• Buscar

Miasis y otras enfermedades tropicales

Miasis y otras enfermedades tropicales

Existen algunas enfermedades, denominadas tropicales porque suelen aparecer solo en los trópicos, que pueden causar una serie de síntomas graves e incluso tener consecuencias mortales si no son tratadas a tiempo. La prevención es fundamental frente a ellas.

Publicidad

Indice

 

Miasis

Enfermedad parasitaria causada por larvas de mosca que afecta los tejidos y órganos de vertebrados (incluyendo a los humanos). Afectan primero a la piel pero luego pueden migrar otros órganos.

La afectación es de distribución mundial, pero predomina en la Zona Tropical y Subtropical.

Las larvas que ocasionan miasis son principalmente de los géneros Sarcophaga, Dermatobia, Oestrus, Gastrophilus, Cochliomyia, Lucilia, Chrysomya y Musca.

Estas larvas se alimentan de los tejidos vivos o necróticos del huésped causando úlceras y forúnculos de lento crecimiento, obstrucción de los conductos nasales, edema facial, fiebre, picor de oído, irritación ocular, dolor abdominal, problemas gastrointestinales… Los síntomas varían en función de dónde estén alojadas las larvas.

El tratamiento consiste en extraer las larvas mediante presión o un corte quirúrgico. Después hay que desinfectar bien la herida, liberar el tejido necrótico y administrar antibióticos para evitar infecciones.


Esquistosomiasis

Es una enfermedad parasitaria aguda y crónica causada por trematodos del género Schistosoma. Las personas se infectan cuando las larvas, liberadas por caracoles de agua dulce, penetran en la piel durante el contacto con aguas infestadas.

Dentro del organismo, las larvas se convierten en esquistosomas adultos, que viven en los vasos sanguíneos, donde las hembras ponen sus huevos. Algunos de esos huevos salen del organismo con las heces o la orina. Otros quedan atrapados en los tejidos corporales, donde causan una reacción inmunitaria y un daño progresivo de los órganos.

La esquistosomiasis es prevalente en las regiones tropicales y subtropicales, especialmente en comunidades pobres sin acceso a agua potable. Se estima que al menos un 90% de las personas que necesitan tratamiento contra la esquistosomiasis vive en África.

Los síntomas varían según el órgano afectado aunque los más comunes son dolor abdominal, diarrea y sangre en las heces, hepatomegalia (aumento del tamaño del hígado), ascitis (acumulación de líquido en la cavidad peritoneal), hipertensión portal o esplenomegalia (aumento el tamaño del bazo) en la esquistosomiasis intestinal.

Hematuria (sangre en la orina), fibrosis de la vejiga y los uréteres, lesiones renales, hemorragias vaginales, dispareunia (dolor durante las relaciones sexuales), nódulos vulvares, trastornos de la vesícula seminal, la próstata o infertilidad en la esquistosomiasis urogenital.

El tratamiento consiste en la administración de antiparasitarios, principalmente prazicuantel que se usa a gran escala en muchas poblaciones (quimioterapia preventiva) para evitar sus efectos nocivos sobre la misma ya que provoca a largo plazo retraso en el desarrollo de los niños o cáncer.

La lucha contra la esquistosomiasis se ha realizado con éxito en los últimos 40 años en algunos países, como Arabia Saudí, Brasil, Camboya, China, Egipto, Mauricio o Irán.


Oncocercosis

La oncocercosis, o "ceguera de los ríos", es una enfermedad parasitaria provocada por el gusano nematodo Onchocerca volvulus. Se transmite por la picadura de moscas negras infectadas.

Alrededor del 99 por ciento de los casos de oncocercosis ocurren en África.

En el cuerpo humano, los gusanos adultos producen larvas embrionarias que migran a la piel, los ojos y otros órganos.

La oncocercosis es una enfermedad de la piel y los ojos. Los síntomas están provocados por las microfilarias o larvas que se desplazan por el cuerpo humano y provocan respuestas inflamatorias cuando mueren. Se pueden presentar síntomas como prurito intenso y diversas afecciones cutáneas desfigurantes. También pueden desarrollarse lesiones oculares que pueden producir discapacidad visual y ceguera permanente.

El tratamiento es un antiparasitario, ivermectina, que hay que tomar al menos una vez al año durante un periodo de entre 10 y 15 años. 


Publicidad
Publicidad

TodoPapás es una web de divulgación e información. Como tal, todos los artículos son redactados y revisados concienzudamentepero es posible que puedan contener algún error o que no recojan todos los enfoques sobre una materia. Por ello, la web nosustituye una opinión o prescripción médica. Ante cualquier duda sobre tu salud o la de tu familia es recomendable acudir a unaconsulta médica para que pueda evaluar la situación en particular y, eventualmente, prescribir el tratamiento que sea preciso.Señalar a todos los efectos legales que la información recogida en la web podría ser incompleta, errónea o incorrecta, yen ningún caso supone ninguna relación contractual ni de ninguna índole.

×