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Enseñar al bebé a jugar

Enseñar al bebé a jugar

Para los niños el juego es una especie de vía para aprender a moverse, interactuar con los demás y comprender el entorno que les rodea. Además, existen momentos en los que para su correcto desarrollo y tu descanso, se convierte en necesario que vuele por su cuenta. Pero siempre dentro de unos límites acordes a su edad. Prueba a acostumbrarle y a enseñarle a jugar solo y verás cómo va a resultar muy beneficioso para ambos.

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Desarrollo del juego en bebés

Los expertos indican que la capacidad de estar solo en los bebés tiene lugar en los primeros meses de vida. Por esta razón, en el desarrollo del juego siempre empiezan jugando solos. Los siguientes pasos serán el juego paralelo (jugar al lado de alguien) y el juego imitativo (juego en grupo).

Cabe destacar que los pequeños a lo largo de su primer año de vida están muy unidos a sus mamás, tanto que ni poseen identidad propia, por lo que separarse de ellas les genera gran frustración. Es muy común que en esa etapa también seas su compañera de juegos favorita y siempre intentará captar tu atención. Sin embargo, a partir de los dos años van a ir desapareciendo esas llamadas de atención a la vez que su autonomía va cogiendo fuerza.

Si quieres enseñar a tu bebé a que juegue solo, debes iniciar el aprendizaje justo antes de que comience a gatear. Para ello, lo primero que debes hacer es dejarlo solo para saber cómo actúa en solitario. Por ejemplo, una buena opción sería dejar a tu hijo en su parquecito rodeado de sus juguetes preferidos, pero recuerda que tienes que marcharte poco a poco para que no note tu ausencia. Puede resultar un poco complicado al principio porque a esta edad necesitan comunicar cada descubrimiento que realizan.

Cuando empiece a gatear y a tener más libertad de movimiento, su fascinación por el mundo que le rodea será cada vez mayor y podrá estar entretenido jugando hasta 15 minutos sin necesidad de que estés pendiente de él. No obstante, no te olvides de echarle un ojo de vez en cuando.


Consejos para que el bebé disfrute jugando

- Crea un espacio de juegos para él que no pueda presentar ningún riesgo de accidente, solo puede haber cabida para sus juguetes. Por ejemplo, si tienes que estar cocinando, coloca una manta en el suelo con sus muñecos o prueba con algunos tuppers o cucharas de madera para que piense que él también está cocinando.

- Cuando los niños son muy pequeños les cuesta mucho trabajo concentrarse en cualquier actividad. En lugar de dejarle solo el material para que se distraiga, proponle que desarrolle un proyecto que tenga principio y fin. Por ejemplo, dile que coloree algún dibujo de los cuadernos de los que disponga.

- Deja los juguetes y libros a su alcance para que el pequeño pueda ir eligiendo libremente los que quiere usar sin tener que pedírtelos. Es bueno además que haya juguetes que fomenten todas las áreas. motricidad, arte, música...

- Evita las interrupciones si tu hijo está tranquilo y feliz jugando. Es mejor dejar que la cena sea un poco más tarde que interrumpirlo. Lo normal es que él solo se canse si tiene hambre. 

- Evita todo lo posible utilizar la televisión para mantener a tu pequeño entretenido. Los niños que dependen de la televisión o videojuegos reducen su capacidad y creatividad para entretenerse sin compañía en un futuro.

- Mientras no te llame o te necesite, evita participar para que sea él solo quien monte el juego y lo dirija. No le guíes tú ni le digas cómo jugar si no le hace falta.

- No te agobies por el desorden o porque saque todos los juguetes. Luego habrá tiempo de ordenar y guardar, otra parte importante de su aprendizaje. 

Por último, recuerda que a partir de los 5 o 6 años es el inicio de la etapa de socialización. Es decir, es esencial que comience a interactuar, comunicarse y jugar con otros niños.


Fuente:

Domènech, Montse (2015), Edúcame bien, Ed. Plaza & Janés.

Fecha de actualización: 07-04-2021

Redacción: Esperanza Pavón

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