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Navidolandia

Enviado por Natyrodriguez

Navidolandia

Erase una vez un niño llamado Pablo que vivía en una casita en medio del bosque con sus padres. Su mayor deseo era conocer a Papá Noel. Todas las noches antes de navidad preparaba una bandeja con bizcocho y leche y la dejaba junto al árbol, luego se escondía detrás del sofá esperando ansiosamente la llegada de Papá Noel; pero siempre se dormía y cuando despertaba ya los regalos estaban allí.

Una noche tubo un sueño que le haría vivir una increíble aventura. Faltaba sólo 2 días para navidad y Pablo pensaba en como conocer al \"señor de los regalos\". En su sueño un duendecillo le explicaba que existía un país en donde Papá Noel preparaba todos los regalos, -¿cómo se llama ese país?- preguntó Pablo -NAVIDOLANDIA- contestó el duendecillo. -¿Y sabes cómo puedo llegar hasta él?- volvió a preguntar. El duendecillo le dijo que tenía que seguir el camino que le indicaba la estrella más brillante, en ese momento Pablo se despertó y creyó que todo fue un sueño.

La siguiente noche, cuando sus padres ya dormían, Pablo miró por la ventana y para su sorpresa... ¡había una estrella que brillaba más que ninguna!! y se dirigía hacia el norte. Sin pensarlo dos veces se vistió con su abrigo y sus botas de invierno y partió rumbo a la aventura.

Caminó y caminó y cuanto más avanzaba, más lejos le parecía la estrella. Justo cuando estaba a punto de regresar vio luces detrás de una pequeña colina, la atravesó y por fin encontró lo que tanto deseaba...frente a él había un enorme cartel lleno de luces que ponía con una alegres letras NAVIDOLANDIA.

Pablo, muy ilusionado entró corriendo y quedó maravillado ante todas las pequeñas casitas que veía llenas de luces, colores y villancicos que se oían por todas partes. Dio un largo paseo hasta que encontró una casita con un cartel que ponía \"TALLER DE PAPA NOEL\". Entró muy silenciosamente y vio la sala llena de duendecillos llamados \"ELFOS\", eran los ayudantes de Papá Noel. Pablo no podía creer lo que sus ojos veían, detrás de un gran trineo, se asomaba una figura... ¡SI, ERA EL!! con su larga barba blanca y su traje rojo.

-¿Qué hace un niño tan pequeño por aquí?-preguntó Papá Noel.

-Mi mayor deseo era conocerte y seguí la estrella brillante hasta aquí, siempre intentaba verte en navidad pero me dormía-dijo Pablo.

-Claro, esa es la magia de la navidad-, explicó Papá Noel- si todos me encontraran por la noche ya abrirían sus regalos y las mañanas de navidad ya no serían \"mágicas\"-.

Pablo recordó lo emocionante que era levantarse a abrir lo regalos por la mañana y comprendió lo que decía. Luego Papá Noel preparó su trineo lleno de regalos y le invitó a ser su ayudante para repartirlos por las casas. Finalmente Pablo se durmió y Papá Noel lo llevó hasta su cama.

Al día siguiente corrió a contarle a sus padres lo ocurrido: -¿Navidolandia? jajaja, Pablo, Pablo seguramente has vuelto a soñar- dijo su padre, pero él sabía que había sido verdad y que nunca olvidaría esa noche en la que por fin pudo cumplir su sueño...conocer a Papá Noel.

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