"En vacunas, el beneficio supera clarísimamente al riesgo", Dra. Myriam Triana

TodoPapás: ¿Cómo surgió el blog de A demanda?

Dra. Myriam Triana: Me di cuenta de que las dudas que comentaban los padres, tanto en la consulta como en Urgencias, se repetían con frecuencia y pensé: “Si la mayoría de los padres tienen las mismas preocupaciones sobre la salud y crianza de sus hijos, ¿cómo hacer llegar esto a mucha más gente y no quedarme sólo en mis pacientes?”. Y así surgió el blog. Además, hoy en día prima la inmediatez y muchos consultan primero al “Dr. Google”. Pero no todo lo que hay en internet es fiable; por eso quise crear un “rincón” en el que los padres encuentren información científica y veraz

TPP: En tu blog hablas de muchos temas sobre el cuidado de los niños… ¿qué crees que es lo que más preocupa a los padres actualmente?

DMT: ¡Difícil pregunta! Hay mucho que preocupa… Pero creo que uno de los temas estrella en pediatría es la fiebre. Les preocupa que sea alta, que no baje, que el niño/a pueda convulsionar y les preocupa no saber de dónde viene. Otro tema estrella es la lactancia: ¿será suficiente mi leche? ¿No le alimenta? ¿Cada cuánto debo darle? Y también hay muchas preocupaciones en cuanto a la crianza: ¿Debo o no cogerle en brazos? ¿Se acostumbrará? ¿qué pasa si duerme en nuestra cama? ¿Cuándo meterle en la guardería?

TPP: ¿Hay un exceso de información actualmente para los padres? ¿Es complicado saber qué es lo mejor para los hijos?

DMT: Efectivamente, hay un exceso de información, y el problema no está en que la haya (suelo decir que el saber no ocupa lugar), sino que muchas veces la información no es fiable. Hoy en día tenemos poca paciencia y consultamos inmediatamente en internet y, a menudo, los padres acuden preocupados porque han leído esto y lo otro en Google.

TPP: Eres defensora del Baby Led Weaning… ¿lo planteas en tus consultas? ¿Cómo se lo toman los padres?

DMT: Siempre les hablo de este método en la consulta cuanto toca explicar la alimentación complementaria. Algunos lo conocen y ya saben que quieren aplicarlo; a muchos, en cambio, les da miedo que el bebé se atragante al comer. Por supuesto, el BLW no es la única opción de alimentación complementaria, pero sí suelo insistir en la importancia de introducir alimentos menos triturados a partir de los 8-10 meses de edad. También hago mucho hincapié en qué alimentos no hay que ofrecer por el riesgo de atragantamiento.

TPP: ¿Qué beneficios ofrece el BLW frente a la introducción de los alimentos triturados?

DMT: Por un lado, los niños aprenden a comer guiados por las sensaciones de hambre y saciedad; ellos son los que deciden qué, cómo y cuánto comen; esto podría ser beneficioso para evitar la sobrealimentación (recordemos que en nuestro país hay una epidemia de obesidad en los niños y jóvenes). Además, aprenden a apreciar los sabores y las texturas; en un puré de verduras es difícil saber exactamente qué lleva; en cambio, en BLW, el brócoli sabe a brócoli y tiene textura de brócoli y el pollo a pollo. Otro aspecto que me encanta de este método es poder compartir con ellos este rato de la comida, que lo vean como algo social y se sientan integrados: los sentamos a la mesa con nosotros y todos comemos lo mismo. Y, por último, destacaría la parte psicomotriz, como si de un juego se tratase, mejoran su motricidad fina.

TPP: También dedicas un apartado especial a las vacunas… ¿Qué les dirías a los que creen que las vacunas no son necesarias o que incluso pueden ser perjudiciales?

DMT: Suelo decirles que, en medicina, siempre valoramos riesgo y beneficio; si algo tiene un riesgo que supera al beneficio, no lo aplicamos. En vacunas, el beneficio supera clarísimamente al riesgo y es que, con excepción de la potabilización de agua, la vacunación es la intervención sanitaria que mayor efecto ha tenido en la reducción de la mortalidad en todo el mundo. Así, enfermedades como la poliomielitis (que afecta al sistema nervioso pudiendo causar parálisis en horas, y llevar a la muerte), ha disminuido drásticamente en nuestro país gracias a la vacuna (pasando de 2.300 casos declarados en 1959 a 0 en 2014).

TPP: ¿Hay en España cada vez más antivacunas?

DMT: Sí, desgraciadamente los hay

TPP: ¿Son necesarias todas las vacunas que aparecen en el calendario vacunal, incluidas las de pago?

DMT: Sí, todas las vacunas que aparecen son las recomendadas en nuestro país (aunque no mucho, los calendarios vacunales varían en función de los países, y a veces también de las regiones, dependiendo del riesgo que exista de contraer determinadas enfermedades). Cada vacuna protege frente a una enfermedad determinada, así que, si queremos estar protegidos frente a todas, sí, son todas necesarias. Y todas han demostrado ser eficaces y aportar un beneficio superior a un posible efecto secundario de vacunarse. Pero para valorar cada vacuna en concreto debemos analizar las consecuencias de padecer la enfermedad frente a la que protegen, así como la frecuencia con la que aparecen en nuestro medio. Por ejemplo, la meningitis es una enfermedad rara en nuestro medio (afortunadamente), pero con una elevada morbimortalidad (1 de cada 10 fallece y muchos de los que sobreviven tienen secuelas). El rotavirus, en cambio, es muy, muy frecuente en nuestro medio (prácticamente todos los menores de 2 años lo han padecido) cursando con vómitos, diarrea y a veces fiebre; aunque en los más pequeños suele ser más agresivo, precisando ingreso y fluidoterapia intravenosa con cierta frecuencia, sólo excepcionalmente el desenlace es fatal en nuestro entorno (no sucede igual en países en vías de desarrollo).

Es importante también recordar que el calendario vacunal engloba vacunas financiadas (la mayoría) y algunas que debemos pagar los padres, sin que esto signifique que unas sean menos recomendables que otras.

TPP: ¿No es malo vacuna a la vez de tantas enfermedades diferentes y en tan poco tiempo?

DMT: No, no lo es. Debemos tener en cuenta que los más pequeños son los más vulnerables; por un lado, tienen un sistema inmune aún muy inmaduro; por otro, “comparten” todo (juguetes, besos, mocos…) y eso hace que se contagien con facilidad. Así, por ejemplo, el 95% de los niños menores de 2 años habrá sufrido al menos una gastroenteritis por Rotavirus, y la meningitis en más frecuente en menores de 1 año (con otro pico de incidencia en la adolescencia). ¿Qué sentido tendría vacunarlos mayores? Además, el mecanismo de acción de las vacunas ha sido ya ampliamente estudiado, y está comprobado que la administración simultánea de varias de ellas, de la forma en la que están dispuestas en el calendario vacunal, garantiza una correcta formación de anticuerpos (es decir, son efectivas) sin aumentar los efectos adversos.

TPP: ¿Cuáles son sus efectos secundarios de las vacunas ¿Qué hacer ante ellos?

DMT: Los efectos adversos más frecuentes de las vacunas son leves y transitorios: dolor, enrojecimiento y/o hinchazón en el punto de inyección y fiebre. En el caso de que suceda, podemos administrar paracetamol (en general NO se recomienda administrarlo antes de la vacuna “para prevenir”). Rara vez (aproximadamente 1 caso por cada millón de vacunas puestas) aparecen efectos adversos más graves (reacciones anafilácticas o encefalopatía).