si vivís en un lugar muy frío, por lo que probablemente tenga que estar arropado así durante más tiempo del que piensas.