Manualidades para Navidad

• Árbol de Navidad apto para niños

Los típicos adornos navideños no son adecuados para niños muy pequeños, ya que suelen estar fabricados con materiales frágiles o potencialmente peligrosos para ellos. Si tienes un bebé en casa no renuncies a decorarla. ¡Mira las ideas de estas mamás!
 

Yo ya no pongo los adornos comunes de Navidad, lo que he hecho es vestir algunos de sus muñecos y peluches con gorros de Papá Noel y prendas típicas de estas fechas. Los peluches más pequeños los cuelgo en el árbol.
 

Mi bebé tenía ocho meses las pasadas Navidades, así que para adornar el árbol de aquel año usé pompones de lana y pequeños ovillos de colores. El árbol está precioso y muy original y no hay peligro de que el niño se haga daño con los adornos tradicionales.
 

A mis hijos les encanta adornar toda la casa por Navidad, pero una vez que estaba la decoración montada no dejaban de tocar todo lo que colgaba del abeto o de las paredes, con el riesgo de hacerse daño o romper la ornamentación. Así que un día, viendo una película, me vino la inspiración. Decidí hacerles galletas con formas navideñas, con moldes de estrellas, campanillas, abetos, ángeles, etc. Les hice un pequeño orificio en la parte superior y ¡al horno! Una vez hechas y frías, inserté un lacito rojo por el agujero que hice anteriormente y los colgué del árbol de Navidad. Cada día colocaba un par de galletas al alcance de los niños, y si se portaban bien les dejaba cogerlas y ¡comérselas! (También puedes añadir bolsitas transparentes llenas de chuches de colores). A ellos les divirtió mucho la idea y nunca más volvieron a tocar otras figuritas.
 

Durante todo el año, o unos meses antes de Navidad, guardo todas las pequeñas cajitas vacías de cartón que llegan a mis manos. En lugar de tirar los envases de las cremas hidratantes, del maquillaje, del bote de colonia o de cualquier otra cosa, los envuelvo con papel de regalo y les pongo un lazo vistoso. Después los cuelgo del árbol o si son más grandes, los coloco en su base sin temor a que mi niña se haga daño si se caen o llega a cogerlos. Si son muy chiquitines puedes dárselos y el simple hecho de desenvolverlos les entretendrá durante un tiempo mientras se divierten rompiendo el papel. Si ya tiene más edad, prueba a meter una pequeña chuchería dentro de cada paquetito o un pequeño juguete. Puedes utilizarlo como premio sorpresa cuando lo necesites.
 

• Lo hago yo mismo

Anímales a realizar ellos mismos las manualidades navideñas. Aquí tienes algunas sencillas ideas que podréis realizar juntos con materiales reciclados, al alcance de cualquiera.
 

Mantel para grandes ocasiones
Puedes crear un mantel individual para la cena de Nochebuena con ellos. Ve al campo, al parque, a la calle y coge hojas. Elige pinturas de colores y pinta las hojas. Sobre un papel blanco, tamaño Din A4, deja la huella de las hojas, retíralas cuidadosamente y deja que se sequen. Ribetea los bordes del “mantel” con pequeños toques de pintura dorada, cogiendo, por ejemplo, unas hojitas de pino a modo de pinceladas. Cuando esté seco, cúbrelo con un film adhesivo transparente y recorta lo que sobre dándole forma rectangular. Además de divertiros ya tenéis un bonito mantel de Navidad para que los críos coman sin miedo a manchar.
 

Tarjetas de felicitación
Si tu pequeño ya tiene una mínima destreza pintando y dibujando puedes pedirle que haga tarjetas de Navidad para felicitar a sus seres queridos. Coge una cartulina o un papel grueso del tamaño de un folio aproximadamente. Dile que pinte un motivo navideño, un paisaje nevado, un cielo estrellado, etc. También podéis recortar figuras de revistas o folletos que vayáis a desechar y pegarlas en la tarjeta. Para darle el toque final utiliza un cepillo de dientes limpio que ya no vayas a usar y mójalo en pintura blanca, dorada o plateada  (valdrán témperas o acuarelas) y salpica el dibujo pasando el dedo por las cerdas del cepillo y apuntando a la tarjeta. Si empleáis pintura blanca sobre un paisaje o un muñeco de nieve, las salpicaduras simularán los copos cayendo. En este caso utiliza una tarjeta oscura para que la “nevada” pueda apreciarse. Los colores metálicos darán un aspecto estrellado y brillante sobre un fondo azul noche. 
 

Minis árboles de Navidad
Cuando salgas con tus hijos al parque o al campo aprovechad para hacer acopio de piñas piñoneras. Cuanto más grandes mejor. Una vez en casa necesitarás un tapón de una botella de agua o de refresco por ejemplo, que deberás llenar con plastilina. Esta será la base. Pincha en ella la piña por la parte del tallo y asegúrate de que queda estable. Ahora repite lo mismo tantas veces como mini árboles de Navidad quieras. Píntalos de verde y una vez secos sólo tendrás que pegar los adornos. Emplea pequeñas bolitas o abalorios de bisutería, perlitas de algún collar roto, lentejuelas brillantes, etc. Y si encuentras una mini estrella para coronar la copa del árbol tendrás un estupendo y diminuto árbol de Navidad.
 

Corona de Adviento con mis manos
Mi peque hizo esta manualidad en el cole hace un par de años. Me encantó cómo quedó y lo sencilla que es de hacer. Desde entonces la hacemos cada año. Necesitarás cartulina verde (yo la hago con dos tonos de verde), pegamento, un lazo rojo, dos platos (uno más grande que otro), un lápiz y unas tijeras. ¿Lo tienes? Empezamos: Dibuja dos círculos concéntricos de manera que formen un aro. Puedes ayudarte de los platos. Recorta la parte interna y tírala. Esta será la forma de la corona. Después, pide a tu hijo que dibuje su mano apoyándola sobre una cartulina verde y delineando su contorno con el lápiz. Deberá hacer al menos 15 o 20 manos. Una vez terminadas hay que recortarlas. Estas harán de hojas de acebo. Una a una pégalas sobre la circunferencia dibujada siguiendo la forma de una corona. Cuando acabes con la primera línea pega las demás sobre las primeras. Para rematar solo queda pegar el lazo sobre las hojas. También puedes añadirle purpurina u otros adornos.
 

Angelitos de la guarda
Esta manualidad es muy fácil de hacer, por lo que los niños podrán realizarla ellos solos. Se hace con filtros triangulares de café de los que se emplean para cafeteras de goteo. Mete una bola de algodón en el centro del filtro para crear la cabeza del ángel. Coloca un segundo filtro sobre el anterior, cubriendo la parte externa. Así se harán las capas de la “túnica”. Ata un cordel o cinta dorada o plateada alrededor del “cuello” de la figura, es decir, por debajo de la bola de algodón, de manera que no se caiga. Coge un tercer filtro y córtale los laterales, mientras sigue unido por el extremo inferior. El filtro quedará en forma de pajarita. Hazle dobleces al estilo acordeón. Pliégalo todo bien. En el centro de la tira doblada, ata una cinta y expande los extremos. Estas serán las alas. Pégalas a la espalda del angelito. Ahora solo queda pintarle la cara, añadirle un poco de purpurina o pintura brillante y un halo con un limpiapipas. Cuando esté listo ya puedes colgarlos del árbol o donde elijan los niños.