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¿Con cuántos meses empiezan a ver los bebés?

¿Con cuántos meses empiezan a ver los bebés?

Muchos padres primerizos se preguntan si su bebé puede verlos realmente, pues aunque a menudo los reconocen y son capaces de identificar objetos llamativos, a veces pasan por alto juguetes o algunos objetos de colores neutros o claros. 

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¿Cuándo comienzan a ver los recién nacidos?

La visión de los bebés se empieza a desarrollar desde el vientre materno, específicamente alrededor de los 22 días de embarazo. A partir de este momento empiezan a aparecer unos pequeños surcos que, más adelante, darán lugar a la estructura ocular. Unas semanas más tarde, los párpados ya estarán formados, de hecho, es probable que para la octava semana de gestación ya cubran todos los ojos.

El bebé establece contacto visual con su madre desde el mismo momento de su nacimiento. Al principio es breve, porque al recién nacido le resulta difícil mantenerse alerta y concentrado. El bebé ve los bordes de las cosas mejor que la parte central o los detalles. Mantiene sus ojos fijos en ti y recibe la misma respuesta. Este intercambio de miradas marca el comienzo de un vínculo creciente.

Podemos ver su reflejo de orientación cuando el neonato gira la cabeza hacia el foco de luminosidad (excepto si es tan intenso que le molesta, como nos molestaría a los adultos). También el reflejo fotomotor, que consiste en que las pupilas se contraen cuando son iluminadas.

 

Desarrollo de la vista desde el nacimiento

El recién nacido es capaz de ver objetos en una extensión de 20 a 30 centímetros y probablemente en una escala de blanco, negro y grises.

También puede que bizquee debido al empeño que pone en observar tu cara.

Si estás cerca del bebé te ve bien, pero si te empiezas a alejar no. Entonces, al no ver bien, trata de solucionarlo moviendo los ojos y poniéndose bizco, como tratando de enfocar las cosas de manera separada con cada ojo. Muchos padres se asustan, pero no hay motivo porque es normal.

A las dos semanas de edad el bebé puede diferenciar el rostro humano, ya que muestra interés por los objetos alargados y contrastados con el fondo, es decir, diferenciados en cuanto a color y luminosidad. Y, dentro del rostro humano, el bebé tiende a fijarse más en la zona que rodea a los ojos.

Hacia el final del primer mes de vida, el bebé comenzará a mostrar un cierto interés por el entorno, aunque su atención se circunscribe a un radio muy limitado y durante muy cortos periodos de tiempo.

A los dos meses puede seguir un objeto en lento movimiento a una distancia de 30-60 centímetros en un arco de 180 grados. Si antes se podían centrar en objetos difusos, ahora podrán percibir el contorno de los mismos. Además este progreso se acompaña de un mayor control de la cabeza asociado a un fortalecimiento muscular.

A partir de las 10 semanas se produce un avance, ya es capaz de percibir bastante bien los detalles más pequeños en este momento el bebé: descubre sus manos.

Entre los tres y los cuatro meses el aumento del control muscular del ojo le permite al bebé seguir objetos, y el incremento en la agudeza visual le permite discriminar los objetos a partir de fondos con un mínimo contraste.

Si para los 4 meses tu bebé no observa objetos en movimiento o si parece tener problemas para mover uno o ambos ojos en cualquier dirección, habla con su doctor. Cada revisión médica de tu hijo debería incluir también un chequeo visual básico. 

A partir de los siete meses, puede mirar fijamente objetos pequeños, puede ver todos los colores y poco a poco será capaz de seguir objetos que se mueven a mayor velocidad.

En definitiva, a través de la mirada se establece el principal intercambio entre el bebé y su entorno, empezando por los padres, pero la visión es el sentido menos desarrollado en el recién nacido, por ello requiere un proceso de adaptación y aprendizaje que hemos intentado resumir.
 

¿Cómo estimular su vista?

- Rodea su cuna con rayas o estampados llamativos: sábanas, mantas, protectores de cuna, fundas de almohada…

- Rodea el área de juego del bebé con objetos de distintas formas y colores. 

- Elige juguetes que contrastan colores y además producen sonidos.

- La distancia correcta: un recién nacido puede ver claramente a una distancia de 20 a 30 centímetros y esta distancia va aumentando con el tiempo. Tenlo en cuenta a la hora de interactuar con él y estimularlo visualmente. 

- No esperes que un bebé recién nacido te mire con los ojos muy abiertos durante horas y horas ya que duerme muchas horas. Aprovecha los momentos en los que esté más despierto para jugar con él.

- Coge un objeto de colores llamativos y ponlo a la distancia adecuada del bebé para que lo vea. Muévelo de un lado para otro para que lo siga con la mirada.

- Cuando el bebé esté relajado y tranquilo, coloca lentamente un objeto dentro de su campo de visión comenzando a unos l0 cm por detrás de su hombro derecho. Una vez en el centro de su campo de visión, levanta el objeto unos l0 cm por encima de su cabeza, volviéndolo a colocar luego en el centro.

- Puedes atar un globo de colores (rojo y blanco) a cada muñeca del bebé. Enséñale primero que moviendo los brazos suben y bajan los globos. Pronto será él quien los mueva voluntariamente y observará lo que ocurre. 


Fuente:

Ajram, Dr. Jamil, Tarés, Dra. Rosa María (2005), El primer año de tu hijo, Barcelona, Ed. Planeta.

Fecha de actualización: 22-06-2021

Redacción: Edgar Corona

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