Cuida los ojos de tu bebé

Indice

• ¿Cómo son los ojos de un recién nacido?
• Diagnóstico precoz de enfermedades visuales
• Desarrollo de la vista mes a mes
• Unos ojos perfectos

¿Cómo son los ojos de un recién nacido?

Nada más nacer, los párpados pueden estar hinchados como consecuencia de la presión sobre la cara durante el parto, especialmente el superior. Lo normal es que al tercer día recuperen su aspecto.

La apertura del ojo, a veces, no es simétrica durante los primeros días debido a la hinchazón de los párpados, pero si persiste después de la desaparición de la inflamación, deberás consultarlo al pediatra.

Es frecuente observar una pequeña hemorragia (conjuntival) en la parte blanca del ojo (esclerótica), que se debe también al trauma durante el parto. Suele desaparecer antes de las 3 semanas.

A los pocos días del nacimiento puede observarse una hipersecreción lagrimal en uno de los ojos (siempre está mojado). Es lo que se conoce en medicina como obstrucción del conducto lagrimal. Para prevenir una infección e inflamación (Dacrioadenitis) e intentar solucionar la fase aguda de la sobreinfección, límpiale el ojo y aplícale un colirio. A los 6 meses se desobstruyen espontáneamente la mayoría de los conductos.

El color del iris no se puede saber de forma certera hasta los 6, o incluso los 12 meses de edad, porque su pigmentación cambia progresivamente.
 

Diagnóstico precoz de enfermedades visuales

En cuanto nacen, los bebés son sometidos a una evaluación inmediata de su capacidad visual. De esta forma, se puede anticipar el diagnóstico de dolencias visuales congénitas, como las cataratas –causadas por infecciones como la rubéola o la toxoplasmosis- o hereditarias, como el glaucoma o la miopía.

Este examen tiene en consideración el color de la pupila, el tamaño, el brillo y la simetría de los ojos. Según los especialistas, los tres primeros meses de vida son los más importantes para el correcto desarrollo de la vista.

Los bebés prematuros reciben una atención especial porque suelen presentar problemas en la retina. Por ello, son sometidos a un examen más puntilloso, con la pupila dilatada para observar bien la retina.

Durante el primer año de vida, en cada revisión pediátrica el médico seguirá observando la evolución de sus ojos para confirmar su salud y desarrollo.
 

Desarrollo de la vista mes a mes

- Recién nacido: Su visión es borrosa durante los primeros días. Muestran preferencia por las caras humanas, sobre todo por la de su madre. Como su vista no es nítida, distinguen mejor a las personas de piel blanca y cabello oscuro.

- Primer mes: El bebé sólo distingue borrones, bultos sin diferenciar colores y contrastes de luz. Sigue la fuente de luz al realizarle una exploración, también aparece el reflejo de fijación a la luz. Es capaz de distinguir la cara de su madre de la de un extraño. A partir de la tercera semana de vida, sus glándulas lacrimales empiezan a funcionar.

- 3-5 meses: Comienza a diferenciar colores y las imágenes ganan nitidez. A partir del cuarto mes podrá ver imágenes en tres dimensiones. Durante estos meses le llaman la atención los estímulos más brillantes. Al acercarle un objeto abre más los ojos, retira la cabeza y se protege con las manos. Enfoca objetos a distancia pero aún capta las imágenes en tonos apagados. A partir del 5º mes coordina su vista y su motricidad.

- 6 meses-3 años: Hacia los 6 meses tiene ya la vista parecida a la de un adulto, con profundidad, colores y contrastes. Sólo le falta nitidez total.

- 3 años: El niño ve perfectamente, pero continúa desarrollando su vista para distinguir los pequeños detalles.

- 5/6 años: A partir de esta edad, ya tiene nitidez total, igual que la de los adultos. Incluso ve objetos pequeños y distantes con facilidad.
 

Unos ojos perfectos

Para potenciar su capacidad visual y detectar cualquier problema a tiempo, hay que estar atento a ciertos detalles.

- No te preocupes si tu bebé tiene estrabismo al nacer, hasta los 4 meses no es definitivo. Si después de esta edad observas que uno de sus ojos gira hacia dentro, consulta a un oftalmólogo.

- La luz natural es importante para el desarrollo de sus ojos. Evita colocar al bebé siempre en penumbras. Si tu niño llora o lagrimea cuando está expuesto a mucha luz, consulta a tu pediatra.

- Muéstrale objetos de muchas formas y colores contrastados para acentuar su desarrollo visual. 

- Mueve delante de sus ojos una luz para que se acostumbre a seguirla con la mirada.

- Cámbiale la posición de la cuna de vez en cuando para que pueda ver diferentes panoramas.

- No dejes objetos puntiagudos cerca de él.

- La higiene de los ojos es muy importante. No le apliques ningún producto en ellos sin indicación médica. En los primeros años de su vida, los niños producen mucha más mucosidad que los adultos. Así, es habitual que se despierten con más legañas. En estos casos es aconsejable limpiar los párpados con toallitas estériles.

- Visita al oftalmólogo por lo menos una vez al año.

- Ayúdale a coordinar ojo-mano y ojo-pie, jugando a la pelota, al globo, o con una raqueta.

- Cuida sus ojos del sol, protégele en verano con una gorra o incluso con gafas de sol, ahora las hacen especiales para bebés.