Juegos para el coche

Índice

• Juegos por edades para el coche
• Más ideas de juegos para niños

 

Juegos por edades para el coche

Normalmente los niños no pararán de preguntar “¿ya llegamos?” o a pelearse si van con sus hermanos, por lo que sería conveniente prevenirlo y llevar algunos cuentos, revistas, películas u otros juegos muy divertidos para viajar con niños en coche y amenizar así el viaje tanto a ellos como a los adultos:

- Para los más pequeños, es decir, entre tres y cuatro meses, lo ideal sería disponer de música infantil, sonajeros, su juguete favorito o cuentos con diferentes texturas.

- De seis meses a dos años podrás llevarlo también, pero complementándolo siempre con cuentos, videos de canciones, audiocuentos, alguna bolsa con objetos cotidianos, un recipiente para meter y sacar objetos, videos, etc.

- De dos a cuatro años los niños ya podrán elegir sus juguetes y, por supuesto, retomar todo lo anterior.

- A partir de los cuatro, ya saben leer cuentos, cambiar o inventar las historias, conocen juegos y sus reglas, ya pueden interactuar más con los adultos y juegan a enlazar palabras con la última letra, a hacer adivinanzas y trabalenguas (pues esto les ayudará a ampliar su vocabulario y a despertar su imaginación), identificar canciones, el juego del “veo, veo” con objetos visibles que empiecen por la letra que dice un jugador, leer los espectaculares y sumar todos los números de las placas de autos cuando ya saben hacerlo, etc.
 

Más ideas de juegos para niños

Una muy buena idea también es la de preparar un bingo de objetos. Lo podrás hacer en casa previo al viaje con recortes o dibujos que creas que encontraréis durante vuestro recorrido (casas, autos, bicicletas, motocicletas, semáforos, espectaculares, tiendas, árboles, nubes, ventanas, etc.). Recorta las plantillas en cartulina, y recuerda que ganará el que primero llene su cartón.

Otro juego es el de buscar la letra. Inicia el juego diciendo una letra del abecedario y pide a todos los integrantes del viaje que encuentren durante el recorrido, bien sea dentro o fuera del auto, un objeto que empiece con esa letra. Quien más palabras haya dicho con la letra elegida ganará la ronda.

También hay otros juegos muy entretenidos como el del personaje escondido. Se trata de adivinar el personaje famoso en el que estás pensando (jugador de fútbol, actores, personajes de dibujos animados, cantantes, etc.) teniendo en cuenta que las respuestas se limitan a un “no”, “sí” o “a veces”. Con este juego se ejercita la mente de los más pequeños tratando de adivinar quién es el personaje pensado.

Y hablando de cantantes, completa la canción. Los niños saben algunas canciones completas, sí, pero en este juego bastará con que recuerden simplemente el estribillo. Se pondrán de buen humor y podrás comenzar con la primera frase de la canción para que el resto de los participantes puedan ir completándola.

Una variante de este juego, por ejemplo, es decir una palabra y a partir de ella que cada jugador cante una canción que tenga dicha palabra en la letra. Perderá quien no recuerde ninguna.

Seguir la ruta. Este juego es una especie de diario del viaje, que nos servirá para enseñar geografía a los pequeños. Ofréceles una libreta a los más pequeños para que vayan dibujando o anotando los nombres de las carreteras, ríos y montañas que formen parte del recorrido. Esta actividad les servirá de diario o bitácora del viaje para cuando quieran contar que hicieron durante sus vacaciones.

Finalmente, puedes optar por otro juego bastante ameno. Se trata de completar una historia. Un jugador (el que sea) comienza a contar una historia, por ejemplo, “Había una vez un perrito que…”; después, el siguiente jugador tendrá que repetir lo que dijo el jugador anterior, pero con algo nuevo que añadir a la historia, como, por ejemplo, “Había una vez un perrito que…tenía una mancha en un ojo que parecía un parche…”, y así sucesivamente todos los jugadores hasta completar la historia.

Este juego ayuda a los niños a retener y a trabajar su memoria e imaginación, pero el que se equivoca u olvida la historia pierde.

Seguro que con todos estos juegos el viaje en auto se hará mucho más corto y se podrá convertir en una experiencia divertida, sana y educativa, simplemente con un poco de planificación, creatividad y preparación, evitando, además, que los niños griten, lloren, se desesperen o insistan una y otra vez con lo mismo: “¿ya llegamos?”

¡Suerte!